—Me gusta—dijo Allie, viendo las paredes qué pintamos, teníamos que dejar las ventanas y las puertas abiertas para que no le hiciera daño al bebe, aunque Allie decía que era normal que en las películas las mujeres embarazas no les sucedía nada pero era mejor prevenir que lamentar.
—Y el sofá es azul—digo mordiéndome el labio inferior.
— ¿Azul? Bueno el gris combina con todo, me gustaría verlo—ella me tomó de la mano y le dio un beso—Me alegra que estés haciendo todo esto, se que te hace muy feliz y me hace feliz verte feliz y lo sabes.
—Lo sé, tonta—dije abrazándola, a la vez que Estefan me pasaba una cerveza a Allie le dio una coca cola y ella frunció el ceño.
—Seis meses tengo que esperar—dijo dándole un sorbo a la coca cola.
Nos quedamos charlando un buen rato en el suelo, hasta que se hicieron las siete y tuvimos que regresar a Allie a casa, Sebas se había ido antes que nos fuéramos nosotros.
Allie y yo nos acercamos a la puerta de su casa y tenía que admitirlo, estar ahí me daba nervios, no quería que Nani supiese nada.
Tocamos la puerta a la vez que miraba a Estefan desde el auto, Nani no tardo en abrir.
—Hola—susurró Allie entrando a casa.
— ¿Todo bien? ¿Pudieron hacer todo?
—Si todo está bien, Nani, aun nos falta hacer muchas cosas, mucho que decorar, una casa no se hace en un día.
—Aun así tienes que ir a verlo, má, está quedando bonito—gritó Allie desde el sofá mientras que se sobaba su pancita.
—Cualquier cosa que necesites puedes consultármelo, sabes que eres como otra hija para mí y no me importaría—dijo pasando su mano por mi mejilla.
—Gracias, Nani, si lo sé—la abrace para despedirme—Gracias por dejar que Allie me acompañase, quizá venga de nuevo mañana.
—A ti, cariño por cuidar de ella, con tal que cumplas con tu promesa todo estará bien.
—Si... uh, bueno me iré, Estefan espera por mi—le di un beso en la mejilla—Nos vemos, buenas noches.
Me fui antes de que dijera otra cosa, cuando entre al auto me sentí aun mas aliviada.
— ¿Todo bien? —le tome de la mano y la bese indicando mi respuesta positiva, él manejó hacia a casa, no antes de detenerse por comida.
Se detuvo en una pizzería, apago el auto y antes de bajarse me miró.
— ¿Me acompañaras? —asentí sonriéndole.
Salimos del auto y entramos al local, antes que nos acercáramos a la caja le tome de la mano para detenerle.
—Te esperare aquí—dije señalando una mesa vacía que estaba a nuestro lado.
— ¿Lo mismo de siempre?
—Sip—antes de retirarse me dio un casto beso.
Me senté analizando todo lo sucedido hoy, tenía que admitir que pensar sobre Nani descubriendo nuestras mentiras me causaba escalofrió en todo el cuerpo, ella nunca se ha enojado conmigo y de solo pensarlo me enfermaba.
En el fondo del local había un grupo de chicos celebrando algo, me puse en posición de descanso, tratando de calmar mis pensamientos.
—Disculpa...—levante la mirada—Se que debes estar, uh, haciendo algo mas importante pero esos chicos de allá—señaló al grupo del fondo—Pero es mi cumpleaños y siempre nos retamos y eso...
Me le quede viendo intentando de no callarle, era alto como Estefan, su cabello era negro como el azabache y los ojos claros, era extraño.
— ¿Qué te pidieron hacer? —pregunte respirando.
—Eres muy linda—dijo haciéndome reír—Y quería saber si me podrías dar tu numero, ya sabes, poder salir o algo...
—Realmente no te gustaría eso—respondió Estefan, casi con el fuego saliéndose de sus ojos, motivos de mi risa anteriormente.
—Lo siento ¿Quién eres? —preguntó el chico sin saber en donde se estaba metiendo, me levante para no ocasionar alboroto, las miradas de los chicos del fondo estaban sobre nosotros, serios y precavidos.
—Soy su novio—el chico abrió sus ojos entendiendo todo.
—No sabía que... bueno—me miró y me dio una sonrisa—Nos vemos—y se fue a donde estaba su grupo.
—No puedo dejarte sola ni un minuto, Hal—dijo malhumorado saliendo del local, yo sinceramente estaba muerta de la risa, me encantaba verlo malhumorado por cosas tan tontas como la que acababa de ocurrir.
—No estaba mal—al decir eso él se dio media vuelta para darme una mirada asesina, me acerque a él y plante mis labios sobre los de él, no accedió, estaba tenso, volví a besarle esta vez lamiendo su labio inferior, sus manos ocupadas por la comida fueron a mi cintura acercándome más a él.
—No vuelvas a decir algo como eso, Halsey—susurró aun malhumorado, volví a besarle.
—Nadie es mejor que tu, amor—pestañee mis ojos rápidamente, haciéndole reír—Te recuerdo que me gustas y que llevo un anillo en mi dedo— él no dijo nada, entramos al auto y fuimos directo a casa.
Hello preciosuras mias.
Espero que se encuentren de maravillas como siempre.
Que todo lo que se esten proponiendo este mes lo esten cumpliendo o si no te estas proponiendo nada, que todo lo que hagas se cumpla y salga excelente.
¡Por que te lo mereces!
¡Gracias por leer nuevamente, por estar y por votar!
¡361 DE BESOS, ABRAZOS, CARIÑO, AMORCITOS, TODO, TODO, TODO!
Nos vemos el próximo fin de semana.
bye, bye.
ESTÁS LEYENDO
VOLVERIA A TI.
RomantikA veces un amor puede estar entre lo imperdible y lo recuperable. A veces no te das cuenta que aunque la tormenta haya pasado, se quedan sus secuelas. Acompáñanos a averiguar lo que quedó de este imperdible amor. Secuela de Imperdible Am...