One Shots : Marvel

"ARE YOU JEALOUS?"

La fiesta de inauguración de la Torre Stark estaba siendo todo un éxito. Marie llevaba puesto un traje rojo con camisa blanca con el que se sentía muy guapa. Se había maquillado suavemente, aplicándose un labial del mismo color del traje y un delineado de color negro en la esquina de los ojos. En ese momento estaba riéndose de algo que había dicho Thor, mientras varios metros más allá sentado en una de las mesas, el velocista no apartaba los ojos de ella.

Pietro se dio cuenta de que ella no era consciente de su atractivo, una simple sonrisa o un saludo le ponían nervioso. Sacudió la cabeza y le dio un trago a la copa de champán que sostenía entre las manos. 

-¿Que haces aquí tan solo, estás bien? -preguntó su hermana sentándose a su lado-

Pietro le dirigió una mirada de reojo antes de volver a fijarla en la joven frente a ellos

-Estoy bien ¿Te lo estás pasando bien? -preguntó-

-Si, he ido con Hill a ver que estaba haciendo Banner, ya sabes cómo es -explicó moviendo la mano en un gesto para restarle importancia-

-Ya -murmuró este distraídamente-

Wanda siguió la dirección de su mirada hasta ver lo que lo tenía tan distraído. 

-Deberías ir a hablar con ella -le animó dándole un golpe con el codo-

-Ni de coña, el arquero está saliendo con ella, no puedo ir a hablarle sin más -se quejó- 

-Solo vas a hablar con ella, no a declarársele en medio de toda esta gente -rebatió su hermana- ve, anda 

Pietro siguió el consejo de su hermana y se acercó a Marie, que en ese momento observaba la ciudad por los enormes ventanales de cristal de la torre. Ella se giró al notar unos pasos a su derecha, chocando así con la azulada mirada del velocista. Esta le sonrió levantando su copa  a modo de saludo.

-Hola 

-Hola -respondió el nervioso- ¿Cómo te va? ¿Te lo estás pasando bien? -preguntó señalando la fiesta tras ellos-

-Si -respondió sincera- la verdad es que es una fiesta fantástica -le miró- ¿Y tú?

-Bien, estoy... bien -repitió sin saber que más decir-

Ella sonrió dándole un sorbo a su copa. El aprovechó para hacer lo mismo.

-Estás muy guapa -dijo observándola de arriba abajo-

-Gracias -le dio un suave repaso- tu tampoco estás nada mal 

Ambos se rieron tratando de hacer más llevadero el momento. Pietro alzó la mirada hacia ella de nuevo y señaló el lugar donde estaba su hermana.

-Debería ir a ver a Wanda, ya sabes como se pone con el tema de las bebidas y todo eso -se disculpó señalándola, esta se giró para mirar a la menor de los Maximoff con una sonrisa-

-Si lo sé -respondió- ve -le dijo- y gracias por pasar este rato conmigo, lo necesitaba 

-Claro, siempre que quieras estoy disponible -respondió sonriendo tímidamente a la vez que se alejaba-

A los pocos segundos, el arquero se acercó a su amiga atrayéndola hacia si por la cintura para darle un suave beso en los labios. Pietro se obligó a apartar la mirara, los celos lo estaban consumiendo, algo que no le había pasado nunca. 

-Estás preciosa -susurró Clint al oído de Marie haciéndole cosquillas-

-Eres la segunda persona que me lo dice esta noche -sonrió dándole un trago a su copa, Clint sonrió sabiendo perfectamente quién había sido la primera-

Trató de hablar del tema sin que se notase la incomodidad que sentía. No lo consiguió, ya que ella notó en seguida que le pasaba algo.

-¿Todo bien con Pietro? -preguntó apresurándose a dar un trago de champán- 

Ella se rio mirándole fijamente

-Si estuvimos hablando sobre la fiesta -su sonrisa se volvió más amplia cuando preguntó- ¿Estás celoso? 

-¿Qué, celoso, yo? -preguntó señalándose- que va 

-No hace falta que lo niegues, Barton -susurró ella- mientes fatal

-Ya sé que es un amigo, como lo son Steve y Tony pero... -hizo una pausa, chasqueó la lengua- no lo sé, es una sensación extraña 

-Te entiendo -respondió esta apoyando la mano sobre su pecho- pero no tienes de que preocuparte, de verdad. Quiero a Pietro, pero no es el mismo tipo de amor que siento por ti 

El arquero sonrió mirándola fijamente, sus ojos brillaban emocionados.

-¿Y qué tipo de amor sientes por mi? -preguntó cerca de su boca-

-Puedo enseñártelo esta noche -murmuró coqueta robándole un suave beso- 

-Me parece una excelente idea -susurró el devolviéndole el beso-

Desde lejos, el velocista observaba la escena tratando de no romper la copa que sostenía entre las manos de un golpe contra el suelo. A los pocos segundos decidió irse de la fiesta. Puso una excusa diciendo que se encontraba mal y se fue a su habitación para tratar descansar un poco.

Se tomó una aspirina para el dolor de cabeza y se metió en la cama para tratar de olvidar todo lo que había visto, aunque al parecer por mucho que quisiera dejar de pensar en ello, su mente le enviaba una y otra vez imágenes de una suave melena color zanahoria y unos cálidos ojos marrones.