Capítulo 62

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— Según las coordenadas la siguiente parada sería por el oeste, tenemos que pasar por un río y justo después aparecería el punto — explicó Jason enfocado en el mapa.

— ¿Cruzar un río? Espera sacaré mi balsa mágica de mi bolsa mágica para que nos lleve flotando mágicamente a través del agua — creo que ni necesito explicar ese sarcasmo ni debería mencionarlo, pero todos sabemos quién lo dijo.

— ¿Acaso te da miedo mojarte? — se burló Evan — tranquilo no te desintegradas por algo de líquido... Creo — murmuró lo último.

— Eso me da igual, pero yo no me mojo, hago que se mojen — puso su típica sonrisa de fucker, a lo que mi cara se deformó, iba a contestar, pero algo me decía que no saldría bien de esa.

— Con su propio vómito al verte — le contestó Austin empezando a reír.

— No, de formas que jamás has logrado en un ser vivo — contraatacó con superioridad — a menos que efectivamente objetos inanimados se hayan mojado sí, pero no necesariamente con fluidos propios — sus ojos bajaron a la entrepierna de Austin momentáneamente, entendiendo a que hacía referencia.

— Prefiero eso a usar a la gente — miró a Jared y luego a Adam, oh no.

— No, no, no, no — me metí en medio de sus miraditas — no tenemos tiempo para esta mierda — ahora Adam miraba a Jared, este a Austin y Austin a mí que estaba frente a él — discúlpate — le dije exclusivamente a él.

— No voy a... — iba a empezar con sus quejas.

— ¡Discúlpate! — chillé.

— Perdón — no sonó sincero.

— ¡Hazlo sincero! 

— ¡Está bien! ¡Lo siento! — chilló también mirando a los otros dos, me giré a Jared.

— Discúlpate — mi tono fue más severo, no era solo por sus bromitas.

— ¿Por qué me tendría qu...? 

— ¡No lo voy a repetir Jared, maldición! — levanté la voz.

— Está bien, está bien, diablos cálmate mujer — levantó las manos — Lo siento — evitó la mirada de todos y fue un murmullo barato. 

— No me obligues... — amenacé.

— ¡Bien! ¡Rayos, lo siento! ¿Sí? — miró a Adam directamente, este al principio se quedó tieso, pero rápidamente recuperó la compostura, me paré delante de él, mirando.

— No voy a... — intentó decir, pero abrí mis ojos tanto que parecía el meme de teresa enojada — oh por favor esto es ridi... — a este punto las venas del cuello me sobresalían lo que le daba impresión — ok, ok, pero deja de hacer eso, por dios, se te van a salir — empezó a mover las manos como si estuviera listo para atrapar la que cayera. 

— Dilo — señalé.

— Lo siento — también lo miró directamente, ambos se escuchaban sinceros y se notaba como esas disculpas no eran sobre lo de ahora, tendrían que tener una charla al respecto más tarde.

— Bien, no pediré un abrazo porque ya sería mucho, pero muy bien — miré a los tres.

— Te puedo abrazar a ti si quieres — Austin hizo un bailecito con sus cejas.

— Yo quiero un abrazo — se metió Tanner.

— No, a ti no — bajó los brazos que había elevado para mí.

— ¿Por qué no? — hizo un puchero.

— Aww, ven aquí cosita — me acerqué con los brazos abiertos envolviéndolo en un abrazo. 

Escuela Militar (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora