FIX ME

Capitulo 49

Viernes

Desperté por la luz del sol que atravesaba la tienda. Ser Slytherin y haber dormido en esos dormitorios por 5 años me había hecho olvidar lo bien que se sentía el ser despertado por los rayos de la estrella central del sistema solar.

Miré a Draco. Sonreí al verlo dormir como un bebé. Draco podía verse duro, intimidante, e incluso podía ser odioso para otras personas, pero si tan solo lo vieran dormir sus corazones se derretirían y lo verían como el pequeño niño que sólo busca comprensión y afecto que es.

—¿Te gusta la vista?— dijo Draco con la voz adormilada y los ojos aún cerrados refiriéndose a que yo no paraba de mirarlo. Reí por su comentario.

—Me encanta— respondí y sonrió.

—¿Desde hace cuanto despertaste?

—Desde hace unos minutos. No te preocupes, solo llevo mirándote dos horas sin parar y sin pestañear— bromeé.

—Eso espero— dijo y me abrazó —¿Cómo estás?

—Pues... bastante bien, la verdad dormí muy bien... ¿y tú?

—¿No necesitas una silla de ruedas o algo?— bromeó y le di un suave golpe en la cabeza. Draco se levantó y me sujetó de las manos y comenzó a hacerme cosquillas. Estábamos jugando cuando escuchamos un ruido afuera, eran pisadas en el pasto.

—Draco, ¿escuchas eso?— susurré, pero las pisadas desaparecieron.

—Seguro solo fue un animal o algo así— dijo Draco.

Ambos nos quedamos quietos. Las pisadas volvieron a escucharse rodeando la tienda.
Y de repente, cuando menos lo esperábamos, las puertas de la tienda se abrieron rápidamente dejando ver a Fred y a George entrar. Draco y yo gritamos mientras ellos se reían.

—¿Viste sus caras, George?— dijo Fred riéndose.

—Claro que lo hice, Fred— respondió George riéndose también.

—¡¿Qué carajos hacen aquí?!— preguntó Draco molesto.

—Oh, ayer olvidamos algo en la reunión— habló Fred.

—Y vinimos a buscarlo— completó George.

—Antes de que alguien se lo robe— dijeron ambos al mismo tiempo.

—¿Y cómo nos encontraron? ¿No se supone que hiciste el encantamiento?— me dirigí a Draco en lo último y él asintió.

—Si, pero robamos estos lentes a Luna Lovegood— dijo Fred.

—Sirve para encontrar objetos perdidos— completó George.

—Objetos encantados

—Objetos encantados y perdidos.

—Y objetos que no están a simple vista.

—Así que vimos la tienda...

—Y decidimos ver qué había dentro...

—Pero vimos que eran ustedes...

—Así que decidimos asustarlos.

—Exactamente. Siempre dices lo que pienso, Fred.

Draco los miraba molesto y yo aún estaba tratando de tranquilizar mi ritmo
cardiaco.
Miré la hora, eran las 7:47 de la mañana.

—Bueno, nos retiramos— dijo Fred.

—Continúen procreando tranquilos— bromeó George.

Al salir, Draco suspiró, giró los ojos y se dejó caer hacia atrás. Yo solamente reí ante su comportamiento.