—P' Kim, tengo que abrir la puer...La voz de Chay se pierde en medio de un cálido y ansioso beso. Ese tipo de beso que Kim suele darle cuando intenta convencerlo de algo. Chay está seguro de que Kim sabe que sus labios son la mayor de sus debilidades por lo que a Chay le resulta difícil hacer frente a ese tipo de arma.
—No abras, que todos piensen que la fiesta ha sido cancelada— dice Kim y vuelve a atrapar a Chay en sus brazos.
Ambos están en medio de ese lujoso pent-house en Nueva York que Kim compró para ambos recientemente ya que Chay mencionó que le gustaría celebrar la Navidad en un lugar donde realmente nieva. Así que ese año, ellos estaban a cargo de la fiesta navideña y el timbre que anuncia la llegada del primero de sus invitados sigue sonando con insistencia mientras Chay intenta recuperar la cordura, algo que no es fácil de hacer cuando las manos de Kim acarician su espalda.
Chay piensa que el milagro de la cercanía de Kim es como estar atrapado en un hechizo que se hace más fuerte por la magia del ambiente navideño que los rodea: el enorme árbol lleno de luces de colores y adornos que Chay puso con la ayuda de Khun quien llegó antes que todos los demás; también está el delicioso olor de un pavo enorme que Kinn y Porsche eligieron para que todos comieran en la cena, y el clima frío afuera que hace que Chay quiera tener el calor de Kim en sus brazos para siempre. En realidad, está nevando en ese momento y Chay cree que está viviendo totalmente en una película de comedia romántica navideña.
—Kim, todos estaban emocionados por la fiesta de navidad, no podemos cancelarla— dice Chay tratando de ser fuerte.
—Diles que tendremos otra el año que viene, siempre habrá otra Navidad— susurra Kim en sus labios y a Chay le da un escalofrío que le hace sentir la urgencia de cancelar la fiesta después de todo.
—Pero este es importante...
—Claro que lo es, es mi primera Navidad contigo, la primera de muchas.
—¡Oh, Kim!— exclama Chay antes de besar al otro chico sintiéndose completamente conmovido por lo que ha dicho antes.
—¿Ves? Tú también quieres pasar esta noche a solas conmigo.
—Pero...
—Si abres la puerta, el frío vendrá de afuera, no quieres que tenga frío, ¿verdad, ángel?
Chay sonríe al mirar el rostro de Kim quien en ese momento está sonriendo como lo hacen los ángeles caídos cuando saben que se han salido con la suya con lo que querían. Chay haría cualquier cosa cuando Kim lo mira de esa manera. Porchay podría darle el mundo entero si Kim le prometiera que se quedaría a su lado para siempre. También es cierto que Chay no quiere que Kim sienta más frío en su vida y Chay quiere ser una eterna primavera en la vida de Kim.
—No, no quiero que tengas frío— dice Chay y Kim pone sus brazos alrededor de su cuello.
—Entonces olvídate de la puerta, por favor— dice Kim riéndose alegremente—. Tenemos diez minutos antes de que alguien recuerde que hay una llave debajo de la alfombra de bienvenida, así que...
—Bueno, si son solo diez minutos...— dice Chay riéndose también.
—Serán los mejores diez minutos de tu vida, ángel.
Los labios de Kim chocan de nuevo con los de Porchay y los dos siguen besándose rodeados de luces de colores hasta que el sonido del timbre, después de varios minutos, simplemente se pierde en medio de ese mundo particular en el que Kim y Porchay no saben nada del clima frío de afuera nunca más.
NDA: ¡Feliz Navidad queridos todos, todas y todes! Espero que tengan un día lleno de amor, magia, regalos y comida deliciosa en sus hogares. Mil gracias por darme de regalo de navidad más de 40K lecturas en estos pequeños trozos de miel. Estoy muy agradecida de que me acompañen en la aventura. Mis mejores deseos, festejen mucho :3
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KimChay Moments
FanfictionEscritos cortos llenos de amor y cosas dulces para sanar nuestro corazón después del final desgarrador de Kim y Chay en el canon.