Capitulo 24

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Sascha's POV

La fiesta había sido un éxito y casi todo había salido como lo habíamos planeado.
La noche en sí era genial. Tenía a Katherine a mi lado y comida ilimitada. Lamentablemente las bebidas ya eran una mezcla de muchas cosas, pero aún así las cosas marchaban bien. O al menos por un tiempo.

—¿Qué miras?— le pregunté a Katherine con curiosidad, pues estaba viendo atentamente a algo o alguien detrás de mi.

—Nada— dijo y sonrió.

Me giré para tener una idea de qué era. Lo único que había detrás de mi que podría llamar la atención de Katherine era Hérmes Gaunt.

Algo que nunca entendí era cómo es que todo el mundo amaba a Hérmes. Todos los estudiantes hablaban de lo genial que era, al igual que los maestros hacían comentarios de lo mejor acerca de él. A diferencia de los demás, para mi no era difícil ver la clase de persona que era él en realidad.

Hérmes y yo habíamos sido compañeros por mucho tiempo, solo que él era de Slytherin y yo de Gryffindor. Por muchos años fuimos grandes amigos. Él era mi único amigo y yo era su único amigo. Desde que lo conocí supe la clase de persona que era Hérmes.
Era un líder nato, muy carismático y extrovertido, bastante seguro de sí mismo, y es que no era difícil saber por qué. Siempre fue muy inteligente. Era también muy divertido y sus chistes consistían en sarcasmo puro.

En un punto, incluso llegué a admirarlo.

En poco tiempo Hérmes se convirtió en uno de mis mejores amigos. Éramos tan diferentes pero nos entendíamos el uno al otro. Yo era más introvertido, mientras él hacía amigos cada día como si se tratara de beber agua. Yo me mataba estudiando mientras él sacaba las mejores notas y sin siquiera poner atención en clase.

Cuando éramos un poco más grandes, él me ayudó en muchas cosas. Yo dejé de ser el niño introvertido de primer año y él me ayudó a ganar más confianza. Me convenció de hacer muchas cosas. Incluso cuando hacíamos bromas a los demás, que era casi diario, él era quien planeaba todo y yo quien lo hacía. Él era la mente maestra.

Tiempo después mis padres comenzaron a tener problemas, hasta que se divorciaron. Fue una época horrible para mi. Me salí de todas las clases que me había metido con Hérmes y pasaba casi todo el día en mi cuarto. Hérmes jamás se acercó a preguntarme cómo estaba, o si necesitaba ayuda. Sólo quería que él me recordara que no estaba solo, pero nunca lo hizo.

Cuando traté de regresar a mi vida de antes, era muy tarde. Hérmes ya se había conseguido no solo a un reemplazo mío, sino a cinco. Cinco simios del equipo de quidditch de Slytherin.

Ahí me di cuenta de que en verdad estaba solo. Que no tenia a nadie, y que él era de esos amigos que solo estaban en las buenas. Mejor dicho, ni siquiera era un amigo.

Entonces reaccioné. Me di cuenta de que todo ese tiempo yo estaba siendo lo que Hérmes quería que yo fuera, y que sin él, yo no era nadie. Ni siquiera tenía identidad propia, pero poco a poco la fui encontrando. Pasé de pensar "¿Qué haría Hérmes en esta situación?" a "¿Qué haría Sascha?". Logré hacer dos amigos. Tal vez no eran cinco, pero eran verdaderos amigos.

Conforme crecíamos, comencé a darme cuenta de que él obtenía todo lo que quería, y sin luchar por ello. Lo tenía todo fácil y en charola de plata. Entonces me di cuenta de las injusticias del mundo. Mientras otros teníamos que sufrir para conseguir las cosas, otros disfrutaban de ellas sin ningún sacrificio.

Si a mi me gustaba una chica, él comenzaba a salir con ella. Si yo obtenía 9 puntos de 10, él obtenía 10 puntos y décimas extras. Intenté unirme miles de veces al equipo de quidditch, estudié a cada jugador, y traté de aprender lo más posible de cada partido que veía, y él, con tan solo mover un dedo ya era parte del equipo y todos lo adoraban tanto que en poco tiempo se convirtió en capitán del equipo. Pero esas eran simples competencias de adolescentes.

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