Capítulo 69

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CAPÍTULO 69

*narra Lucas*

Desde que Claudia me besó, pasamos el día haciendo eso, es decir, besándonos. Realmente no siento nada fuerte, pero besarse es un sentimiento agradable, así que no tengo intención de parar. Lo que me preocupa es que Claudia piense que sí que hacemos algo más que besarnos, que piense que hay sentimientos por medio. Pero de momento es una conversación que pienso evitar.

*narra Rocío*

Marco y yo nos hemos hecho inseparables. Supongo que lo que más nos ha unido han sido nuestras parecidas vidas amorosas, los amores no correspondidos. De todos modos, es un chico tan divertido que la mayoría del tiempo nos estamos riendo. Muchas veces me sorprendo de sus originales ocurrencias.

Rocío: Venga, enséñame a bailar el baile del suricato. - me mira con reproche - ¡Va! ¡No me lo niegues otra vez!

Marco: Sabes que es algo que no puedo hacer sin A...

Rocío: Shh, no vuelvas a nombrarla. En serio, tienes un problema.

Marco: Pues tú no me ayudas.

Rocío: ¡¡No seas mentiroso!! Soy demasiado buena y tolerante con tus repetidos comentarios sobre Ana.

Marco: Al final vas a acabar odiándola por mi culpa.

Rocío: Cierto, porque a ti ya te odio JAJAJAJA.

Marco: Entonces... Vete, olvida mi nombre, mi cara, mi casa y pega la vuelta!! - empieza a cantar, muy afectado. Y yo no puedo parar de reír, es un don que tiene. Que por muy tontas que sean sus tonterías, la manera de decirlas que tiene hace que siempre me ría.

Y, así de la nada, un deseo se apodera de mi cuerpo. Me acerco a él y le beso. Y después otro. Y otro. Me mira y se ríe, me río con él. Y ahora es él el que me besa. Creo que me hacen sentir mejor, aunque no me permito pensar en otra cosa que no sean sus labios.

Detrás del delantalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora