FLORES

MUDARME

Jazmín

El ir y venir de Flor, era complicado, pensaba mientras tomaba una copa en la barra de un bar, la visita de esa mujer, la incomodidad de ser su esposa a la vez parecer su amante, tomé de un trago mi cerveza, pedí otra, mientras pensaba ¿Por qué es tan complicado?, deje caer los hombros me recargue sobre el respaldo de la silla, mi amiga Thalía apareció.

- Disculpa la tardanza- me acerque , bese su mejilla.

- Que gusto verte- la abrace .

- Disculpa la tardanza- me disculpa- pase a dejar a los niños con Javier- la mire.

- ¿Se separaron? – mirada de sorprendida.

- Si- agache la mirada- hace medio año- pero no quiero hablar de eso- aun dolía- mejor dime , ¿cómo estás? , ¿cuando te mudaste?, ¿sigues con Karla?.

- Muchas preguntas- solté una carcajada.

- Hace mucho no te veo y no sabía nada de ti- la mire- me da tanto gusto volver a verte- la abrace.

- A mi también me da gusto verte- sonreí- mi vida ha cambiado mucho en los últimos meses – reí al recordar.

- ¿Te casaste?- tomé su mano y vi el anillo, pero su sonrisa, su sonrisa y su rostro, eran de felicidad.

- Si, me hace hace unos meses- sonreí, recordé ese bello momento, con mi Flor.

- ¿Con Karla?- pregunte mirándola, ella en un inicio quería casarse con Karla, tener hijos, estaban muy enamoradas- me encanta la pareja que hacen- sonreí.

- No, ella y yo nos separamos , hace tiempo- ya no dolía- me casé con mi jefa- una risilla, la memoria llena de recuerdo, de momentos únicos y especiales.

- ¿Qué?- pregunte sorprendida, me puse de pie, ella soltó una carcajada.

- Si, me casé con mi jefa, es hermosa, guapa, sexy, es única y especial- estoy segura que mis ojos brillan cuando hablo de ella, mi pecho se llenaba de alegría, de felicidad.

- Cuéntame todo- le dije, solicité una mesa, nos cambiamos , ella me contó la historia y finalizó diciéndome lo sucedido con la loca de la ex – yo en tu lugar si le diría- me miró sorprendida.

- ¿Por qué?- su respuesta me dejó pensando.

- Esa mujer está loca, insegura, es peligrosa- la mire- Flor debe saber que te busco, ella debe ponerle un alto a esa tipa, ya que lo supere.

- ¿Peligrosa?- me confundió su respuesta, quizás tenga razón, quizás deba hablar con Flor, decirle lo sucedido.

- Si, es peligrosa, esta despechada, dolida, no quiere que se termine su rutina, , no puedo creer que tenga 20 años soportando infidelidades, ahora hasta casada esta la chica con la que vive, y ella también, tu Flor, no debe actuar así, debe darte tu lugar, respetarte y terminar con esa relación- insistí e intente convencerla, mi amiga esta feliz y no quiero que esa tipa les arruine ese amor que tienen.

- Tienes razón- sus palabras estaban llenas de verdad, suspire, pero yo, yo no sé como tocar el tema, como dejar a su hija sin su familia, pensé, la noche paso, conversando , bebiendo un par de cervezas, más tarde se unieron otros amigos en común, intente relajarme , lo logré, llegue a casa a las 4:00 am, vi mensajes y llamadas perdidas de Flor, coloqué el teléfono sobre la mesa, de la sala, le abrí la puerta del patio a Erato, me lance al sofá, y dormí , todo el domingo.

Flor

Pase la noche pensando en ella, mi cuerpo estaba en casa, con mi hija, con Laura, pero mi corazón y mi pensamiento estaba con ella, ya no quiero vivir así, pensé , cuando se fueron a dormir yo me fui a mi habitación e intente comunicarme con ella, una sonrisa en mis labios, al ver su foto en mi celular, le envié un WhatsApp, le marqué peor no tuve respuesta, me recosté sobre la cama , cerré los ojos, me quede dormida, el domingo paso, sin tener algún mensaje de ella, le di su espacio, pero el lunes, el lunes yo necesitaba sus labios, sus abrazos, me fui temprano al trabajo, deseando poder estar a solas con ella, al llegar la busque , minutos más tarde, escuché unos pasos, sus pasos que reconozco, me levante de la silla, fui a su encuentro, bese su mejilla, ella me abrazo.

- Te extrañe – la mire a los ojos- ya no sé estar sin ti- suspire, ella me sonrió- me hizo falta tu calor, tu aroma, nuestra cama, nuestro hogar , nuestro hijo de cuatro patas- sonreí.

- Mi Flor- suspire, perdiéndome en su mirada, esa mirada llena de amor, amor solo para mi, unos pasos se escucharon, nos separamos.

- Te veo en unos minutos Jazmín- camine hacia mi oficina, abrí la puerta, entre, coloqué mis cosas, abrí la persiana, para verla, para inspirarme, una sonrisa en mis labios, regrese a mi silla, ocupada, saturada , en mi pensamiento ella, mi esposa, se ve hermosa pensé, mientras mis ojos la admiraban discretamente, suspiros, sonrisas  discretas, alegra mi vida, mis días, mi alma .

Jazmín

Nuestras reuniones, las miradas cómplices, esos besos y caricias que deseaba darle, hacerle, suspire mientras colocaba mi saco sobre mis hombros a unos minutos de salir de la oficina, nuestros ojos se encontraron , una ligera y discreta sonrisa se dibujó en nuestros labios, sonreí, tome mi bolso , las llaves del auto y conduje , hacia mi casa, nuestra casa, al llegar abrí la puerta del auto , camine hacia la casa , en la puerta un globo de corazón, abrí, al entrar una rosa sobre la mesa del recibidor , sonreí, sobre la escalera un pequeño muñeco de peluche, suspire, fui a la habitación, la busqué no estaba, regrese a la sala, le abrí la puerta a Erato para salir al jardín, estaba jugando con él cuando la puerta se abrió.

- Esposa- dije a penas entre, al fondo ella jugando con Erato, camine hacia ella, me senté a su lado.

- Hola mi amor- bese su mejilla.

- Ese beso no me gusto- la mire haciendo cara de niña berrinchuda.

- ¡Te amo!- acaricie su mejilla, bese sus labios.

- Mi amor, es tan difícil dormir sin ti a mi lado- suspire, un silencio- quiero mudarme definitivamente contigo.