FLORES

PRESENTE

  Flor
  Escuchar a mi madre decirle eso a mi esposa, me alegro, me hizo sentir segura, feliz, me sentía plena, enamorada , correspondida y lo mejor mi familia ya era la familia de ella, lo sabía es irresistible, es una chica llena de cualidades buenas y lindas, yo la amo profundamente , suspire, tome su mano caminamos hacia el auto, al subir ella pregunto.
 
  - ¿Estás lista?- la mire , ella sonrió, beso mis labios.
  - Para estar contigo siempre estoy lista- guiño de ojo, tomé su mano durante el camino al aeropuerto.
 
  Laura
  Vi mi reloj, fui por Andrea, ella tomo una chaqueta rosa, caminamos hacia el taxi, no quería que Flor se fuera sin despedirse de Andrea o quizás en el fondo realmente era yo quien quería despedirse, al llegar al aeropuerto, la vi, caminando con esa chica de la mano, sonriendo, diciéndole cosas al oído, me quede parada, observándolas, sin saber que hacer o decir, mis ojos estaban posados en ella, los ojos de ella posados en esa chica, Andrea se acercó.
 
  - Madre- al verla sonreí, quería despedirme de ella, mi madre al verme camino hacia mi.
 
  - Mi amor- la abrace con fuerza hacia mi pecho, me quede así por unos minutos, Laura se acercó, yo la mire, le dije una sonrisa- Gracias por traerla- guiño de ojo.
  
  - No tienes que agradecer- me pareció tan lindo ese guiño de ojo, su sonrisa, su mirada posada en mi.
 
  Jazmín
  Ver llegar a Laura al aeropuerto me tomo por sorpresa, pero lo tolero solo porque Flor sonrió al ver a su hija, me quede a un lado de ella, al soltar a su hija tomo mi mano y no la soltó, Andrea se despidió.
 
  - Que tengan buen viaje- deje un beso en la mejilla de cada una.
 
  - Gracias preciosa- sonreí.
 
  - Quiero regalos Jazmín- risa nerviosa.
 
  - Claro que si, tendrás muchos regalos al volver- tomé su mano, ella me dio una sonrisa, yo camine, Flor se quedó abrazada a su hija, camine hacia la cafetería, ordené un café, Flor me siguió.
 
  - Hola amor- sonrei.
 
  - Hola, guapa- voltee a verla- ¿todo bien?- la mire, le di un vaso, el cual tenía un té.
 
  - Gracia mi amor- bese su mejilla, la mire fijamente- ¿Cómo es que te amo tanto?- sonreí.
 
  - No tengo esa respuesta- caminamos hacia la sala de esperas.
 
  - Me tienes loca de amor, de pasión- sonreí- podría hacerte el amor ahora mismo, aquí- las mejillas de mi esposa se sonrojaron.
 
  - Amor, es horario familiar- ella soltó una carcajada, nuestros ojos se encontraron.
 
  - Cuando me miras y estoy triste me pongo feliz, cuando te veo a mi lado, me siento imparable, me siento fuerte, me siento feliz, alegre, tú amor saca lo mejor de mi, tu llegada a mi vida- tomé su mano- es lo mejor que me ha sucedido, claro después de mi hija- ella sonrió.
 
  - Eres correspondida- guiño de ojo- te amo, te admiro, te deseo, eres la mujer perfecta, me tienes babeando , me tienes en las nubes- nos dimos beso rápido, abordamos el avión, yo me quede dormida al aterrizar ella me despertó.
 
  - Llegamos amor- bese su frente, ella despertó.
 
  - Hola guapa- sonreí, buscamos las maletas, tomamos un taxi, al llegar al hotel ella me abrazo, beso mis labios.
 
  - Bienvenida a Brazil, ahora como mi esposa- sonreí.
 
  - Ahora ya no soy Villanueva, ahora soy Jazmín de Rosas- la abrace.
 
  - Este país tiene un gran significado para mi- camine hacia la mesa, coloqué las lleves, Jazmín camino tras de mi.
 
  - ¿Por qué?- la mire, a veces siento que se muy pocas cosas de ella, otras que se lo necesario y que solo importa nuestro presente.
 
  - Cuando la empresa me dio la oportunidad de venir a este país- tomé, las copas, serví el vino- aquí me consolidé- le di su copa.
 
  - Salud por eso mi amor- sonreí.
 
  - Aquí, todo fue diferente, bueno para mi, aquí no hay perjuicios, la gente no está pendiente de tu vida- suspire- aquí me desarrolle totalmente en lo profesional, mi hija era pequeña cuando llegamos aquí- sonreí, recordé- como ha pasado el tiempo- dije con la mirada hacia el mar, hacia esos árboles, que tan buenos recuerdos me traen, no puedo decir ni pensar que todo fue malo con Laura, tuvimos una etapa buena, estuvo conmigo, me apoyó, dejó de lado su vida y se dedicó a nosotros, Jazmín y yo estábamos calladas, admirando el paisaje, disfrutando de ese vino.
 
  Jazmín
  Un silencio, entre las dos, entre mis manos la copa de vino que llene dos veces más, el clima era caluroso, así que fue al excusa perfecta para ir a la ducha, la mire, ella seguía con la mirada hacia el frente, yo dije.
 
  - Iré a la ducha- dije mientras quitaba mi playera, los tenis, ella me miró.
 
  - ¿Me invitas?- la abrace por la espalda, bese su cuello.
 
  - Eres bienvenida- caminamos hacia la tina de baño, nos metimos juntas, una frente a la otra, la botella de vino, rosas por el piso acompañada de su ropa, ella acarició mi pierna.
 
  - Me encanta la suavidad de tu piel- sonrisa pícara.
 
  - A mi me gusta todo de ti- guiño de ojo- tu mirada, tu acento, tus manos- sonrisa nerviosa.
 
  - Señora- la mire.
 
  - La escucho señora de Villanueva- tomé su mano, adornada por el anillo de bodas y compromiso.
 
  - Quiero recordarle que la amo- sonreí- que me encanta, que sueño con pasar el resto de mi vida con usted y que pronto estaremos embarazadas, sé que fue un momento difícil para las dos que ese prueba diera negativo, mi amor, pero pronto, estaremos esperando a nuestra hija o hijo- ella intento hablar.
 
  - Amor- quise decirle, pero ella no me dejó.
 
  - Pronto veremos esa pancita crecer- Guiño de ojo.
 
  - Lo sueño y lo deseo- la mire, en ese momento pude ser sincera y mirándola a los ojos dije- deseaba tanto ser madre, sentí que algo de mi se rompió al saber que no era así, suspire, una lagrima rodó por mi mejilla, Flor tomo mi mano.
 
  - Pronto será mi amor y serás la mejor madre, serás una madre muy guapa- Jazmín se levantó de prisa, no dijo nada, yo salí de la tina, la seguí al tocador.