FLORES

A LA CARA

  Laura
  Jazmín salió del lugar, yo salí minutos después, caminé hacia el colegio de Andrea, esperé paciente por ella, cuando salió camino hacia mi, yo la recibí con los brazos abiertos y un beso en la mejilla, ella se abrazó a mí.
 
  - Me gusta que vengas por mi- le dije sonriendo.
 
  - Encantada de hacerlo- caminamos abrazadas, hacia el restaurante que tanto le gusta, nos sentamos, ordenamos la comida, ella hablaba de su día, de su entrenamiento, yo escuchaba atenta.
 
  Flor
  Al salir de la oficina, fui directo a casa, Jazmín, estaba ahí con mi hijo, jugando, yo coloqué mi bolso, mi portafolio, le di una sonrisa a mi esposa, y le lancé un beso.
 
  - Ahora vuelvo- ella sonrió.
 
  - Si, amor- la vi subir la escalera, minutos después vino hacia nosotros, se acercó a mi, beso mis labios y luego tomo entre sus brazos a nuestro hijo.
 
  - En esta casa Andrea parece que ya no vive- dije molesta.
 
  - Esta disfrutando la compañía de Laura- guiño de ojo.
 
  - Ya que se vaya, esa mujer solo trae problemas dije molesta, minutos más tarde la puerta se abrió, Andrea con una sonrisa en los labios dijo.
 
  - Estoy en casa madres- sonrisa tímida.
 
  Laura
  Escuchar a Andrea decir madres, me incomodó, pero debo respetar las desiciones de mi hija, yo me quede en la puerta, Andrea tomo mi mano.
 
  - Ven pasa- sonreí, la convencí.
 
  - Buena tarde- mi tono tímido, Jazmín y Flor respondieron.
 
  - Buena tarde.
 
  Flor
  Su presencia no era grata para mí y se que menos para Jazmín, quien se comporta como toda una dama, lo cual admiro y me enamora más, se puso de pie, yo me une con Florian, sobre la alfombra, Jazmín se acercó a Andrea y Laura.
 
  - Pasa por favor- la mire- ¿te ofrezco algo de tomar?- la mire.
 
  - No, gracias, solo vine a dejar a Andrea y a despedirme de ella mañana viajo a Lima- cuando dije eso Andrea se abrazó a mí.
 
  - No te vayas- dije entre lágrimas, abrazada a ella.
 
  - Mi amor, nos vemos en unos meses, en tus vacaciones de verano- intente convencerla, pero la realidad era que faltaba mucho para volver a verla, yo debía mantenerme fuerte.
 
  - Esta bien- ella me abrazo con fuerza, beso mi mejilla.
 
  - Ahora debo irme- Flor se puso de pie, con el pequeño entre sus brazos, su cabello era rizado, color castaño claro, el bebé volteó la mirada hacia mi, sus ojos eran verdes, su sonrisa, esa sonrisa la reconocí, era la sonrisa de Jazmin, yo le di una sonrisa al bebé, me anime- ¿puedo cargarlo? - pregunte tímidamente.
 
  - Claro- voltee la mirada hacia Jazmin, quien con una sonrisa, dio su aprobación.
 
  - Hola, guapo- si piel era blanca como la de Jazmin, Flor lo veía con tanto amor, que suerte tiene pensé, Jazmín, es afortunada, tener un hijo con la mujer que ama y la ama, esa dicha de tener un hijo no me fue posible, pensé, el pequeño, me daba una sonrisa, Flor se acercó.
 
  - Debe tomar su siesta- lo quite de sus brazos, Laura levantó la mirada hacia Jazmín.
 
  - Gracias por las atenciones- le di una sonrisa.
 
  - Con gusto que tengas buen viaje- le di una sonrisa, camino con Andrea hacia la puerta Flor y yo le dimos su espacio, nos quedamos dentro de la casa.
 
  Flor
  Disfrutar dormir a mi hijo, verlo crecer, ver su sonrisa, verlo descubrir cosas, ver madurar a mi esposa, verla criar a nuestros hijos, me llena el corazón, el alma y me da vida, estoy perdidamente enamorada y entre mas la conozco, más la amo, la admiro, sonreí.
 
  Jazmín
  Mis días, eran pesados y los viernes eran perfectos para mi a excepción de este que tendré casa llena de niñas , el bebé y mi esposa, estaba distraída , cuando tocaron a la puerta, en tono suave dije.
 
  - Pase por favor- Rocio entro.
 
  - Hola, preciosa- me acerque bese su mejilla y la abrace.
 
  - Hola, buen día- le di una sonrisa, ella correspondió.
 
  - Vengo a presentarte a persona encargada de marketing- sonreí- ella es Veronica, Veronica ella es Jazmín Villanueva, gerente de compras nacionales- Veronica se acercó, tomo su mano, le dio una sonrisa.
 
  - Un gusto conocerte- es una chica muy guapa pensé, es mi tipo lo supe de inmediato, a la puerta se abrió, una mujer alta, de tez morena, sin darse cuenta que estábamos dijo.
 
  - Tengo una duda en el presupuesto de abril- con el papel en la mano y sin prestar atención, hasta que mi esposa dijo.
 
  - Buen día Flor, ella es Veronica, gerente de mercadotecnia- las mejillas de Flor se sonrojaron, Rocio la saludo.
 
  - Hola, buen día Flor- le di una sonrisa, nuestros saludos eran totalmente de cortesía.
 
  - Hola Rocio, buen día- le di una sonrisa, volteé la mirada hacia Veronica, una chica muy femenina, joven, cabello rubio, ojos verdes.
 
  - Hola Flor, buen día un gusto- la noté observándome, como analizándome.
 
  - Bienvenida Veronica- dije mirándola, Rocio por su parte dijo.
 
  - Nos vamos, las dejas trabajar- Veronica, regreso la mirada hacia Jazmín, con una sonrisa en los labios le dijo.
 
  - Bonito día- le di una sonrisa salimos.
 
  Flor
  Me quede esperando a que la tipa saliera, con los brazos cruzados, molesta e incómoda, mire a Jazmín, quien se acercó, beso mis labios.
 
  - Podemos ponerle seguro a la puerta- guiño de ojo, ella me miró seria.
 
  - No- ¿estaba celosa?, Jazmín, levantó la mirada, se alejó de mí.
 
  - ¿Revisamos tu duda?- camine hacia mi escritorio, ella se sentó frente a mi, de inmediato al tomar la hoja noté el error- lo siento, los chicos lo van a corregir lo tendrás en tu escritorio el lunes por la mañana- Flor se levantó.
 
  - Gracias, a primera hora por favor- camine hacia la puerta, Jazmín me detuvo.
 
  - Me iré al medio dia, iré por Andrea, luego de compras- Flor me miró.
 
  - Gracias por ayudarla- sonreí.
 
  - Por favor cuando llegues a casa asegúrate que Florian tomé sus vitaminas y que todo esté en orden en la sala de tv, para las amigas de Andrea.
 
  - Claro, no te preocupes yo me encargo- le di una sonrisa, abrí la puerta y salí de la oficina.
 
  Laura
  Llegue a Lima, tranquila porque sé que mi hija está bien, porque sé que Jazmín cuida de ella, pero triste, la vida no se cansa de gritarme a la cara que yo jamás tuve el amor de Flor que la tuve en mi vida, en mi cama, en mi casa, pero nunca estuve en su corazón, quizás Jazmín tenía razón, yo debía aceptar que ella no me amo y que utilice a Andrea.