Capitulo 46

556 42 2
                                    



Estefan estaba tardando demasiado y no agarraba mis llamadas, me baje del auto y fui camino a la entrada del supermercado.

— ¡Viene alguien, viene alguien! —vi como un grupo de muchachos corrían dejando a un chico tirado en el suelo, apreté mis dientes, uno de los que se habían quedado se me quedo mirando, era corpulento y llevaba una máscara que tapaba la mitad de su cara.

—Que no sea Estefan, que no sea Estefan—al irse me encamine hacia el chico, estaba quejándose del dolor, estaba boca abajo.

—Hey—susurre, al darse la vuelta para mirarme, caí de rodillas al ver que Estefan estaba todo moreteado—Amor.

—Ve por el auto.

—No te voy a dejar solo aquí...

—Hal, por favor, solo ve por el estúpido auto—dijo gruñendo del dolor. Salí corriendo hacia el auto y maneje tan rápido como el estacionamiento me dejaba, pare el auto justo a su lado y me baje, ayudándole a subirse, tenía su mano presionada en el abdomen, donde brotaba sangre.

—Ahora llévame al hospital—hice lo que dijo sin chistar, estaba demasiado furiosa y demasiado nerviosa para decir algo, me apresure lo mas que pude.

Llegamos al hospital cinco minutos después, salí corriendo pidiendo ayuda a emergencias, dos enfermeros pusieron a Estefan en una silla y se lo llevaron, estacione el auto y fui a recepción y di la información de Estefan, me quede sentada esperando por él.

Nadie decía nada.

Había pasado media hora.

Salí a tomar aire, tratando de mantener la calma, sin hacerme la idea de que aquel chico se me hacia conocido, su contextura no era la primera vez que la veía.

—Familiares de Estefan Donner—dijo una enfermera con una carpeta en la mano, me di la vuelta y fui con ella.

—Sí.

— ¿Familiar de Estefan Donner?

—Que si—dije sabiendo que si decía que no, no iba a poder verle.

—Sígame por favor—dijo dándome la espalda, caminamos por varios pasillos hasta que me señaló una puerta.

—Gracias—dije abriendo la puerta. Estefan estaba acostado en la cama con sus ojitos cerrados, esta escena ya la había vivido muchas veces y volverlo hacer me comenzaba a dar terror.

Me situé a su lado y me incline para besarle.

—Hola—susurró cogiéndome de la mejilla para que no me alejara.

— ¿Estás bien? —pregunte comenzando a llorar.

—Sí, amor—hice una pausa para ordenar mis palabras— ¿Tu estas bien? ¿Qué pasó?

—Estoy bien... solo—levantó la cobija mostrando los puntos que tenía en su abdomen.

—Son unos desgraciados—dije furiosa.

—Me salvaste la vida, Hal—susurró casi audible

—No hice nada—dije del mismo tono.

—Apareciste en el momento indicado, como siempre—tocaron la puerta y yo me aleje, desconcertando a Estefan.

—Buenas noches—habló el doctor dándonos una sonrisa— ¿Cómo te sientes?

—Adolorido y vivo—respondió.

—Por suerte te trajeron a tiempo, la herida que tenías en el abdomen era un poco profunda y si no hubieses llegado a tiempo o morías desangrado o por infección, lo bueno es que no llegaron a tocarte ningún órgano.

—Gracias doctor.

—Ahora cuéntame como sucedió eso.

—Estaba con mí...

—Hermana, soy su hermana—Estefan me miró y captó al instante.

—Sí, con mi hermana, íbamos a comprar helado y vinieron estos tipos y comenzaron a golpearme, hasta que sentí que me apuñalaron.

— ¿No reconociste ningún rostro?

—Todos estaban encapuchados.

—Delincuentes—dijo el doctor furioso—Puedes irte hoy mismo o mañana temprano, ya firme el alta.

—Gracias doctor.

—Ven la próxima semana para ver cómo está el proceso y si va bien puede que pronto te quiten los puntos.

—Gracias de nuevo.

—Tengan mucho más cuidado por ahí.

—Usted igual—dije al irse.

—Acabo de besar a mi hermana—dijo sonriendo.

—Calla, si decía que eras mi novio no me iban a dejar verte.

—Sácame de aquí—dijo frunciendo sus labios.

—Voy, amor—dije acortando la distancia, sin poder resistirme a sus labios.



HEYO MIS AMORCITOS LINDOS.

ESPERO QUE SE ENCUENTREN MUY BIEN EN EL DÍA DE HOY. 

NOS VEMOS EL DOMINGUITO. 

LOS ADORO MUCHISIMO. 

GRACIAS POR TOOOOODO.



VOLVERIA A TI.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora