Detrás del delantal

Capítulo 119

CAPÍTULO 119

*narra Mendicuti*

Yo no suelo pelearme con la gente, pero... La situación de ayer lo requería. No fue una pelea muy justa, Marco, Marta y yo le dimos unos buenos golpes, los demás se mantuvieron al margen, lo único que hacían era animarnos, excepto Claudia, que corrió a ayudar a Efrén y por poco no se lleva un tirón de pelos de Marta. Hay que ver lo buena que es Marta dando patadas y puñetazos, casi lo hacía mejor que Marco y yo juntos.

Bueno, espero que cuando Ana y Efrén se encuentren se arregle todo y descubramos por fin qué se trae este chaval entre manos.

Voy a buscar mi desayuno a la barra y me encuentro a Marta.

Mendicuti: Buenos días. - le digo a mi amiga, con mi mejor sonrisa. Ni siquiera se digna a girarme la cara, coge su café y se marcha. Cada día entiendo menos a las mujeres.

Cuando ya tengo mi desayuno, voy a la mesa, donde están todos. Me siento al lado de Marco.

Mendicuti: ¿Cómo va tu moratón? - le pregunto, tocándoselo para hacerle la gracia.

Marco: ¡Quita, quita! Que todavía duele. Pues imagínate cómo debe estar Efrén... - una sonrisa maliciosa le asoma por la cara.

El desayuno transcurre sin ningún tipo de conflicto, hablamos de temas banales, intentando que vuelva el buen rollo. Hasta que le pido a Marta que me pase las galletas. Me ignora.

Mendicuti: Marta, ¿me has oído? ¿Me pasas las galletas?

Marta: ¿Por qué no se lo pides a Aina? - me reprocha, tranquilamente - Aunque esté lejos de ti seguro que la atraes con tus pensamientos, como piensas tanto en ella, ya sabes... - levanta una ceja.

Mendicuti: ¿Pero qué estás diciendo?

Marta: Nada, solo que me extraña que prefieras a ropa vieja que ya la ha utilizado, no una, sino dos veces, tu mejor amigo, antes que a alguien que siempre ha estado a tu lado. Pero tranquilo, Marta Álvarez no se va a deprimir por eso. Eso no lo consigue nadie. Buenos días, chicos.

Y se larga, con aires de diva. Otra vez su lado oscuro, pero esta vez he sido yo el afectado. Pero, ¿por qué? Esta contestación no tiene argumentos. ¿Que prefiero a Aina antes que a Marta? Creo que le he demostrado en varias ocasiones lo contrario, que nuestra amistad es muy importante para mí... Pero desde hace unos días algo ha cambiado. Algo que hace que nuestra relación ya no sea la misma.