¿Verdad o reto? (HP)

Quinto día: Noche de retos

Este capítulo tiene mucho Ronsy, bastante Hinny, algo de Dramione y un poquito de Romione. Y, por supuesto, un toque Drarry y Nevstoria. 

Crabbe, Goyle y Malfoy estaban hablando del partido de Quidditch que se estaría celebrando en aquellos momentos. Habían intentado comprobar en cada ventana si se veía el campo, pero había sido inútil. No había ninguna forma de poder ver el partido, así que habían decido predecir cómo iría. Ravenclaw contra Slytherin. Hubiera sido irónico que jugasen los leones contra las serpientes. Pero aquella era la noche de las águilas. 

—Tiene que ganar Slytherin— rugió Goyle por septimogésima vez. 

—Pero Slytherin no nos tiene a nosotros y Ravenclaw sigue teniendo a todos sus integrantes—debatió Crabbe. 

—¡Pero nosotros somos las serpientes!—seguía diciendo en vano Goyle. 

—Aquí estoy con Vincent, lo siento— añadió Malfoy. Ravenclaw era un genial equipo y sin los componentes más importantes, Slytherin no haría gran cosa. 

En ese momento, alguien llamó a la puerta. 

—¿Hermione?—se sorprendió Draco al ver una melena rubia asomando por la rendija de la puerta.

—Hemos pensado en cenar todos juntos, para ver si así nos podemos llevar mejor todos...—murmuró la Gryffindor, incómoda al ver a Malfoy tras la conversación con sus mejores amigos. 

—Está bien—accedió el chico de ojos grises.— ¿Os apuntáis?— añadió dirigiéndose a Crabbe y Goyle. 

Ambos Slytherin asintieron con la cabeza y los cuatro se encaminaron en silencio al salón. Allí habían montado un pequeño picnic con sandwiches y patatas fritas sobre una alfombra (que combinaba leones y serpientes). 

Astoria y Pansy charlaban acerca de algunos profesores mientras bebían agua. Tenían que ponerse al día de lo que no habían hablado durante todos esos años. Y eso incluía quejarse de ciertos profesores, comentar los cotilleos que se oían en el Gran Comedor y contar anécdotas que les habían pasado mientras no estaban hablando. 

Neville, por su parte, trataba de convencer a Ginny de que no pusiese de fondo a Las Brujas de Macbeth. No era que no le gustasen, pero después de la fiesta del día anterior, había acabado bastante saturado de ese grupo. 

Harry y Ron estaban esperando a Hermione para continuar con su conversación sobre la electricidad muggle. Ron no entendía cómo funcionaba, ya que le parecía algún tipo de magia. Harry le había contestado entre risas que no se preocupase, porque la mayoría de muggles tampoco la entendían. 

La chica rubia se sentó junto a Ron. Y Draco se sentó al otro lado de Hermione. La pobre muchacha no sabía qué hacer para que la situación no le resultase tan incómodo teniendo en cuenta cómo estaban sus sentimientos últimamente. 

—¿Estáis al corriente del partido que se juega hoy?—preguntó el rubio mientras cogía un sandwich. Eso sirvió para que todos unificasen el tema de conversación y comenzaron a hablar de los partidos de Quidditch que se habían jugado al principio del año. Justo antes de quedar encerrados en ese lugar. 

—Si no recuerdo mal, Ravenclaw va primero este año...—dijo Neville tras unos minutos de charla. 

—Eso es porque los mejores de Gryffindor están justo aquí—bromeó Pansy. 

Hubo algunas risas sueltas frente a este comentario. No se llevaban especialmente bien todos. Pero al menos estaban intentando olvidar sus inquietudes personales para no hacer su estancia allí más dura de lo que ya era.