Kimhan Theerapanyakul:
Uso tu nombre completo porque las grandes cartas de amor de la historia siempre empiezan así. La persona que las escribe, llama de una manera preciosa a su destinatario y debes saber que yo no puedo pensar en una mejor forma de llamarte que no sea tu nombre. Tu nombre suena a música para mí, así que discúlpame por no ser capaz de ser más creativo.
Hace una semana que me invitaste a ir contigo a tu lugar favorito en el mundo, ese sitio que siempre ha sido tu refugio. Con una sonrisa en tus labios dijiste que querías llevarme contigo al único sitio en Bangkok donde no había más que recuerdos felices para ti, recuerdos de todas esas tardes en las que escapaste del dolor de la vida perdiéndote en la soledad de ese lugar que te vio crear muchas de tus canciones más famosas.
Yo te seguí, te seguí porque sé que amas la música con toda tu alma, que las canciones son tu hogar y también un sitio sagrado para ti. Y además, P’Kim, debes saber que te seguiría a cualquier sitio a donde quieras ir, así que estar contigo en ese luminoso y espacioso estudio musical que tiene una de las vistas más espectaculares de la ciudad, es algo que sin duda volvería a hacer.
Sobra decir que me sentí feliz de que pudieras compartir conmigo un sitio así, el sitio donde me dijiste has aprendido todo lo que sabes.Estar rodeados de tus guitarras y de cientos de hojas de papel pautado que contienen canciones que cobran vida cuando empiezas a cantarlas era algo mágico y de pronto yo me sentí capaz de escribir algo para ti.
Ansiaba que tus ojos leyeran mis palabras con la misma emoción con la que sueles leer tus partituras favoritas. Ansiaba poder contarte una historia capaz de hacerte sonreír.
Además, días atrás me habías dicho que nadie nunca había escrito una carta de amor para ti y bueno, quiero ser tu primera vez en este departamento también.
La gente dice que nadie puede enseñarte a escribir y creo que ahora mismo empiezo a entenderlo. Mis profesores de escritura creativa en la universidad me dijeron que si quieres aprender el arte de la literatura, tienes que sumergirte en ella y dejarte guiar por las obras de esos grandes hombres que antes que tú, llenaron al mundo de otros nuevos mundos creados a base de imaginación, tinta y papel.
Después de la visita a tu estudio, P’Kim, decidí seguir el consejo de mis profesores así que aprovechando el hecho de que el semestre está a punto de terminar, solía escaparme por una hora todos los días con rumbo a la biblioteca de la universidad. Quería que hombres más sabios que yo en el arte de vivir me indicaran cuál era la mejor manera de escribir una carta de amor, una carta solamente para ti. Y creo que, sin afán de ser irrespetuoso con todos los hombres y mujeres que antes que yo amaron tanto al grado de dejar un testimonio de ese amor vuelto palabras, no hay una forma correcta de escribir cartas de amor: simplemente tienes que dejarte llevar y escribirlas ¿no es así?
La escritura es un arte complejo y sé que te estoy diciendo algo de sobra obvio para ti pero quiero que sepas que si recurrí a una misión de investigación es porque no quería escribirte solo tonterías. Porque lo que siento por ti P’Kim, no es una tontería, no. Lo que haces nacer en mi corazón es la emoción más verdadera y pura que haya sentido alguna vez en mi vida porque ¿sabes? Me haces sentir amor.
Debo decirte que en realidad jamás había pensado que alguna vez yo me enamoraría de alguien, el amor no era una de mis prioridades porque debo admitir que mi corazón solo era capaz de acelerarse cuando escuchaba las canciones de WIK. Ese amor torpe y sin esperanza era el único amor que creí necesitar porque en realidad había muchas cosas en mi vida que me parecían más apremiantes.
No buscaba saber qué era el amor, creo que algo en mi interior estaba convencido de que algo así no podía existir en el mundo real. Es decir, el mundo entero te bombardea siempre con el mensaje de que debes amar a alguien, de que más que tu derecho es tu obligación encontrar a alguien y quedarte a su lado para no estar solo. Huimos de la soledad buscando el amor, creemos que el amor es el destino último de nuestros pasos en este mundo pero creo que ya no pienso así después de conocerte.
Creo que desde que empecé a escuchar tus canciones, siempre me identifiqué con la soledad de tus letras, la melancolía de los paisajes que describes y que a pesar de todo dejaba en mi alma un resabio de esperanza. Al escucharte, me di cuenta de que tú también pensabas que la soledad era el último de nuestros refugios más que ser una carga y eso me gustó. Porque en tus canciones que también hablan de amor, pude entender que el amor llega sin que lo esperes y que cuando llega, no lo soluciona todo, no lo puede todo pero sí pinta al mundo de mil colores diferentes. Y así está bien ¿no crees?
A tu lado P’ Kim, sé que el amor no es el destino último de mis pasos sino que será un viaje. Un viaje que no estaría dispuesto a hacer de la mano de nadie que no fueras tú. Un viaje que no sabemos a dónde ha de llevarnos pero en el cual los dos caminaremos de la mano.
Me siento afortunado al mirarte sonreírme todos los días. A veces no entiendo muy bien cómo es posible que tú hayas encontrado algo valioso en mí. Es decir, cuando camino contigo de la mano sé que todos los ojos que nos miran se posan en ti y yo no los culpo porque eres hermoso.
Sé que has escuchado esa palabra muchas veces a lo largo de tu vida, P’Kim pero me es inevitable usarla porque así eres tú. El lenguaje humano es tan limitado que tendría que inventar un idioma entero para hacerte saber todo lo que significas para mí.
Y creo que durante mi investigación en la biblioteca me encontré con un término precioso que me hizo pensar en ti.
Verás, en Japón existe un arte antiguo llamado Kintsugi que hace referencia a la técnica que le permitía a los artesanos que trabajaban con la cerámica poder reparar piezas preciadas uniendo los trozos rotos a base de barniz de resina y polvos de oro o de platino.Los artesanos pensaban que aquello que había sido roto debía mostrar de forma orgullosa sus heridas porque ellas narraban su historia, aquellas imperfecciones hacían del objeto algo aún más hermoso. Las cicatrices eran pues el aspecto más bello de la pieza, las cicatrices no eran un motivo de vergüenza sino que éstas elevaban su valor.
Sé que hay veces, P’ Kim, en las que tú mismo te sientes roto y al igual que el artesano, estás intentando resanar heridas en tu alma que jamás tendrás que esconder de mí.Tú eres hermoso P'Kim porque nada ha podido destruir esa fortaleza que escondes dentro de ti. Y esa belleza que surge de la destrucción como las flores que crecen tercamente después de un invierno largo, la belleza que no apela a la idea de la perfección, es la belleza más sublime que alguien puede observar.
Los dos trabajamos con el arte,P’Kim, y tú sabes que el arte mismo no nace de la perfección de los seres humanos, muchas veces nace de nuestro lado más imperfecto, de ese lugar profundo que está lleno de dolor, de tristeza y de desesperación.
Tú no eres perfecto y tampoco quiero que lo seas. Me enamoré de ti en el mismo instante en el que me di cuenta de que eres un hombre solitario con miles de heridas en el alma al igual que yo. Me enamoré de ti en el justo instante en el que comprendí que podría hacer de mi amor algo parecido a lo que el artesano hace con el oro y la resina: te ayudaría a sanar, te ayudaría a mostrarte que todo el dolor que el mundo te ha hecho pasar no ha restado nada a la belleza que brota de ti cuando sonríes y tus ojos se iluminan al mirarme.Como ya te dije, P’Kim, el amor no puede contra todo pero sé que si estamos juntos haremos de nuestras vidas obras de arte. Le contaremos al mundo una historia en la que dos hombres decidieron amarse y ser la mejor versión de cada uno de ellos al lado del otro. Viviremos muchos días juntos, quizá en algunos de ellos querremos volver a estar lejos pero ¿sabes? Mi amor siempre estará contigo.
Tu alma y mi alma estarán siempre unidas de algún modo. Porque eres parte de mi historia ahora. Porque llenaremos un álbum entero con nuestras fotografías y nuestras canciones y lo único que quiero, P’Kim, es que ese mundo que crearemos los dos sea nuestra obra maestra.
No voy a prometerte que todo estará bien porque ya sabes que ni el mundo ni la vida entienden el concepto de justicia. No te diré que todo sanará de la noche a la mañana porque volver a construir lleva tiempo pero sí te diré que estaré a tu lado siempre y tú serás quién me dirá cuánto ha de durar ese siempre. Así sea una vida entera, varios años o solo unos días quiero que sepas que viviré ese siempre con todo mi ser. Porque compartir mi vida contigo es ese sueño que no buscaba pero al cual no renunciaré ahora que lo tengo.
Si estás cansado, P’ Kim, cuidaré de ti. Si la oscuridad nos cubre siempre tendré una luz encendida con la cual poder protegerte. Si el dolor viene y busca hacerte daño, voy a cantarte de nuevo y acariciaré tus heridas sin miedo hasta que dejen de doler. Si en el pasado el mundo entero te hizo daño yo buscaré reconfortarte ahora. Y si hay más dolor, lo compartiré contigo porque aunque llevamos nuestra propia soledad a cuestas, en realidad no estaremos solos ya.
Yo estoy contigo, siempre estaré contigo. Así que como lo haces en tu estudio secreto, por favor, refúgiate en mí y ten en mente que nada de lo que me digas o hagas cambiará lo que siento por ti.
Kimhan, mi amor y mi vida, quiero que sepas que es un privilegio enorme haberme encontrado con alguien como tú, una fuerza poderosa llena de vida que se abre paso en medio de las sombras. Si puedo pedirte algo, eso sería que me permitas caminar a tu lado por un largo, largo tiempo. El único deseo de mi corazón es poder ser parte de tu vida. Quiero presenciar tu alegría y tu tristeza.Siempre dices que soy tu ángel así que déjame protegerte y vuela conmigo buscando nuestro propio paraíso. Hay quien dice que el amor es un acto de fe porque no puedes volar si no crees que de verdad puedes hacerlo. Volemos entonces lejos del dolor. Volemos al lugar que esté más alejado de una despedida y construyamos un mundo solo para los dos.
Quisiera decirte mil cosas más pero creo que me reservaré algunas de ellas para poder expresarlas sin tantas palabras. Espero que la primera carta de amor que alguien ha escrito para ti haya sido de tu agrado y no te enojes mucho conmigo si no tiene tanta calidad como todas esas cosas hermosas que tú eres capaz de escribir en una canción.
Puse mi corazón en esta carta, P’ Kim y lo hice así porque no tengo miedo de que seas tú quien sostenga mi corazón y mi vida entera entre sus manos.Con amor, todo el amor que soy capaz de sentir, Porchay Kittisawat, tu ángel.
NDA: Tenía que atacarlos con mucha azúcar, no pido perdón xD ojalá les haya gustado esta carta y les invito a leer Samsara, mi nueva historia KimChay que ya está disponible en mi perfil 😉✨💕
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KimChay Moments
FanfictionEscritos cortos llenos de amor y cosas dulces para sanar nuestro corazón después del final desgarrador de Kim y Chay en el canon.