Luego de llegar a la puerta negra, Agasha como Shion se había percatado de sus cambios, sin embargo, ella no hizo caso alguno. Su misión estaba primero que sus dudas.
―Recuerda bien, por nada del mundo debes pronunciar el nombre de tu amado hasta llegar a los límites de este mundo con el mundo humano ―le dijo Perséfone con seriedad―. Y ese collar que tienes, dáselo a Érebo y él sabrá qué hacer después.
Agasha asintió.
―Entiendo.
―Entonces entra. ―La chica se metió en el espacio pequeño, justo para una persona―. ¿Preparada?
―Sí.
―Suerte ―de golpe, Perséfone se hizo para atrás y las puertas se cerraron con fuerza.
Ella no sintió nada, sólo supo que su mano empujó la puerta por sí misma y al fondo no pudo ver más allá de su propia nariz. En vez de la diosa y su palacio, Agasha se encontró cara a cara con el pozo más profundo de los dominios de Hades. El más oscuro y por todos los cielos, el más frío.
Cerró sus ojos sin alterarse. Sabiendo que Albafica estaba seguro con ella, Agasha confió en sus habilidades para cruzar el páramo negruzco.
Tú puedes... tú puedes hacerlo.
Apretó las manos ejerciendo presión en sus ojos y al abrirlos, las cosas fueron claras.
...
Reacomodándose en su asiento, Eros silbó.
―Oh rayos.
―¿Qué demon...? ―se alarmó Shion mientras sus colegas trataban de comprender por qué Agasha...
―¿Qué fue lo que le ocurrió a sus ojos? ―señaló El Cid.
A diferencia de ella, ellos pudieron captar bien el momento en el que los ojos verdes cambiaron drásticamente a unos oscuros con brillos adentro de ellos, como si las estrellas viviesen ahí.
―Esto no es bueno —masculló Eros como si estuviese a punto de sufrir un fuerte dolor de cabeza—. No puedo creerme que esta chica esté a punto de convertirse en una Sỹdixx.
―¿Y eso qué se supone que significa? ―preguntó Dégel, dándole a entender al dios que nadie en la sala tenía idea de qué significaba esa palabra.
―Las Sỹdixx fueron en una época para Nyx, la equivalencia de lo que ustedes... ―los señaló a ellos con los ojos―, son para Athena.
―¿Santos?
―No ―espetó inquieto, pero no asustado―. Ni Santos, ni Espectros, ni Marinos. ―Eros suspiró―. Las Sỹdixx son aún más antiguas que Athena y que yo. En la Era Mitológica, ellas eran... el mayor dolor de culo de Zeus.
―¿En qué sentido? ―preguntó Asmita.
En la imagen, Agasha caminaba sin miedo entre la oscuridad, guiándose por quién sabe qué y sin embargo por sus movimientos gráciles uno podría pensar que sabía el camino de memoria o podía ver sin ningún problema en esa densa oscuridad.
―Las Sỹdixx eran las aniquiladoras de Nyx. Nacidas de las almas de mujeres humanas que en vida guardaron una gran pasión por la justicia. Aquellas elegidas, por su alto poder espiritual fueron llamadas Brỹdixx, su contraparte en la batalla eran las Sỹdixx.
Más de uno arqueó la ceja ante eso, ¿usar el poder espiritual de unas para qué? Y como si Eros leyese esa duda, la respondió:
—Nyx usaba a las Brỹdixx para alimentar su propia fuerza y la de sus Sỹdixx cuando se le daba la gana propagar el caos o combatir contra los ejércitos de la luz. Fuesen del Panteón que fuesen —Eros estrechó su mirada sobre Agasha—. Lo que apenas sé, es que sus mayores rivales eran los Hijos de Ra. Tenían un nombre más antiguo, pero ya no lo recuerdo.
—¿Ra? ¿El dios egipcio? —Regulus preguntó anonadado.
—Todos tenemos un pasado —masculló Eros—, y el hecho de que tengamos a Nyx, más aparte al Gran Fornicador como nuestro líder, y abuelo querido... más de una vez haya invadido los desiertos para buscarse amantes. Pregúntense por qué esos amantes del calor no han venido a exterminarnos a todos.
Analizando todo lo que acaban de oír, cada uno de los presentes tuvo sus propias dudas con respecto al tema.
―¿Cómo sabes que Agasha se está convirtiendo en una de esas "guerreras"? ―cuestionó Hasgard de Tauro.
―Por sus ojos, esos son los mismos de Nyx. Se decía que sólo las Sỹdixx y Brỹdixx los poseen por ser básicamente de su propiedad. Esa es su marca. ―Miró a Shion por encima de su hombro―. E ahí el porqué de la armadura.
―¿Qué quieres decir?
―Las armaduras de Nyx no son como las de ustedes... o cualquier otra que conozcan en la actualidad. Hablamos de un par de millones de años atrás —resopló irritado—. ¿Sabrán los Destinos de qué material están hechas? Lo que apenas he podido descubrir, es que estas se apropian de su portadora por completo cuando se le considera una verdadera Sỹdixx. Antes de que eso pase, más vale que ella suelte el alma de Albafica de Piscis donde debe hacerlo.
En la imagen Agasha magistralmente peleaba con su alabarda contra criaturas que parecían ser perros enormes que se confundían en la oscuridad y criaturas que parecían niños de aproximadamente 10 años con 1.22cm de alto, pero estos eran huesudos a lo grotesco, con cuchillos largos en vez de brazos y gritaban como gárgolas al intentar hacerle daño a la chica.
Cuando recién empezó y apenas iban saliendo del Mar de Sangre, todos se dieron cuenta de que Agasha luchaba como una novata con suerte. Ahora no hacía movimientos al azar o con miedo.
Algo estaba pasándole y no presagiaba ser bueno.
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𝑀𝑖𝑙𝑎𝑔𝑟𝑜𝑠𝑎 𝑷𝒊𝒆𝒅𝒂𝒅 | 🔞 |【 Dэcяэтos Diviиos Ⅰ 】
Romans『Albafica x Agasha』"Тәи мμсно сμіժαժо сои ӏоѕ оճѕәԛμіоѕ ժә ӏоѕ ժіоѕәѕ". No hay Santo que no conozca bien esa advertencia. Sin embargo, cuando llega el momento de debilidad adecuado, hasta el más sensato de los hombres puede ser tentado y engañado. ...