Kunoichi

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Amarilis: orgullo

Rendirse no era algo en lo que se considerará muy buena, y eso que ella era muy buena en todo lo que hacía. Sin embargo, debió aprender de manera muy rápida que, al menos para ella rendirse no era una opción, menos cuando ocupaba un puesto rodeada de hombres que pensaban que no era lo suficientemente buena en lo que hacía.

Pero había peleado por el lugar en el que estaba, y pelearía por cumplir con su deber como presidenta de la comisión de héroes.

-¿qué tan confiable es esta información?

-nuestros agentes mismos la han recopilado- respondió uno de sus asistentes- ¿como debemos proceder ahora?

Estar preparada para todo era una de las habilidades de las que estaba más orgullosa, y una de las que tuvo que aferrarse más.

Pero sin duda, ni en un millón de años, hubiera esperado que llegaran tales rumores a sus oídos.

¿La heredera de All for One?

Estaba segura que esto estaba por salírsele de las manos, de hecho, desde el momento que la UA se llevó a esa chica de pelo rosa bajo su jurisdicción parte del asunto se había salido de sus manos. No había cosa que odiara más que no tener el control de algo.

Y el caso de Sakura Haruno se estaba saliendo de control.

Sabía desde que escucho por primera vez de la existencia de la chica que le traería muchos problemas, pero no pensó que fueran de estas magnitudes.

Pensó en dejar todo en manos de la UA y dejar que ellos se hundieran, pero ante tales noticias no podía simplemente quedarse de brazos cruzados esperando a ver cómo todo se derrumbaba poco a poco.

Después de todo también era muy precavida.

-dejare que ellos sigan pensando que tienen el control de las cosas- anunció.

Los presentes se miraron entre ellos con confusión.

-cuando llegue el momento haré que toda esta situación se incline a nuestro favor, pienso usar a Sakura Haruno para ir en contra de la liga- explico la presidenta con la mirada fija en el ventanal de su oficina.

Solo debía ser paciente.

-00-

-nos preocupaste mucho ahí afuera- comentó Sakura mientras revisaba el estado de Izuku.

Todos habían estado muy curiosos por el repentino descontrol de la singularidad del pecoso, afortunadamente había sabido controlar los nervios y había dado una razón más o menos aceptable.

All Might le había pedido a la pelirrosa que se llevara a su pupilo a la enfermería mientras él se encargaba de hablar de los últimos sucesos con el director.

-lamentó haberlos preocupado Sakura-san.... -el chico parecía desanimado, ni siquiera se atrevía a ver a los ojos a la pelirrosa.

Aún no entendía del todo el asunto de One for All y All for One, era una lucha que venía sucediendo desde hace muchas generaciones. Era un poder que se pasaba de portador en portador con el único objetivo de vencer al más grande de todos los males.

Y el hecho de que ella estuviera relacionada muy de cerca con ese mal, la hacía querer vomitar.

-no pongas esa cara- Sakura tomó asiento junto a Izuku en la camilla de la enfermería- tienes una gran carga en sobre tus hombros. Aún eres muy joven para todo esto, y aún así haces todo lo posible para ser digno de ese poder.