Hale Knight

Nicole Barton.

Miré la diana justo enfrente de mí desde la altura. Disparé la flecha esperando que diera en el centro, pero estuvo fuera por un par de centímetros.

—Concéntrate. Si estas distraída no lo lograras.— dijo papá desde el suelo mirando mi arco y luego la flecha que acabo de soltar.

Me frustraba toda esta situación. Me tensaba pensar en Hale desaparecida. Y me daba estrés saber de la situación tan deplorable de James. Me angustiaba no tener buenas noticias de ninguno de ellos.

—¡No puedo!— grité al tiempo que soltaba el seguro de la cuerda para bajar a la altura de mi padre. —No lo haré.

Arrojé el arco y el carcaj al suelo sintiendo toda la presión de los pasados eventos sobre mis hombros. Quería golpear algo, y con fuerza, pero al mismo tiempo solo quería quedarme en cama y llorar. Los ojos se me llenaron de lagrimas mientras trataba de retenerlas dandole la espalda a mi padre.

—Tranquila Nikky. Solo necesitas aclarar tu mente.— oi su voz detrás de mí.

—No lo soporto.— mi voz sonó ahogada y cortada. —Quiero ver a mi amiga, y quiero que James este bien. No quiero verlo de esa manera papá.— me giré hacía él sabiendo que había escuchado todo eso. —Quiero saber con certeza que Hale esta viva.

—Oh pequeña— se acerco a mí y me abrazo. Lo rodee con los brazos sintiendo su calor sobre mí. —Yo tampoco quiero que las cosas estén de esta manera pero no hay mucho que podamos hacer para cambiarlo. Solo nos queda esperar.

—No quiero esperar. Quiero que estén ambos sanos y salvos aquí. Con nosotros. Me duele el corazón ver a James perder la cabeza de esa manera y tener las manos atadas sin poder hacer nada.

Se quedó en silencio toda la sala y lo único que podía escuchar era la respiración de él.

—¿Por qué no descansas, he? Tal vez necesitas reposar un poco.

—Sí. Tal vez tienes razón.— dije al tratar de soltarme de él.

—¿Cómo te sientes Nikky?— levanté la mirada hacia él sin entender a que se refería —Tu hermano no ha hecho buenas decisiones en estos últimos meses.

Suspiré. Pensar en mi hermano mayor Francis solo me hacia tener dolores de cabeza tan monumentales como el Monte Rushmore, y cargaba más a mi conciencia sobre lo que paso con él probablemente por nuestra culpa, por no mantenernos unidos como una familia.

—Me siento mal por él. Y me siento mucho peor después de lo que dijo Edward— dije mientras recogía del suelo mi arco y carcaj.

—¿Qué fue lo que dijo Edward de él?

Voltee a mirar a papá, creí que lo sabia pero supongo que Fury jamás le dijo nada a papá sobre el informe de Edward.

—Recuerdas el ataque a la torre hace un par de meses atrás ¿no? Cuando James y Hale siguieron la nave y Edward se fue con ellos por accidente.— él asintió —Bueno resulta que no solo se llevaron a Xander Vulture esa vez, sino igual a Francis.

—¿Cómo?

—Es cierto. Él trabaja con ellos papá. Francis es el primer oficial de Hydra. Él es ahora el enemigo.— ver a mi amigo llorar a mi hermano era una cosa, pero ver a mi padre llorar a su hijo era otra completamente diferente. —Edward lo dijo; cuando estuvieron los tres en la base de Hydra, Francis parecía hasta orgulloso de estar entre esos criminales.

Bajó la cabeza tratando de esconder su dolor, pero podía verlo aun. Sus hombros caídos, su cabeza gacha y la necesidad de querer dejarse caer al suelo.