Lady Vulturi II

5. Propuesta indecente

SHAKIRA POV

Desperté y mire la hora. Las doce y media, genial. Rodé por la cama y fui al baño para darme una ducha. Una vez que termine, me puse un vestido violeta y sandalias rosadas, me apliqué delineador negro en los ojos y pinté mis labios. Tomé algo de dinero, lo metí en mi bolso y salí de la habitación del hotel. Era un día bastante soleado y decidí que hoy me dedicaría a pasear por la zona céntrica de la ciudad. Mire con aburrimiento las tiendas de ropa ya que odiaba ir de compras estando sola. Una tienda de disfraces captó mi atención y luego de pensarlo un par de segundos, decidí entrar. Había bastantes disfraces de egipcios y de bailarinas árabes, a pesar de que estos me interesaban, me dirigí a sección de las pelucas. Para mi desgracia, no había pelucas largas y rojas, las que habían eran muy cortas o con un rojo muy artificial. Hice una mueca y me conforme comprando dos pelucas negras. Antes de pagar, vi unas tiaras divertidas y lentes de colores, automáticamente pensé en Victoria y compré dos pares de cada cosa ya que estaba segura de que le gustarían.

Salí de la tienda y me dirigí a mi verdadero objetivo, una tienda electrónica. Sí dependiera de mi, pasaría todo el día viendo y analizando las laptops, tablets, computadoras y demás. Lamentablemente no tenía tanto tiempo. Examine rápidamente todas las tablets y compré una que parecía sencilla pero eficiente para lo que necesitaba. También compré algunos cables USB dado que los míos estaban en mi casa. El chico que estaba en la caja se sorprendió cuando pagué en efectivo pero no dijo nada. Normalmente detesto estar con tanto dinero encima, pero no podía usar mis tarjetas porque mi madre podría rastrear mis movimientos.

Volví al hotel y me encerré en mi habitación. Encendí la tablet y luego de programarla, la conecte a mi teléfono y empecé a trabajar. Desde que era niña tenía una gran facilidad para burlar la débil seguridad de los dispositivos electrónicos. A los tres años ya era capaz de desbloquear los teléfonos de todos los miembros de mi familia. A los cinco accedí al sistema de seguridad de mi casa y lo desarme para que vieran lo fácil que le sería a un hacker acceder a toda nuestra información. A los siete años estaba luchando con un hacker pfofesional para salvar los datos secretos de la CIV. A los ocho años mi tío Alec me estaba ofreciendo ser la encargada de la seguridad informática de la CIV, algo que mi madre rechazo diciendo que era muy joven para asumir esa responsabilidad.

Con gran facilidad accedí a los datos de mi laptop personal y los envíe a la tablet que había comprado. También aproveche para burlar el sistema de seguridad de la casa y acceder a las cámaras de seguridad. Vi a Victoria en mi habitación probandose unos vestidos. Sonreí y seguí viéndola hasta que salió de la habitación y fue a la suya para terminar de arreglarse, ya que a juzgar por su elección, probablemente iría a una fiesta. Seguí explorando las demás cámaras para ver que hacía mi familia y vi que todos estaban en casa, todos excepto mi madre que probablemente aún seguiría en Italia. Sonreí y dejé de espiarlos para concentrarme en mi tarea.

Una vez que me aseguré de que todo estuviera en la tablet, tomé un bolso un poco más grande y la guarde para ir a buscar a Shaki Dos. Tal vez anoche se hubiera negado a hablarme, pero no se escaparía eternamente. Tome un poco de dinero extra y salí al restaurante donde ella trabajaba.

Una vez que llegue, fui a sentarme en la misma mesa donde me sente anoche. Una chica se acercó a mi con una gran sonrisa. Cuando me vio, frunció el ceño confundida y volvió a sonreír.

-Buenas tardes, soy Antha y seré la encargada de atenderla -miré a todos lados buscándola pero no estaba.

-Estoy buscando a una chica igual a mi pero de cabello negro, anoche me atendió.

-¿Phoebe?

-Si, ella. Me gustaría que ella me atienda.

-Lo siento pero ella aún no esta aquí. Phoebe vendrá en unas horas.