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Kim está a punto de irse al aeropuerto y todo parece ser un desastre de magnitudes apocalípticas. A pesar de que llevan más de un mes planeando aquel viaje que será el primero para Kim en su tour mundial, parece que jamás estarán listos para lograr que Kim llegue a tiempo a pesar de que su representante, guardaespaldas e incluso Khun quien lo acompañará en la primera parte del viaje siguen dando órdenes a diestra y siniestra sin recordar la existencia de Chay quien de pronto nota que Kim ha dejado su billetera sobre la mesa de la cocina de la casa de los dos.
Chay se apresura a recogerla y segundos después, siente que la mano de Kim toma la suya y después su novio lo envuelve entre sus brazos y de pronto Chay se da cuenta de que ha llegado el momento de despedirse de Kim por unos días.
—Ángel, debo irme ahora— dice Kim sin soltarlo—. Te veré en Madrid en dos semanas, ¿de acuerdo? Kinn te acompañará y Porsche se reunirá con los dos allá.
—Lo sé, P'Kim, no te preocupes por mí— dice Chay con una sonrisa brillante a pesar de que sabe que será difícil estar lejos de Kim por dos semanas.
—Voy a extrañarte todos los días pero no me olvidaré de llamar— dice Kim y besa su frente—. Todo irá bien, ya verás. Te amo, Chay.
—También te amo, P'Kim— dice Chay sin dejar de sonreír—. Por cierto ¿no olvidas algo?
Kim sonríe de forma traviesa y sin pensarlo demasiado, Kim lo besa de forma profunda y Chay siente todo el calor del universo al sentir los labios de Kim sobre los suyos y oh, demonios, Chay extrañará poder besar a Kim de ese modo todos los días.
—Ya llevo todo conmigo ahora— dice Kim y Chay tiene que tomarse un momento para volver al mundo real.
—Yo me refería a tu billetera pero wow, gracias por ese beso— dice Chay con las mejillas sonrojadas y Kim rompe a reír antes de besarlo una vez más a pesar de los gritos de Khun quien dice que van a perder el avión si no se van de una buena vez.
Pero Kim y Chay no están escuchando. Van a estar separados por dos semanas y en ese beso, están prometiéndose no dejar de pensar el uno en el otro hasta que puedan volverse a encontrar.
