(88) 2da parte/Capítulo 20

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Blas empezó a removerse y, entonces, Junior se estaba por levantar, pero una mano rodeó su muñeca. Hacía cuánto que no sentía sus manos en la suya, pero ¿por qué Blas estaba haciendo eso? Y de pronto, tiraba de él hacia sí. La cara de Junior impactó en el pecho del mayor.

-Gracias por cuidarme, amor -le dijo Blas, todavía con los ojos cerrados, pasando un brazo por su espalda.



Junior no entendía, y sabía que se iba a arrepentir, pero...



...No tenía fuerzas para preguntarle por qué le decía "Amor".

...No tenía fuerzas para decirle que no le diga más así.



...No tenía fuerzas para dejar de cuidarlo.



...No tenía fuerzas para salir de su pecho.



...No tenía fuerzas...

Al segundo, Junior también cerraba los ojos.





Blas despertó y estaba solo. Todavía en la cama de Junior, tapado. Se incorporó pesadamente, con la espalda dolorida, pero se sentía mejor de la cabeza y la fiebre.

¿Junior había dejado que se quedara ahí? ¿Lo había tapado?

Ya era hora de volver a su casa. No sabía qué hora era, pero no hacía falta saberlo para darse cuenta de que no debería estar ahí, fuera la hora que fuere.

Se levantó y avanzó hasta la puerta, pero en el camino divisó una parte de una pulsera roja que sobresalía del cajón de la mesita de luz. Fue a abrir, y era esa pulserita, la del casamiento simbólico, y sonrió. Había sido mentira que la había tirado.

Recordó, entonces, a Mauro amenazándolo con lastimar a Junior. Volvió a recrear el momento desde que Mauro había aparecido en su puerta para pedirle una corbata.

Junior podía seguir amándolo y él podía seguir amándolo a Junior, pero no podían estar juntos, la amenaza pesaba más. Tal vez sería mejor que se volviera a Canadá, y esta vez, para siempre.

Estaba por bajar al living cuando vio a Dante yendo en dirección del playroom desde la cocina. Blas bajó apresurado y le chistó a Dante antes de que desapareciera en la habitación, para que le abriera la puerta. Dante lo miró raro.

-¿Vos? ¿Dónde...? ¿Estabas acá?

-Vine a hablar con tu hermano, pero ya me voy.

-Pero él está... Y vos estabas...

-Junior me permitió estar en su cuarto un rato. No pasó nada, si pensás eso. Quiero ir a mi casa ahora y dormir.

-Dale, te abro. -Dante estaba confundido, pero se notaba que Blas no quería seguir ahondando en el asunto.



-Blas ya se fue -dijo Dante después de bajar la escalera hacia el playroom.

Junior estaba sentado en el sofá, con un almohadón sobre sus piernas. Sabiendo que Blas estaba durmiendo en su cuarto, quería mantenerse lejos de él, pero a la vez necesitaba estar con el mayor. Y ahora le decían que se había ido y ni siquiera lo había visto antes.

-Se sentía mal, ¿lo dejaste ir así?

-No sabía, Junior, tranquilo. Él se veía bien y no me dijo nada. ¿Qué hacía acá?

-Nada... Vino a hablar.

-¿No arreglaron las cosas?

-No. No hay nada que arreglar, él no me quiere.

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⏰ Última actualización: Nov 01, 2019 ⏰

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Amor en el silencio (Blasnior)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora