Capitulo 60

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Estábamos sentados en un local de hamburguesas cerca de la universidad, algunos del equipo estaban comiendo, nos habíamos pedido la comida para llevar y comimos afuera donde el ruido de adentro no nos molestara.

— ¿No te aburriste? —me preguntó Estefan, estábamos sentados en el suelo a un lado de la entrada.

—Nop—admití—Verte no requiere aburrimiento alguno.

— ¿Ni un poquito?

—Me gusta verte en tu uniforme, me motiva—sonreí mordiendo mi hamburguesa.

—No me busques—dijo ampliando su sonrisa.

— ¿Cómo hago para encontrarte?

—Hal...

— ¡Estefan! —los dos volteamos a ver a un chico del equipo—Ven para que brindes con nosotros.

—Bro, estoy con Hal.

—Es rápido, solo un brindis.

—Ve, amor, tu equipo te necesita—dije haciendo que me viese.

— ¿Segura?

—Sí, tonto—sonrió y me dio un beso antes de irse, me quede ahí sentada a terminar de comer, me levante y me senté en el capó del auto a esperarlo, me quede viendo el cielo y por un momento me sentí agradecida por todo lo que tenía en mi vida.

—Miren a quien tenemos aquí.

Suspire para no maldecir su nombre, mire a Raquel.

— ¿Estefan ya se aburrió de ti? —preguntó.

—De verdad, siento lastima por ti, se nota que te gusta perder el tiempo y la dignidad—dije calmada.

— ¿La dignidad?

—Eres una zorra, no te voy a estar con rodeos, te gusta meterte en las relaciones de los demás, mendigando algo que no vas a conseguir.

—Tss...—el tic volvió a su ojo—Recuerda que en su mayoría soy yo quien se la pasa con Estefan...

Me puse de pie y la enfrente, quedando muy cerca de ella.

—En su mayoría...—reí—Se nota tu esfuerzo, te felicito, supongamos que tienes razón, si es así ¿Dónde está Estefan? ¿Vino contigo?

—Vete al demonio—dijo con furia.

—Tú me debes una—le señale—Y no creas que se me ha olvidado.

—Estefan no merece a una... perra como tú, él se merece mucho más, tu solo le has causado problemas.

Esta vez me quede callada, sintiéndome de pronto culpable, recordando nuestras peleas constantes.

—Yo estaba ahí cuando tú no estabas, cuando él te necesitaba, tú no estabas cuando perdía en los juegos, ni cuando se sentía mal porque no podía verte, era conmigo con quien hablaba, la que le daba apoyo y trabajo y la que hablaba con él...

— ¿Qué pasa aquí? —Estefan salió con un grupo de chicos que se callaron cuando nos vieron.

—Nada—dijimos al unisonó.

—Esto no parece nada.

Di varios pasos hacia atrás y me metí en el auto sintiéndome demasiado mal, demasiado furiosa, Estefan le dio una mirada rápida a Raquel y ella le sonrió como si realmente nada hubiese pasado, se subió al auto y arrancó.


Hola mis amores.

Disculpen que no haya subido caps estos días, es que vivo en Venezuela y el internet es un asco, no tenia internet desde el sábado y ahora llegò y se va y asi vamos. 

Espero realmente que estén bien.

LOS ADORIISISIMO 


VOLVERIA A TI.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora