Sunghoon es un Alfa normal que estudia la preparatoria, y como cualquier otro chico estába apunto de reprobar una materia, pero ojo, estaba, hasta que llegó su Nuevo profesor, el cual era un Omega...
Heeseung solo tenía que tomar el ex trabajo de su...
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Jaeyun desvío su mirada del escritorio hacia su hijo, Jaewon tenía una expresión diferente a las que solía tener todo el tiempo, su hijo de notaba encantador, sus ojos esmeralda brillaban intensamente y su piel brillaba, incluso la sonrisa en su rostro era bonita. Su hijo rara vez se encontraba feliz y para el verlo de esa forma era un milagro.
Sobre todo lo que le acababa de pedir.
—¿Y tus ahorros? —pregunto, Jae solía ser un niño muy ahorrativo para su edad— de que yo sepa siempre has tenido una considerable cantidad de dinero todos los domingos.
El cachorro se enderezó en la silla, mirando los papeles en el costoso escritorio, al parecer ahora su papá defendería a una mujer en un caso penal, era un gran abogado y por eso no les faltaba nada, no carecía de dinero y tenía una gran vida al lado de su papá, era por eso que estaba estudiando tanto, deseaba convertirse en un gran abogado. Pero, dejando de lado el curioso caso miro a su progenitor, pasando saliva lentamente.
—Gaste una parte de mis ahorros hace tiempo para un proyecto escolar, es una buena cantidad la que sobra sin embargo quiero comprarle algo digno a mi madre. —espeto, dejando sobre el escritorio la caja llena de billetes— Ya he pedido el regalo de mi mamá desde el año pasado, yo mismo me estuve encargado de que saliera bien para esta fecha, pero necesito un poco de dinero, prometo que te lo devolveré pronto.
Jake sonrió.
—Eres mi hijo, no hace falta que me pidas prestado si es un regalo para tu mamá, se que...has estado esperando mucho por este día...así que toma el dinero que necesites y ve con tu mamá en su día.
Jaewon sintió sus ojos cristalizarse, bajando la mirada apenado de que lo vieran tan débil.
—Gracias, yo...yo juro que...
El mayor se levantó, rodeado el escritorio para quedar al lado de su hijo, agachandose a su altura para mirarlo con detenimiento, sus ojos...su piel... Jaewon no tenía grandes similitudes a HeeSeung, sin embargo poseía un gran atractivo y era igual que sensible que su madre, ambos solían romperé con facilidad pero también sabían arreglarse a si mismos, incluso su carácter y la forma tan linda en la que actuaban era igual.
—Sube a tu habitación y arreglate para hoy, ve por tu mamá y has que ambos pasen como nunca el día que tanto han esperado, estoy seguro que tú mamá también ha anhelado que esté día llegué. —con amor tomo las manos de su pequeño Alfa, Jaewon se sintió derretir en su asiento— Bebé, hijo, demuestrale a tu mamá lo mucho que lo amas...
Jaewon sollozó, levantándose en silencio e caminando hacia la salida de la oficina en silencio, había esperado tanto por ese dia, debía ser perfecto, algo inolvidable para ambos, es por eso que había arreglado todo desde que empezó el año. Pero que nuevamente pasaría un día solo, recostado en su habitación mirando con tristeza el regalo que nunca le entregaría a su madre ese día tan especial, pero después de tres años eso era diferente, el podría arreglarse para su mamá, ir por el para pasar un día juntos, podía...demostrarle lo mucho que le iso falta...
