CHATEAU

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Tengo la maldita tentación en el infierno, cada vez que lo veo, siento lo qué pasó aquella noche en Idaho. Miento si digo que no lo necesito, me duele hacerlo, pensar en él y necesitarlo.

Hoy tengo que medirme el vestido de novia que tiene la señora Wilson, como fui tan estupida para aceptar ponérmelo el día de mi boda, lo hice por despecho y ahora debo aguantarme.

Ya ha pasado un mes, los preparativos ya están aclarados en cómo serán, se celebrará en la iglesia, la fiesta será en su mansión. Juliet dijo que en iglesia, por que el amor que siento por su hijo debe ser para siempre. Yo por idiota dije que si, a esa señora no se le lleva la contraria.

-hola.-entra Stacy, su vientre se está haciendo notar, le queda muy bien el embarazo, siempre luce hermosa.

-Hola.-le regresó el saludo, sacó una hoja de lo que debo realizar en la empresa.-¿cómo estás con lo de tu embarazo?.

-Bien, ya son 4 meses en buen estado.-acaricia su vientre.-muero por saber que es, ¿tu que crees?.

-lo que sea, yo lo voy a querer de todos modos.-me pongo de pie, tomo sus manos.-Mi apartamento tiene demasiadas habitaciones, te daré una para el bebé.

-Gracias.-me da un abrazo. Carraspean en la puerta, Sebastian está parado observando.

-La junta empezará en 30 minutos.-me guiña un ojo y se va. El sabe como me deja, y por eso me hace daño.

-Debes controlarte.-habla mi amiga.-ya ni yo que estoy embarazada.

Me pongo la bata, tengo que salir a ver a los nuevos ingresados en cómo están avanzando. Los saludo a todos, me rinden los informes, todo está bien.

Los nuevos están progresando, aprenden mientras trabajan, unos ya consiguieron lo que les faltaba para pagar la universidad y seguir con su vida, hasta unos consiguieron en otras partes. Me han dicho hada madrina, por cumplir sus sueños.

Cuando voy de regreso, choco contra alguien, casi me tumba al suelo, me incorporó y este no se inmuta en regresar a disculparse.

-¡oye!.-le gritó, se detiene y voy hacia el, se voltea y yo no lo he visto nunca.-tu garnet por favor.

-Aquí tiene.-me lo entrega, es alto, con barba y fornido, su intento fallido de tapar sus tatuajes no le funcionaron, tiene uno que es de marihuana, que absurdo.-me tengo que ir...

-¿quien te contrato, Santiago?.-intenta quitarme su tarjeta pero lo detengo.

-yo lo contraté.-llega Michael poniendo una mano en la espalda de Santiago.-Regresa a tu puesto.-El hombre se va al área de entregas.-Perdón, olvide decirte qué hay personas nuevas.

-¿personas?.-asiente y camina hacia a dentro de la empresa.

-si, hubo corte de personal.-abro la boca sorprendida.

-dime qué por lo menos despediste a los que no rendían aquí.-asiente, abre la puerta, entró y dejó la bata en el perchero.

Llegamos a la sala de juntas, hablan sobre los ingresos que hemos tenido en el año, nuevas técnicas para atraer a los clientes. Ahora tenemos más dinero de lo normal.

-La fundación tendrá que hacer un viaje.-habla Michael y cambia las diapositivas, muestran un parque enorme, una ciudad con montañas.-Monterrey, Nuevo León, se abrirá un centro para jóvenes de la cual forme parte para donar, entreguen el cheque y véanse bonitos.

Salgo de la sala y me voy directo a mi oficina, tengo cosas que hacer esta tarde. Sebastian me toma del hombro.

-oye, tenemos que quedarnos hasta tarde, para ver lo de Monterrey.-pongo las cosas en mi pecho.