Detrás del delantal

Capítulo 60

*narra Ana*

El desayuno de hoy es desastroso. Nunca se había respirado tan mal ambiente. Estoy tan enfadada con Martina y Manuel... Es una ira sin argumentos, me siento así y ya está. Me da tanta rabia que haya fastidiado nuestro casi beso que tengo la sensación de que Manuel ya nunca más va a querer besarme. ¿Pero al final qué pasa con nosotros? Me ha confesado que le gustaba, pero... ¿sigue haciéndolo? Ayer parecía que sí. Pero hoy no tengo ganas ni de verle la cara, que se vaya con su nueva mejor amiga Martina.

Por otra parte, el nuevo lío de Aina y Mauro está presente. Solo lo sabemos las chicas, y por lo que dice Martina, también Manuel. Pero parece que Martina esté a punto de explotar, parece que necesita explicárselo a Mendicuti para fastidiar a Mauro.

Y finalmente, está la ruptura de Marta y Lluc. Lluc está apagadísimo y parece que Víctor ya lo sabe, porque muestra una sonrisa triunfal.

*narra Mendicuti*

Como buen observador que soy, noto que está pasando algo que yo no sé. Miradas cómplices, miradas asesinas... Un poco de todo, pero miradas ocultando algo. Además, Mauro está muy raro, me evita.

Voy un momento a la sala común a buscar la chaqueta que me dejé ayer, pero al pasar por delante de la piscina veo que ahí está Marta, cabizbaja.

Mendicuti: ¿Qué te pasa?

Marta: ¿Por?

Mendicuti: Noto que te pasa algo, si no quieres contármelo me voy.

Marta: Ayer dejé a Lluc y no para de hacerme sentir mal con sus miradas de decepción.

Mendicuti: Es normal, tus motivos habrás tenido. Lo superará. Y tú encontrarás a alguien que te haga feliz o igual podéis arreglarlo.

Marta: No lo sé... Sinceramente, no sé lo que quiero. Tú también estarás bastante jodido con lo tuyo. Uy, no debería de haber dicho eso.

Mendicuti: ¿Con lo mío?

Marta: Sí... Vaya, lo de Aina.

Mendicuti: MARTA EXPLÍCAMELO. SABES ALGO QUE YO NO SÉ.

Marta: No soy la persona adecuada para decírtelo.

La miro fijamente, pongo la mejor mirada de súplica que sé. Me niega con la cabeza.

Mendicuti: DÍMELO O TE TIRO A LA PISCINA.

La cojo en brazos antes de que se pueda escapar.

Marta: Para, para, para...

Mendicuti: Vas a caer en 3, 2...

Marta: Está bien. Aina y Mauro se han besado.

Era algo tan inesperado que me resbalo y caemos los dos a la piscina.