SETENTA-SIETE'

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—Primero que nada ella rompió la promesa de jamás decir nada. Ahora se atendrá a las consecuencias.— comentó Paige mientras sus propulsores la mantenían a varios cientos de pies sobre la superficie donde el resto de sus compañeros de equipo.

—Baja de una buena vez de allí Paige. No permitiré que te vengues de Nicole por un pequeño desliz que cometió.— gritó Clint desde el suelo con arco y flecha en mano.

—¿Pequeño desliz?— preguntó indignada Paige a Clint —Disculpa pero ella prometio jamás decir nada sobre eso a nadie. Y ahora lo dijo en una transmisión abierta a todos los Vengadores incluyendo mi papá. Me las va a pagar.

—No lo permitiré.

Paige solo para aclarar, ¿es cierto lo que dijo Nicole?— pregunto la voz de Bucky del otro lado de la línea.

—¿Qué no lo vez Barnes? Claro que sí o sino no estaría tan histérica. Al parecer Barnes, tú y yo vamos a ser consuegros.

—Papá guarda silencio que apenas si lo hemos hecho oficial— Paige se llevo de inmediato las manos a la boca y descendió con cuidado hasta donde estaban los demás.

Eso sí, fue tonto.— la voz de Jefferson se hizo notar en la conversación. —Ahora no nos los vamos a quitar de encima.

—Que bien que ya no soy el centro de atención— suspiró con alivio Nicole.

—Oye señorita no creo que te hayas librado tan fácilmente de esto.— le contesto Clint algo molesto con su hija.

—Papá lo siento si no te lo dije antes pero es que entre Daven y yo en serio que no hay nada y la verdad es que es un poco difícil llevar una relación con él.— dijo Nicole olvidando una vez más que la conversación no estaban solo ellos dos.

—Oh Daven ¿escuchaste eso? Apuesto que eso es un golpe bajo.

—Saben yo no estoy prestando atención a esto ya que estoy en una misión de alto riesgo.— contesto Daven en un tono poco amigable.

El chico tiene razón. Deberían de dejar el chismorreo de lado y enfocarse en la misión y por primera vez ¡escuchar las instrucciones de su comandante!— esta vez fue una voz nueva quien hablo y todos la reconocieron cuando elevo su tono en reprimenda de todos.

—¿Natasha?— pregunto Clint bastante sorprendido de escucharla. —Bueno ella tiene razón. Cap ¿cuál es la siguiente fase?

—Estoy por ingresar a la alcoba principal de Vulture. Preparados. Si aun no han atacado es su momento para tomar acción— todos esperaban oír la voz de Capitán América en sus transmisores pero solo recibieron la voz de una chica.

—Hale esperamos ordenes de Capitán por favor no interrumpas.

—¡Y tú no seas insolente Barton! Soy la comandante o a menos de que me hayan relevado esperó que cumplan con lo que les estoy por contar.

—Lo lamento. Es la costumbre. Se me ha olvidado que ahora no solo somos nosotros seis.— respondió Clint mirando a Paige con el casco sacado. —Tú eres quien da las ordenes ahora Hell Knight.

El golpe de gracia.— se escuchó un solo suspiro en medio de un momento de tensión. Todos sabían lo que se venía.

•••

Las gruesas puertas de metal se abrieron despacio ante la descomunal fuerza telequinesia de Wiccan.

—¿Piensas usar tus poderes Hale?— murmuró Dean sobre su hombro antes de lograr abrir paso al interior de la habitación.

—No. Quiero exterminar a esta escoria con mis propias manos— dijo Hale haciendo sus manos puños.

—Prepárate— dijo Dean tomando varios pasos hacía atrás para luego prácticamente arrancar la puerta de sus agarres y tirarla al suelo.

Xavier Vulture se encontraba del otro lado expectante a su rival, preparado para atacar y finalmente acabar con la gran Caballero del Infierno, su enemiga eterna.

—¡Bienvenidos a todos! Por favor adentro. Los estábamos esperando.— la voz de Vulture le hizo crispar los vellos en todo el cuerpo de Hale. —Quiero el mejor de los espectáculos jamás televisados en la historia.

—¿Qué cosa dijo?— suspiró Daven apenas comprendiendo lo que esas palabras significaban.

El humo que se había levantado por la caída de la pesada puerta se disipo dentro de la habitación pudieron observar como tres figuras yacían erguidas en medio del salón. A su alrededor un montón de cámaras estaban esparcidas para capturar cada ángulo bueno o malo listas para comenzar un show.

—Esto será divertido.

—¡¿Tú crees?!— gritó Hale con enfado. —Esto será lo más placentero que pueda hacer en mi mísera existencia. Haré que tu sangre escurra por mis manos y que ¡supliques por tu vida!

—En tus sueños querida.— le contestó Xavier —Hora de la función.

Dean podía sentir el corazón exaltado de Hale, ella estaba complacida con la oportunidad tan espléndida que le estaba dando la vida de destruir a esa persona que tanto la había dañado a ella, James y también a Akane.

—Estoy de acuerdo.

—Tienes que tener cuidado Hale. Hay algo extraño en él.

—Sí, su cara derretida— susurró Hale respondiendo al comentario de Dean.

—No es eso. Es inestable, esta fuera de si.

—¿A que te refieres Dean?— Hale volteo a mirarlo para entender a que se refería pero Dean no pudo responder porque fue interrumpido.

—¡Suficiente! Hale, acércate— la rubia miró a Vulture quien se encontraba encima de una tarima esperando por la chica. —Quiero que este baile comience.

Ambos se quedaron mirándose a los ojos mientras los sentidos de Hale le alertaron de un peligro inminente que no provenía su contrincante frontal. Ella logró esquivar con agilidad el golpe a traición que Xander que quiso propinar, la chica lo volteo a ver de reojo con enfado.

—Esta pelea es entre tú y yo Xavier.— comentó Hale con enojo.

—Querida, en la guerra y en el amor todo se vale.— y antes de que Hale pudiera prever la acción de Xavier un golpe fuerte le fue dado en el estomago dejándola sin aire.

Tanto como Dean y Daven, Akane estuvieron expectantes a las siguientes acciones de Hale ya que no era posible que la chica fuera vencida con un golpe tan pobre y poco elaborado. Una pequeña carcajada se escucho bastante divertida por debajo proviniendo de los labios de Hale. Xander miró a su hermano confundido, el golpe que le propino fue bastante duro y ella solo se estaba riendo.

—Debo admitir que fue un buen golpe— dijo Hale incorporándose de nuevo mirando a Xavier. —Si quieres que tu hermano te ayude y crees que yo no puedo con ambos, adelante atáquenme.

Xander estaba apunto de abalanzarse contra la rubia pero su hermano lo detuvo.

—Esto es entre ella y yo— dijo Xavier quitándose de encima su gran saco de pieles y arrojándolo al suelo. Su cuerpo dejo de verse abultado a tener una verdadera proporción para una pelea contra una hábil oponente.

Ambos suspiraron, pero el primer golpe lo dio Xavier y así comenzó un gran combate entre enemigos mortales que tendría final hasta llegar a las últimas consecuencias: la muerte.

Hale Knight Donde viven las historias. Descúbrelo ahora