Alondra se despertó de nuevo en mitad de la noche por culpa de las pesadillas. Sus alas se habían desplegado haciendo que la habitación fuera un desastre debido a las cosas que había tirado sin querer. Varias de sus plumas volaban por el lugar como si una bandada de gallinas asustadas hubiera irrumpido en el lugar.
Acompasó su respiración poco a poco y se levantó de la cama, yendo a buscar a la única persona que sabía que entendía su situación. Se calzó las zapatillas rápidamente y salió de la habitación a paso ligero pero cuidadoso para no despertar a los demás mutantes.
No era la primera vez que Alondra se metía en la cama de Logan tras tener una pesadilla. En realidad el estaba acostumbrado a despertarse con su olor impregnando las sábanas. Todas las mañanas le tapaba con la manta y se iba para dejarla descansar.
A veces se pasaban horas y horas hablando sobre los fragmentos dispersos que recordaban de sus vidas, y de que pensaban que les depararía el futuro hasta que ella se dormía apoyada sobre su pecho. Logan podía escuchar los acompasados latidos de su corazón, lo que siempre le arrancaba una sonrisa, porque al menos alguno de los dos estaba obteniendo el descanso que se merecía, y a pesar de estar cayéndose de sueño, se alegraba de que fuera ella.
Debido a la cantidad de conversaciones mantenidas y las confesiones susurradas bien entrada la noche, Alondra había empezado a desarrollar sentimientos muy intensos hacia el, que no sabía cómo gestionar.
A veces cuando lo miraba solo pensaba en que aquella noche cuando las pesadillas amenazaran con destruirla, el la acunaría en sus brazos, haciéndole ver que estaba a salvo. Otras veces lo único que quería era que la follara de todas las maneras y posiciones que sabía que conocía.
Era un hecho de que Logan era un hombre experimentado. Doscientos años de vida dan para mucho. Sus mejillas se enrojecieron al imaginar cómo sería la expresión de su rostro cuando llegaba al éxtasis.
Sus pasos se detuvieron frente a la su puerta. Vio que había luz en el interior, lo cuál era extraño, teniendo en cuenta de que a esas horas de la noche normalmente la apagaba aunque no estuviera durmiendo.
Se debatió entre si debía entrar o si no. A veces sentía que le molestaba. Por supuesto Logan ya sabía que estaba al otro lado de la puerta. La había olido desde que puso un pie fuera de su habitación. En ese momento ella abrió la puerta. Sus miradas chocaron con intensidad haciendo que se sonrojara con más fuerza. Howlett pensó que se veía adorable, aunque no dijo nada al respecto.
-Princesa -murmuró exhalando una calada de su puro- ¿Has tenido otra pesadilla?
-Si -murmuró mientras seguía sujetando el pomo de la puerta- si estás ocupado puedo irme -soltó atropelladamente- no quiero molestarte
-¿Tengo pinta de estar ocupado en algo? -preguntó, ella negó con la cabeza- ven aquí -señaló el lugar a su lado-
Alondra cerró la puerta y se acomodó en la cama a su lado. Logan apagó el puro, lo cuál fue muy considerado por su parte, ya que sabía que ella no soportaba el tabaco. Ambos se mantuvieron en silencio unos segundos hasta que el lo interrumpió con suavidad.
-¿Quieres contármelo? -ofreció poniendo un brazo tras su cabeza para verla mejor-
-Estaba otra vez en el laboratorio -comenzó cerrando los ojos con fuerza- un hombre se acercó a mi con una sierra metálica -apretó los puños- empecé a gritar que se detuviera, pero el no me hacía caso -murmuró desviando la mirada hacia el- solo quiero que paren Logan -confesó mientras las lágrimas corrían por sus mejillas- por favor, haz que paren
El la estrechó entre sus brazos mientras le acariciaba el pelo.
-Shhh, todo va a ir bien -susurró en su oído- aquí estás a salvo, ya nadie va a volver a hacerte daño
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One Shots : Marvel
FanfictionEste será un one shot en el que iré haciendo historias con los distintos personajes del Ucm. ¡Espero que os gusten! ¡Gracias por leer! Love you 3.000 💫 (PEDIDOS CERRADOS)