DETALLES

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  Flor
  La rutina por la mañana, los besos al despertar, las sonrisas cómplices por los pasillos de la oficina, las flores, las cenas románticas, las notas que nos enviábamos entre los documentos que nos entregábamos, mis ojos posados en ella, en mi esposa, la sala de juntas lleno de gente, pero mis ojos sólo estaban posados en ella, en esa mirada, cuando mis ojos cambiaron de lugar ahí estaba esa tipa, la tal Veronica, Jazmín voltee a verme en su rostro se dibujó una sincera sonrisa.
 
  Jazmín
  Cuando mi mirada choca con la suya, un calor recorrió mi cuerpo, quería levantarme de la silla, caminar hacia ella, besarla, sumergida en mis pensamientos, hasta que la voz de Veronica, me trajo de vuelta.
 
  - Jazmín- sonreí, es linda pensé, sus ojos marrones chocaron con los míos.
 
  - Dime- regresé la mirada hacia Flor quien ya no estaba en su silla, regresé mis ojos y atención a Veronica, ella se sentó junto a mí.
 
  - ¿Podrías apoyarme con estos costos por favor? - le di una sonrisa, su perfume, estaba en mis fosas nasales, su perfil Perfecto.
 
  - Claro- le di una sonrisa- le diré a los chicos que consigan los costos- me puse de pie.
 
  - Gracias- no tenia otra excusa para retenerla, me puse de pie también, estaba por tomar mi pluma, la cual estaba cerca de su cuaderno, nuestras manos chocaron, nuestras miradas también, ella roso mi mano.
 
  - Te veo después- me sentí incómoda con su actitud, pensaba mientras caminaba, al entrar a mi oficina, llame a uno d oso chicos, la respuesta de él, me sorprendió.
 
  - Debe haber un error- mire a Jazmín, confundido con miedo a su reacción.
 
  - ¿Un error? - levante una ceja, si ellos no hacen su trabajo eso me molesta y si esta tipa vino a mi para solicitar estos datos debe ser por algo, pensé.
 
  - Estos costos ya se los había solicitado, yo se los envié a su correo- dije muy seguro.
 
  - Te creo- tomé el documento, entre mis manos, mire a Ariel y le dije- énvialo nuevamente por favor- le di una sonrisa, pero realmente estaba molesta con esa chica.
 
  - Claro.
 
  Flor
  Estaba sentada en mi oficina, compré unas flores en línea, el ramo más grande, más frondoso de rosas rojas, con una nota que decía:
 
  "Me parece extremadamente sexy el aroma de tu inteligencia "
 
  Sonreí, finalicé mi compra, esperé ansiosa a verla entrar a mi oficina y agradecer, ese ramo de rosas, con un beso, posar mis manos sobre su cintura, respirar su aroma, suspiré.
 
  Jazmín
  La hora de comida, llegó mi Flor y yo nos encontramos en el comedor, me sonrió.
 
  - Hola desconocida- sonreí, amo su sonrisa, me encanta verla, respirar su perfume, sentir el rose de su piel, sentirla cerca de mi.
 
  - Hola, señora de Rosales- sonrisa nerviosa, me encanta decirle así, señora de Rósales decirle que la amo y dejar claro que es mi señora esposa, que lo sepa el mundo entero.
 
  - ¿Cómo va su día? - tomamos la charola con la comida, caminamos hacia una mesa vacía, nos sentamos.
 
  - Mi día- suspiré, separé los cubiertos de la servilleta de papel- sin contar que se la pasan coqueteando con mi esposa- tono incómodo, mueca en mi rostro- bien con mucho trabajo- sonreí.
 
  - Tu esposa iba a darte un beso a tu oficina, después de la comida- guiño de ojo, se acercaron unos compañeros, Flor los recibió con una sonrisa, conversamos algunos minutos, hasta que Veronica , se acercó , sonrió, el rostro de Flor cambió, esa tipa en tono amistoso dijo,.
 
  - Hola, chicos- me senté junto a Rocio, mi presencia no fue muy grata para Flor, pensé, al ver su reacción y su actitud lo comprobé.
 
  - Buen día chicos- me levante- que tengan buena tarde- camine hacia la cocina, entregue el plato y me fui a mi oficina.
 
  Jazmín
  Cuando Flor camino hacia la salida, yo sonreí, me muerde unos minutos, luego me levante de la mesa.
 
  - Los veo más tarde- me levanté la situación era incómoda, yo quería estar en la comida con mi esposa y convivir con mis compañeros , pero sin Veronica , pensé, camine hacia la entrada principal, una voz me hizo voltear.
 
  - La comida es deliciosa- sonreí, camine tan rapido que logre alcanzar a la bella Jazmín , intente iniciar la conversación, quería acercarme conocerla.
 
  - Si- no dije mas, no estaba muy intenersada en conversar.
 
  - Me gusta trabajar aquí- sonreí, no sé ni qué digo pero intento llamar su atención.
 
  - si, honestamente es muy buen lugar para trabajar- seguí caminando.
 
  - ¿Tienes hijo?- ella me miró y sonrió.
 
  - Si dos - sonreí a recordar - un Niño de cinco meses y una niña de doce años- ella me miró sorprendida.
 
  - Wow- la mire- eres muy joven para tener una niña de esa edad- ella volvió a sonreir.
 
  - No tanto- caminamos hacia la recepción- tengo una familia, soy muy feliz con- la recepcionista se acercó a mi, una sonrisa en sus labios, rosas rojas sobre el escritorio- que lindas flores Abigail- le di una sonrisa, ella correspondió.
 
  - No son para mi- dije dejando caer los hombros- Son para usted, ingeniera- ella se acercó, tomo la tarjeta, con una sonrisa en los labios dijo.
 
  - Gracias- sonreí, era tan fácil adivinar de quien eran, suspire, abrí la tarjeta, el mensaje me encanto, al igual que las flores, sus detalles me fascinan, me enamoran, Veronica seguía parada ahí, la chica de recepción dijo.
 
  - Su esposa, la ing. Flor, es muy detallista que bonito, ojalá yo encontrara a alguien así- suspire, me gustaba y admiraba tanto la relación que tienen, el amor con el cual se miran.
 
  - Lo encontrarás, aún eres muy joven- guiño de ojo, ella se acercó.
 
  - Me encanta la pareja que hacen, cómo se miran- sonreí.
 
  Veronica
  Trague saliva al escuchar eso, quede sin palabras, estaba apenada.
 

FLORESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora