Cap LXVII: La bipolaridad de Rachel

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14 de agosto de 2022


Abre lentamente sus ojos, no es su habitación. Al notarlo sonríe, lo que ocurrió la noche anterior no se trató de un sueño, fue completamente real. Voltea y lo ve a él, echado en su cama jugando Free Fire con su celular al igual como lo hace en el liceo durante los momentos de ocio.

-¿Tan temprano rateando? ¿Hace cuánto despertaste? – pregunta Tania.

-Hace poco, sus veinte minutos. Ah, por cierto, mi mamá me mandó un WhatsApp avisándome que se quedará a almorzar donde mi tía en Lampa y que la acompañará a vender artículos en una feria un rato. Hay pa' rato, así que si querí' te quedai', no tengai' apuro en irte – dice Freddy.

-Mi mamá me va a llamar y me va a decir que no abuse de la hospitalidad que me dará ya sea la Javiera o tú. Pero vale, acepto quedarme. ¿Cómo dormiste? – pregunta Tania.

-Bien, ¿y tú?

-Bien también. Ambos nos dormimos temprano como buenos alumnos que somos jaja.

-Claro, siempre cumplimos con la hora y además ayudamos a nuestros amigos.

-¿Qué sería del Fausto, la Patty y la Javi sin nosotros? – pregunta Tania.

-El Fausto fijo repite, porque él depende completamente de mí. La Patty por lo menos lo intenta, la Javi también, pero el Fausto no rendiría solo. ¿Querí' desayunar? – pregunta Freddy.

-Ya po. ¿Y qué vai' a hacer? ¿Me vai' a traer el desayuno a la cama?

-Eh... tshi, no querí' na'. Bueno, ya. Espérame aquí, yo haré algo y te lo traigo acá como si fuerai' mi reina – dice Freddy. Tania se sorprende, dijo "como si fuerai mi reina", y no "una reina". Anoche hizo el amor por primera vez con el hombre de sus sueños. ¿Se consolidará el amor entre Freddy y Tania?


Javiera no está, solo está él. Sofía no se ha percatado de su presencia. La puerta no está del todo cerrada, solo está junta. Ahí la ve en toalla recién salida de la ducha. Está emocionado, se quitará la toalla para vestirse, la verá desnuda... ¡Dios mío! ¡Esto no puede estar pasando! Su celular está sonando, será descubierto... No, no lo descubrirán, porque el celular lo acaba de despertar. Solo estaba soñando que estaba a punto de ver a Sofía desnuda. Ver de quién es la llamada entrante solo lo pone más furioso.

-Rachel, ¿qué onda? Es domingo y son las diez de la mañana – dice Pablo con desagrado.

-No seas tan quejumbroso, ni que estuvieras enguayabado. Quiero que me devuelvas el oso de peluche que te regalé cuando cumplimos tres meses juntos – dice Rachel tajante.

-Vaya manera de pedírmelo, ni saludai'.

-Tú tampoco me saludaste. Tráemelo ahora por favor – dice Rachel. Pablo no puede creer lo que escucha, todavía no se deshace del oso de peluche que le regaló Rachel, es de color café claro con un corazón rojo alrededor que dice "Te amo". Similar al que se ganó en aquella rifa que posteriormente obsequió a Rachel. Recién está despertando y quiere que se lo lleve ahora, qué patudez de su parte.

-¿Qué cresta te pasa? Ese oso me lo regalaste con cariño, y no tengo por qué devolverte algo que me regalaste. Los regalos no se devuelven, eso es algo que me enseñó mi mamita desde chico.

-No eres más que un niñito mimado.

-Y para peor, me despertaste de un buen sueño que estaba teniendo.

-¿Y qué soñabas? ¿Que jalabas con la Marce? ¿O acaso soñaste que volvías a eyacular? ¡Anorgásmico de mierda! – eso realmente dolió. Pablo sin pensarlo cuelga la llamada, no tiene por qué estar soportando que la desagradable de su ex lo esté tratando así. Rachel vuelve a llamar, Pablo se rehúsa a contestar. Rachel le envía un audio por WhatsApp, Pablo no quiere escucharlo, teme que su contenido pueda ser todavía más hiriente que sus últimas palabras de la llamada. Finalmente lo escucha antes de que Rachel intente llamar nuevamente – Pablo, si no me traes ese oso de peluche iré yo misma a buscarlo a tu casa – Pablo decide llamarla de vuelta, no tarda en contestar... – Ah, mira. Decidiste llamar tú siendo que odias las llamadas telefónicas, por fin te estás haciendo más hombrecito, señor anti llamadas.

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