FLORES

EN FAMILIA

Andrea

Mis ojos se posaron en mi madre, ella me dio una sonrisa, camine a su encuentro, estando con ella, me abrazo con fuerza.

- Te extrañe mi amor- bese su mejilla, la sostenía entre mis brazos, ella seco una lagrima de manera rápida, en ese momento yo estaba completa mi esposa, mis dos hijos conmigo, suspire.

- Yo también te extrañé madre- sonreí, ella acaricio mi mejilla, yo oculté mi lagrimas a veces quiero ser tan fuerte como mi madre, pensé, cerré los ojos, la abrace nuevamente, mi tío dijo el nombre de Jazmín, lo cual me sorprendió, el se acercó la abrazo.

- Que gusto verte-bese su mejilla, ella es una persona muy agradable y sobretodo hace feliz a mi hermana, tenemos la versión más cariñosa, más cercana desde que esta con ella.

- Feliz de estar de vuelta en este país- le di una sonrisa- Feliz de verlos- el me miro.

- Te vez- algo notaba diferente, cuando baje la mirada hacia su vientre ahí estaba- te vez hermosa, muchas felicidades a las dos- la abrace con fuerza.

- Gracias- suspire, mis ojos veían a Andrea quien ya había visto mi panza, me daba miedo su reacción, mi esposa se acercó, tomo mi mano, me sentí tranquila.

- Estamos embarazadas- cuando dije esto volteé la mirada hacia Andrea, hacia mi pequeña y celosa hija, supongo que es natural sentirse celoso del nuevo hermanito.

Jazmín

El momento había llegado, Andrea lo escucho, lo sabía, sus ojos me miraban, su rostro confundido, no decía nada solo nos observaba, no me sentía preparada para ver y escuchar un berrinche de ella, respire profundo , Flor se acercó a ella.

- Mi amor- bese su frente, la abrace, la traje hacia mi pecho- serás la hermana mayor más guapa e inteligente- ella me sonrió, una sonrisa algo forzada.

- Si, má- suspire, me acerque a Jazmín, me sentó algo incomoda, confundida, bese su mejilla- hola- sonreí.

- Hola guapa- le di un beso y un abrazo, ella seguía sin saber que hacer, o que decir, caminamos, Alejandro tomo las maletas, fuimos al auto, Flor iba al frente Andrea conmigo, ella me miraba, yo le di una sonrisa, en el trayecto tomo valor e hizo algo que pensé jamás haría.

- ¿Puedo tocar tu pancita? -  una sonrisa se dibujó, quizás tener un hermano no sea tan malo, ser la hermana mayor y dejar de ser la consentida.

- Claro, que puedes- le di una sonrisa, ella sonrió, su semblante se relajó, su mano estaba sobre mi pancita, yo me sentí más tranquila con ese cambio de actitud.

Flor

Vi a mi hija por el retrovisor, tocar la pancita de mi esposa, una sonrisa se dibujó en mi rostro, suspire, me relaje, al llegar a casa, estaciono el auto mi hermano, nosotros, bajamos, mi madre se acercó a saludar a Jazmín.

- Hija, que gusto verte- me acerque, la abrace, bese su mejilla- te vez hermosa embarazada- toque su pancita.

- Gracias- le di una sonrisa- es un niño y se llamará Florian- ella sonrió, Flor se acercó.

- ¿Para mí no hay un abrazo? - mi madre sonrió, su cabello blanco, las arrugas de su rostro, su mejilla suave.

- Claro que si mi amor, me harás abuela por segunda vez- dije al borde de las lágrimas.

- Así es madre, un nieto más- entre sonrisas y bromas entramos a casa con el resto de la familia.

Flor

Alegría, felicidad, estoy perdidamente enamorada, pensaba mientras observaba a mi esposa conversando con mis hermanos, mis padres, verla rodeada de amor, saber que mi hijo pequeño al igual que Andrea siempre tendrán una familia, que los respalde, suspire, mi hermana se acercó.

- Me alegra que las cosas se solucionaran- le di una sonrisa, el semblante de mi hermana otra vez era de alegría, me hacia tanto bien verla así, la última vez que la vi, la noté , la vi llorar como nunca antes la había visto.

- Si, a mi más- suspire, los ojos puestos en ella, en esa sonrisa, en el brillo de su mirada- la amo, estoy feliz, soy inmensamente feliz- seré madre- dije riendo, con un toque de alegría, de amor en la mirada, estoy segura que es así, estoy feliz.

- Seré tía por segunda vez- nos abrazamos- gracias por confiar en mí, gracias por compartir con nosotros esta alegría, te amo y quiero verte feliz siempre, yo sé que tu felicidad esta a lado de Jazmín.

- Con ella me siento libre, alegre, puedo ser yo, no tengo miedo a nada si ella está conmigo- suspire, hablaba de ella, mis ojos posados en esa sonrisa mágica- Jazmin camino hacia mi.

- Señora- la abrace, bese su mejilla, parecía un sueño, estar así, aquí, suspire.

- Dime cielo- ella besó mis labios- me encanta cuando me besas y sonríes a mitad de beso- enmarque su rostro, mire sus ojos, esos ojos café, llenos de amor, de ternura- te ves hermosa, eres hermosa.

- Te amo Rosales- nos dimos un abrazo fuerte, suspire, estaba y era tan feliz estando a su lado, mirándome en esos ojos, respirando su perfume, nuestros dedos se enlazaron, fuimos al comedor, luego de la comida fuimos a la sala.

- No me canso de mirarte, bella- le dije al oído, una ligera sonrisa se dibujó, el hoyuelo en su mejilla.

- Me pones nerviosa- dije en tono suave, una sonrisa nerviosa se dibujó en mi rostro, mi rostro, estaba cerca de su mejilla.

Jazmín

Una sonrisa en los labios, una taza de té entre mis manos, una alegría que no podía ocultar, ver a mi esposa sonreír, rodeada de su familia que se había convertido en la mía también,  verla feliz hablando de sus hijos, de sus planes, de la alegría que sentía y de lo feliz que era a mi lado, mi pecho se llenaba de orgullo, saber que hago feliz al amor de mi vida, saber que nos amamos y pronto seremos madres, una sonrisa en los labios, llamaron a la puerta, me puse de pie.

- Yo abro- deje la taza sobre la mesa, camine hacia la puerta, mi sonrisa se desvaneció al ver a esa mujer.