Detrás del delantal

Capítulo 22

*narra Mendicuti*

La fuente de Masterchef es, cuanto menos, curiosa. Observarla me distrae de mis repetidos pensamientos y de esta noche, que podría haber sido maravillosa si ella me hubiese prestado atención. Pero no. El amor es muy caprichoso. Tengo que ser paciente, todo llegará. Por cierto, os he dicho que Samantha se parece a mi abuela?

Mauro: Adoro esta fuente.

Mendicuti: Eh, Mauro. No te he visto llegar.

Mauro: Claro, últimamente estás en Babia.

Mendicuti: Tú también, chavalote.

Mauro: Necesito explicarte algo... No puedo aguantarme más, pero no se lo digas a nadie, por favor.

Mendicuti: Ya lo sé. Tú y Martina estáis saliendo, ¿verdad?

Mauro: ¿Qué? ¿Cómo lo sabes?

Mendicuti: He observado vuestro intercambio de miradas... Es mágico, solo se da cuando dos personas se corresponden.

Mauro: Qué cursi eres. Pero tienes razón. ¿Me dirás ahora quién es la culpable de que te pases el día entero en Babia?

Mendicuti: No puedo negarme, será mejor sacarlo y a ver si puedes ayudarme... Ella es...

*narra Mauro*

Entiendo que a Mendicuti le guste. Es muy guapa. Yo al principio también me fijé en ella, pero cuando apareció Martina, se me olvidaron todas las demás.

Mauro: Lo tienes chungo, tío. No está muy pendiente de ti.

Mendicuti: Lo sé, pero tengo que prepararle algo grande. ¿Me ayudarás?

Mauro: Por supuesto. Lo conseguirás.

Y de verdad creo que lo conseguirá. Mendicuti es un grande.