El lunes había pasado rápido, a pesar de que haya tenido que asistir al colegio. Pero su mente estaba concentrada en el viaje de mañana. Ese día se preocupó solo por armar su valija con mucha precaución, no quería olvidarse de ningún detalle.
Las siete horas de vuelo se pasaron volando - en los dos sentidos - La mayoría del tiempo durmió, ya que estaba cansada de oír las conversaciones entre Pedro y Stefano, que estaban sentados a su derecha. Ellos trataban de integrarla de vez en cuando en su charla, pero no había caso. No sabía nada de autos, ni estaba enterada de los últimos partidos de fútbol, y menos que menos de rugby. Por eso prefirió dormirse.
Estaba envuelta en una de esas mantas azules, esas que te dan en los aviones, ya que el aire acondicionado estaba muy fuerte para su gusto. En los momentos que no dormía, miraba a la gente pasar y a los ñiños jugar, o ojeaba una que otra revista.
Cada tanto Cristóbal venía a visitarlos, y se sentaba en las piernas de Pedro, que estaba ubicado en el medio de los tres asientos, y se unía a su conversación de hombres. El pobre estaba aburrido, ya que estaba sentado unos asientos más adelante con sus padres. Los veía a los tres reírse, de cosas que ella no entendía. Deberían ser códigos entre hombres. Lo veía a Lleca entretenido, era raro ya que ninguno de sus amigos le habían caído bien. Vale aclarar que al único que conoció fue a Federico, y tiene razones para que no le agrade.
Al llegar al aeropuerto y hacer todos los trámites, un micro los llevó hasta Bahía Principe, el hotel donde iban a ser alojados. Miró por la ventana durante el trayecto. Estaba todo oscuro: ya era de noche.
El hotel era increíble. Era muy amplio y luminoso. Tenía todas las comodidades, que un hotel 5 estrellas pudiera tener.
El gran problema se armó cuando empezaron a decidir las habitaciones. Ni Salvador, ni Nicolás querían que ni ella ni Pedro durmieran juntos, pero después de todo terminaron accediendo, gracias a Emilia y Gimena.
Después de haber degustado un gran banquete, cada uno partió hacia su habitación correspondiente. A pesar de haber dormido casi todo el viaje, estaba desgastada. Había sido un día muy largo.Era miércoles y amanecía. El Sol iluminaba la habitación que estaba en penumbras. Afuera era un día increíble. Mariana abrió los ojos y se estiró aprovechando todo el ancho de la cama. Giró su cabeza y lo vio a Pedro durmiéndo plácidamente en la cama que estaba al lado. Tocaron la puerta. Se sacó las sábanas blancas que la envolvían y fue a ver de quién se trataba. Era Cristóbal y su hermano Stefano.
Ll: Qué carucha mamu, eh? Recién nos despertamos?
La: (frotándose el ojos y bostezando) Si
Cr: Nosotros vamos a desayunar, querés venir?
La: Dale, despierto a tu hermano y voyDespués de cerrar la puerta fue dirección a donde su amigo estaba. Se tiró arriba de él."Pedrito..." dijo cariñosamente en su oído. Juan Pedro abrió los ojos despacio, dándo señales de vida.
La: No fue tan dificil esta vez despertarte...
Pe: Te molestaría salir de arriba mio?
La: (sonriéndole) PerdónMariana salió de arriba de él, pero se quedó a su lado. Se fregó los ojos, para lograr despertarse. Le quemaba la cabeza. Sentía que le iba a estallar de un momento a otro. Volvió a cerrar los ojos. Al mantenerlos cerrados, le aliviaba un poco ese repentino dolor de cabeza. Pero también al cerrarlos, se pudo dar cuenta, que algo también le fastidiaba. Le molestaba la panza.
" Me aflojaste che! Me volviste a cerrar los ojos! " le dijo ella riéndose. Volvió a abrirlos y la vio a ella riéndose. Eso lo distrajo un poco, y no le hizo pensar en sus síntomas de ese momento. Sintió la mano suave de ella acariciándole su rostro. La sonrisa de Mariana cambió a una expresión confusa y extraña.La: Vos te sentís bien, Peter?
Pe: (cerrándo los ojos, despeinándose el cabello) Más o menos..por?
La: (tocándole la frente) Porque estás hirviéndo Peter! Tenés fiebre!
Pe: Mirá si voy a tener fiebre. No exageres Lali. Voy al baño.
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SENTIMIENTOS.
RomanceNovela laliter. Es una novela que lei hace mucho y me encanto. Aclaro que no la escribo yo, y no se quien es la autora. Si algun dia lee esto hagase presente