CINCUENTA-DOS'

70 11 0
                                    



—¿Qué pasara con Hale, James?— preguntó Paige saliendo de su armadura de metal sin apartar la mirada del pelirrojo.

—No lo sé. Primero tienen que sacarla del protocolo Viuda Negra y luego... no sé. Tal vez esté perdida. No sabemos cuanto tiempo haya estado de esa manera— levantó la cabeza para mirar a Paige a los ojos y darla a entender que estaba destrozado de solo pensar el en futuro incierto que ahora tenía Hale.

—Tranquilo James— la chica de cabello rubio rojizo se acerco al pelirrojo y lo abrazó consolándolo.

Ahora que habían encontrado no solo a Hale, sino a Francis todos se sentían más tranquilos pero la situación en que Hale fue encontrada no era para preocuparse menos. Regresaron del espacio aéreo de Pakistán a su tranquila mansión al norte de Nueva York.

[En alguna parte de Europa]

Por las calles de la gran ciudad un hombre camina atento de sus alrededores y mientras trata de descubrir el paradero de su hermano, una llamada entra en su celular.

—Lilianne: ¿qué sucede?— pregunta él tratando de no sonar molesto ante la interrupción de su hermana en su búsqueda.

—La encontraron Laurent. Esta en la Mansión Vengadores.

—¿Qué? Pero ¿cómo? ¿Qué no se suponía que fue Leighton quien la secuestró?— dijo Laurent mirando al otro lado de la calle observando a un chico cercano a su edad con rasgos en su mayoría comunes de la región. —Creo que lo he encontrado.

Laurent miro con detenimiento al chico y usando toda su concentración pudo ver debajo su ilusión el rostro de su hermano gemelo, que era el suyo propio.

—Es él. Ya lo encontré.

—Laurent, ¡Laurent! Basta, ella esta a salvo. Déjalo en paz.

Laurent era perseverante en cuanto a perseguir a quienes lo amenazaban y su hermano era una de esas personas. Lilianne amaba a sus hermanos, después de todo eran la única familia que le quedaba después de su padre y tenia que cuidarlos a ambos por igual.

—No quiero que cometas una locura, por favor— le dijo su hermana —Ya has visto que no la tiene él. A ella la acaban de rescatar de una base militar en Pakistan.

—¿Pakistan?— Laurent trato de recordar donde se encontraba ese lugar —Entonces Leighton no la tenia presa.

—No. Y según me dijeron no esta bien de salud. Creo que deberías de ir con ella hermano y contarle todo. Pronto todo tendrá que pasar y será inevitable para ella saber lo que realmente ocurre. Es mejor que la prepares para la tragedia que pronto embargara su vida.

—Tienes razón Lilianne— asintió Laurent —Tomaré el primer vuelo que encuentre a Nueva York.

—Te espero en el aeropuerto.— dijo Lilianne cortando la llamada.

•••

El cuerpo inerte de Hale yacía sobre una mesa de metal mientras ella mantenía sus ojos cerrados a causa de la morfina que le fue proporcionada para aliviar su dolor al tiempo que llevaban acabo los procedimientos necesarios para salvar su vida. Solo llevaba encima una delgada bata de hospital para cubrir su cuerpo.

Desde lejos un grupo de personas miraban a Hale con preocupación.

—Y ¿bien Bruce? ¿Cómo se encuentra?— preguntó Natasha mirando a su amigo acercarse a ellos.

Bruce los miro a ambos con algo de pesar en la mirada. Un nudo en su garganta se formo al tiempo que se preparaba para hablar.

—Hablé con los médicos, dicen que todo esta en orden solo que tardara unos días en reponerse del todo.— pauso un poco y recupero aire antes de proseguir —Perdió el bebé que estaba esperando.

Tanto como Steve y Natasha miraron a Bruce sin comprender que fue lo ultimo que dijo.

—¿Un bebé?— Natasha se llevo las manos a su vientre a medio crecer al sentir una punzada en la parte baja de su pelvis.

—Los médicos me dijeron que parte de su cuerpo esta dañado ya sea por lesiones superficiales en sus brazos y por navajas en las piernas, las heridas de bala que también tenia en su abdomen eran profundas pero por fortuna no causaron daños mayores— guardó silencio —Pero mientras revisaban por otro tipo de lesiones que no fueran de armas letales descubrieron que había sido abusada sexualmente. En múltiples ocaciones.

El salón se quedo en silencio ninguno sabia que decir a eso, pero Bruce tenia que proseguir.

—Se dieron cuenta de que estaba embarazada, pero por desgracia no podían hacer nada por salvar el feto. Fue demasiado tarde.

—¿Cuántas semanas?— pregunto Natasha mientras que Steve aun trataba de asimilar toda la información.

—Tres meses.

—Oh Dios— jadeo la pelirroja sintiendo un mareo darle un giro la cabeza.

—Trataron de sacarle todo de su interior, pero hay cosas que simplemente su cuerpo se encargara de echar fuera a su tiempo.

Ella miro hacia donde estaba Hale y con el alma partida en dos miraba a la chica con dolor surrealista. Su hija estaba inconsciente, regresando a ella después de sufrir al ser usada como el arma perfecta, pero sabiendo su procedencia sabia que ella no era fácil de romper. Natasha conocía que al tenerlos Hale a ellos como padres su forma de ser era la de no darse por vencida, y tal vez resistió cuanto pudo hasta que la rompieron por fin dejando paso al Protocolo Viuda Negra.

Sus ojos estaban llenos de lagrimas al verla de tal manera e imaginando las atrocidades por las cuales debió de haber pasado que ni siquiera se dio cuenta cuando sus rodillas dieron contra el suelo.

—¡Natasha!— ambos hombres acudieron a ella levantándola del suelo y sacándola de la habitación. Pensaron que ver a Hale de esa manera en el estado que se encontraba no fue la mejor idea por su parte, pero Natasha creyó poder resistir ver a su hija tan mal, pero no soporto oír todo eso que le paso a Hale.

Hale se quedo quieta en esa habitación respirando tan bajo y débil como era posible que parecía que no estaba viva. Pero lo estaba, no era consciente de su cuerpo, y su mente estaba desconectada del mundo pero aun era temprano para ella regresar a la realidad.

•••

—Esta despertando— anuncio Clint mientras miraba a su mejor amiga abrir los ojos.

Ella los miró a todos en su habitación de la enfermería algo mareada pero consciente de lo que había pasado.

—¿Qué hacen todos aquí?— pregunto ella mirando a Thor junto a la puerta. —Vivimos en el mismo lugar, creo que pudieron preguntar en cualquier momento por mi bienestar.

—Lo lamentamos, es que creo que a todos nos entro la ansiedad Romanoff. Estas embarazada. Nos preocupaste— ella sonrió al ver a Tony con esa expresión de sarcasmo y pánico tatuado en su rostro.

—Gracias.— dijo ella tomando la mano de su esposo —Y este bebé igual les agradece, aunque aun no se note tanto— la pelirroja acaricio su vientre con ternura.

Todos sentían una especie de cariño por ese bebé que provenía de la mujer más letal del planeta y un héroe de mas de cien años de edad, sabían que aunque no fuera el primer bebé en crecer de los héroes sería el más consentido de todos no solo por sus tíos, sino por sus primos adoptivos. Era especial.

—Es extraño verte de esta manera Nat. Siempre siendo tan fuerte que el verte de una manera en la que tienes que ser cuidadosa es imperativo, no sé pero parece cómico.— comentó Sam apoyado en el respaldo de la silla del rincón. —¿Quién lo diría? Black Widiow embarazada.

Todos rieron sabiendo que en algún punto de sus vidas si llegaron a pensar eso, que nunca estaría embarazada.

Hale Knight Donde viven las historias. Descúbrelo ahora