Capítulo 50

178 11 2
                                    

*narra Ana*

Ana: Pues quiero que la prueba de eliminación sea de marisco.

Aina: Yo prefiero de repostería.

Manuel: ¡De casquería molaría!

Aina: Shhhh, sale eso y me muero.

De repente aparece Martina con lágrimas en los ojos y se abalanza sobre Manuel. Oigo que le susurra algo como: <<No ha ido del todo mal. Gracias...>>

Os podéis separar ya, pienso, lleváis mucho rato abrazados. ¿Qué se traerán estos dos entre manos?

Manuel: Cuéntamelo todo.

Y se alejan, pero demasiado cogidos para mi gusto.

Aina: ¿Quieres una flecha y un arco?

Ana: ¿Eh?

Aina: Para disparársela a Martina, digo. Aunque si tus miradas lanzasen flechas ya tendría por todo el cuerpo.

Ana: Me enerva no saber qué pasa entre esos dos.

Aina: Pues pregúntaselo a Manuel.

Ana: No quiero ser la típica mejor amiga celosa. Ni hablar. Estoy muy por encima de todo eso.

Aina: Pues no lo parece, ejem, ejem.

Ana: Préstame el arco y la flecha. QUE DISPARO A TU PRECIOSA BOCA.

Aina: Entonces ya no podría aconsejarte más y las dos sabemos que te encanta.

Ana: ¿Por qué eres tan puta? JAJAJAJA.

Aina: Porque tengo una buena maestra. Ets més puta que les gallines.

Entiendo a la perfección esa frase en catalán, ya que se parece muchísimo al castellano y sobretodo porque me la ha dicho ya mil veces. Y siempre me viene a la mente la misma pregunta... ¿Por qué las gallinas son putas? Ella dice que es porque ponen un huevo cada día.

Ana: Cambiando de tema. No te importa que yo con Manuel... Ya sabes....

Aina: Tranquila. Hice borrón y cuenta nueva con Manuel. Es absolutamente tuyo, además, estáis hechos el uno para el otro.

Ana: ¿Qué tal con Mendicuti?

Aina: No sé, he intentado hacer algún acercamiento, pero está muy dolido.

Ana: Se le pasará. Me alegra que hayas recapacitado.

Aina: Eso espero. De verdad que me siento fatal... Fui tan cobarde. Qué lástima que sólo seamos capaces de analizar las cosas cuando hayan ocurrido.

Ana: Si ya lo dice Plutarch, somos seres inconstantes y estúpidos con mala memoria y un don para la autodestrucción.

Aina: RT para Plutarch.

Ana: Te quiero, Plutarch.

Aina: Te quiero, Haymitch.

Ana: Te quiero, Gale.

Aina: ¿A Gale? ¿What? El chico del pan hasta el infinito. TE QUIERO, PEETA.

Ana: Ahí Suzanne Collins se columpió... Yo siempre shippearé a Katniss y Gale.

Detrás del delantalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora