NO PUEDO

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Jazmín

Han escuchado cuando una copa de vino se rompe y se escuchan los cristales saltar por todas partes, bien, justo así se escuchó mi corazón, las lágrimas empezaban a nublar mi vista, mis ojos se ponían rojos, pero no iba a llorar al menos no frente a ella.

- No te estoy terminando puesto que jamás iniciamos nada- sus ojos estaban clavados en mi, carajo, me duele más que a ti.

- Claro – respire profundo- todo fue un juego -reí – si , ¿es todo puedo irme?- ella levantó la mirada .

- Sim pode- dije al borde de las lágrimas.

- Obrigado- Salí de prisa de su oficina, fui al tocador al volver Flor me llamo.

- Jazmín, ven por favor – la llame.

- Claro voy- me levanté y camine hacia su oficina.

- Esto es complicado para mi- no me dejo continuar.

- Te voy a facilitar las cosas, para que no tengas que verme, ni leerme, para que no sepas nada de mi- suspire, un nudo en mi garganta amenazaba con romperse, yo luché con todas mis fuerzas para que no fuera así- renunció-dije sería y convencida.

- No acepto tu renuncia- dije sería, no quiero que se vaya, no quiero que se aleje, volví a ser la misma de siempre

- Mi renuncia sigue en pie y la enviaré por correo, estaré quince días más , para dejar todo en orden- la mire a los ojos .

- Pero tienes muchas cosas que terminar, que pensar- dije mirándola, una lucha entre mi corazón y mi razón, el primero deseaba decirle que se quedara que yo estaba enamorada de ella y mi cabeza me recordaba que debo respetar mi acuerdo con Laura, y dejarla ir.

- No te preocupes todo estará en orden- dije sería- ahora si es todo debo irme a terminar mi trabajo.

- Esta bien sólo piénsalo por favor, eres un gran elemento- el error fue mío mi amor, pensé.

- Gracias, pero está decidido- agache la mirada- no puedo ni quiero seguir cerca de ti, no sintiendo lo que siento.

- Por favor, Jazmín- No te vayas, no me dejes, esas palabras gritaban dentro de mi.

- Buen día jefa- debía repetirme que era mi jefa y solo como eso verla, salí de su oficina me puse los audífonos, e inicie mi día, a la hora de la comida la evite, me senté sola, luego de unos minutos Nayeli se unió.

- ¿Puedo sentarme? - pregunte.

- Claro adelante- la miré discretamente, Flor estaba en la otra mesa con unos compañeros y otras personas, yo finjo estar interesada en la conversación de Nayeli, pero realmente no recuerdo nada de lo que dijo, quería irme ya, cuando al fin dieron las 5:30 yo ya tenía al taxi esperándome, salí de prisa, antes que ella.

Flor

Salí con la esperanza de verla, pero ya no estaba, me fui a casa sin ganas de nada, molesta con Laura, pero recordando ese acuerdo que hace 20 años hicimos, entre a la casa, mi hija estaba en la sala sentada con Laura, quien la consentía.

- Hola ma- me levante a darle un beso en la mejilla.

- Hola preciosa- le di un abrazo, Laura desde el sofá dijo.

- Hola, Flor- por su cara sé que dejo esa chica puedo respirar tranquila, dentro de pocos días todo volverá a la normalidad pensé.

Jazmín

A penas abrí la puerta de la habitación, ese nudo en la garganta se rompió, mis ojos lloraban sin parar quería irme ya, no volver a saber nada de ella y no volver a caer en su juego, de tanto llorar me quedé dormida.

Flor

Esa noche no dormí, bebí vino, escuché música, pensé en ella, en sus labios, en cada momento que vivimos, en lo feliz que soy cuando estoy con ella, con ella puedo ser yo, suspire, seque las lágrimas, me recosté un par de horas, al levantarme se me hizo tarde, vi la hora, pero me quede en la cama, hasta que Laura entro, abrió las persianas.

- Es tarde- me pare frente a ella.

- Si, voy- me levante de la cama, camine hacia la ducha, donde no pude evitar volver a llorar, no tengo ganas de ir , suspire, intenté reponerme , salí de la ducha , me cambie de ropa unos jeans, una blusa roja, un suéter azul, mi bolso y salí de la casa sin decirle nada a Laura, al llegar tome unos minutos para tomar valor, del otro lado de la entrada Jazmín con un cigarrillo en las manos, lentes de sol, un pantalón azul marino, suéter verde, un saco sobre los hombros , unas zapatillas azules, cuando me vio apago el cigarrillo y entro de prisa, como evitando coincidir conmigo yo camine tras ella, pero me ignoro, cuando llegue salude a todos con un – hola buenos días en 30 minutos los veo en mi oficina.

- Si, jefa- dije sin mirarla, los minutos pasaron y la verdad se me olvidó y creo que a los demás también, de pronto la escuché salir de su oficina.

- Cuando doy una orden se atiende, llevo más de 40 minutos esperándolos, ¿tengo que avísales cada minuto? - estaba molesta, Ariel se levantó de la silla.

- Ahora vamos, me ocupe con una llamada- ella estaba muy molesta.

- Tenemos reunión eso debiste decirle, los espero ya- ellos entraron a mi oficina, nos sentamos en la mesa que estaba cerca de la ventana para mi sorpresa Jazmín, se sentó varias sillas lejos de mi e incluso no podía ni verla, se ocultaba tras las otras chicas, la reunión pasó cuando salieron yo le pedí a Jazmín que se quedara.

- Okay, jefa- me quede sentada varias sillas lejos de ella.

FLORESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora