Detrás del delantal

Capítulo 53

*narra Ana*

Una pena que se marchen tres más de nuestros compañeros: Claudia, Rocío y Teresa. Hemos organizado una fiesta de despedida y, en ella, estamos jugando al "Yo nunca", que consiste en decir algo que nunca has hecho y los que beban es porque sí lo han hecho. Nosotros, al ser menores, bebemos Redbull, para mantenernos despiertos.

Ana: Yo nunca... he dejado de lado a mi mejor amigo por otra.

Martina bebe, supongo que pensando en Mauro y Rocío, pero Manuel no lo hace y me molesta. Le miro indiscriminadamente.

Manuel: ¿Qué? No pienso beber, no estoy de acuerdo.

Mendicuti: Uy, el ambiente está caldeado desde un buen principio. Me apunto a caldearlo más. Yo nunca le he dado calabazas a alguien de mala manera.

Aina y Marta beben. Aina mira a Mendicuti con el semblante dolido.

Mauro: Yo nunca he fingido salir con nadie.

Yo bebo, todavía me acuerdo de lo de Marco, Víctor y Martina también beben. Martina está mucho más contenta desde que se ha arreglado con Rocío, aunque ella se vaya mañana. Pero en cuanto Mauro ha dicho esto, le ha cambiado la expresión.

Manuel: Yo nunca he dudado de mi amor hacia alguien.

Aquí beben casi todos: Mauro, Rocío, Marta, Víctor, Mendicuti, Aina, Teresa y Guillermo.

Marta: Yo nunca me he enamorado de mi mejor amigo.

Yo bebo, porque total, Manu ya sabe que me gustaba. Lo que no sabe es que todavía me sigue gustando.

*narra Manuel*

Ahí Marta ha ido a putear. Mendicuti y Mauro me susurran repetidos: ENAMORADO, ENAMORADO...

Y como hoy me siento dominado por mi yo malo, bebo. Todos los demás, aplauden. Ana y yo nos quedamos perplejos.

Manuel y Ana: ¿Qué pasa?

Marta: Que por fin habéis confesado lo que sentís el uno por el otro.

Manuel: Pero...

Estoy más rojo que un tomate.

Mendicuti: Dejadles, ya arreglarán lo que tengan que arreglar ellos dos a solas. Venga, Víctor, di alguno que todavía no has abierto la boca. - le susurro un "gracias" a mi gran amigo.

Victor: Yo nunca he tenido miedo a que me dejen.

Martina y Lluc beben.

Rocío: Yo nunca he salido con nadie para olvidarme de otra persona.

Aquí el único que bebe es Víctor. Claudia sufre un momento de confusión, después analiza la pregunta y su propia situación, mira a Víctor con desdén, le pega una bofetada y se larga. Víctor, aparentemente avergonzado, decide ir tras ella.