𝓜𝓲𝓷𝓮

𝟏𝟔

_No te separes de mi, corderito_ NamJoon tomaba de la mano al castaño.

La mayoría de los trabajadores de RM estaban vigilando el lugar para que ningún indeseable se colará al funeral del señor Kim Soo-hyun.
Las personas pasaban a la sala principal donde le ofrecían sus condolencias y uno que otro miraba con curiosidad al castaño.

_Quiero ir a mi cuarto_ Jin susurró, no le gustaba estar ahí. En el frente de la sala se encontraba un altar lleno de crisantemos blancos y en el centro una foto del abuelo Kim.

_Después, corderito_ entrelazó sus dedos con los del menor_ sólo son formalidades, a la mayoría de personas que han llegado sólo sé sus nombres por trabajo.

Estuvieron ahí un buen rato viendo cómo personas entraban, le daban unas cuantas palabras a NamJoon y después iban hacia el altar.
Después llegó el momento de que el nieto de Kim Soo-hyun diera unas palabras.

_Hoy nos despedimos de Kim Soo-hyun, un gran hombre, un excelente compañero para abuela, un gran padre y por supuesto el mejor abuelo y amigo que pude tener.
Él a pesar de su dolor y perdida de sus seres queridos se mantuvo fuerte y cuido de mí, siempre con una sonrisa en su rostro y una broma preparada para cualquier momento. Hasta en sus últimos días se mantuvo alegré y creo que hablo por todos los que tuvieron la oportunidad de conocerlo, lo extrañaremos a él y su gran sonrisa que podía mejorar el día de cualquiera...

Al terminar su discurso se dirigió con SeokJin y otra vez lo tomó de la mano. Jin se mantenía muy callado, le había afectado demasiada la perdida del abuelo Kim.

_¿Cuándo puedo ir a mi cuarto?

_En un rato más, corderito_ le dió un beso en la frente_ ¿Tienes hambre?

_No_ negó con la cabeza.

_Si tienes, apenas si tocaste tu desayuno_ lo guío a otra sala en dónde habían algunos bocadillos_ además de que al abuelo le enojaba cuando saltabas comidas.

_Es que no tengo hambre_ hizo un puchero.

_Dí "ah"_ ordenó y SeokJin obedeció, le dió un pequeño rollito de pan en la boca.

_Tú también debes comer_ Jin le dijo en cuanto pudo pasar aquel pan.

_Primero quiero que comas tú, no quiero que te enfermes.

Algunas personas al rededor miraban a la pareja con curiosidad, no sabían que Kim NamJoon estaba en una relación, hasta que habían llevado a sus hijas para llamar la atención del joven Kim, pero él sólo centraba su atención en el castaño a su lado.

NamJoon había notado aquellas miradas y las intenciones de algunos, pero no era tonto, nadie se podía comparar a su corderito y le parecía de mal gusto que no tuviera respeto hacia su abuelo fallecido, sólo estaban interesados en el dinero.

Tal vez lo suyo con su corderito aún no era oficial, pero sabía con seguridad que quería estar con él, así que sólo esperaba el momento perfecto para poder cambiar a algo oficial entre ellos.

_Come_ Jin le ordenó.

_Ya voy, corderito~_ le sonrió y tomó algo de la mesa.

Por unos días no podría ir a la mansión porque aunque hubieran dicho que sería una ceremonia privada los medios lo ignoraban por completo y decidían invadir su espacio.

También debía darle un noticia a SeokJin y no sabía cómo podría reaccionar.

La gente comenzó a irse en la noche, ya SeokJin estaba más dormido que despierto, su cabeza recargada en el pecho de NamJoon, mientras él rodeaba su cintura con los brazos para evitar que se cayera o quisiera escaparse.