Vincent había tenido claro desde el primer momento cuál sería su talento. Iba a contar chistes. Lo había estado hablando con Goyle e incluso con Ginny durante el poco rato que la pelirroja había participado en la conversación. Greggory no tenía tan claro con qué iba a participar, por el contrario.
Greggory estaba convencido de que carecía realmente de algún talento. No era especialmente bueno en ninguna asignatura, como Longbottom con la herbología. No tenía un don de liderazgo como Potter o Malfoy. Ni siquiera tenía algo que lo apasionaba, por mucho que no se le diese bien, como le sucedía a su amigo con los chistes. Cuando había querido decir en voz alta, las palabras no le salieron. No sabía cómo admitir que se consideraba un inútil. Y no sabía cómo admitirlo a Crabbe. ¿Qué pasaría si Vincent abría los ojos y se daba cuenta de que Goyle no merecía su atención ni cariño?
Se había limitado entonces a escuchar cómo Vincent le contaba un par de chistes y había soltado sus mejores carcajadas. Y había procurado no preocuparse por el tema. Seguramente, nadie le diese demasiada importancia a todo eso del concurso. Solo era una de las estúpidas ideas de los Weasley.
Al menos, eso había pensado hasta que el pobretón había dicho que ahora debían entrenar ese talento. Al parecer, los hermanos no tendrían por qué exponerse al ridículo porque ellos lo presentarían y decidirían quién lo había hecho mejor. Una excusa para no fracasar, según Goyle.
También Longbottom y Greengrass se irían de rositas. "Al fin y al cabo, es su taberna", había dicho Ginny.
—¿Qué harás tú, Greg? —le preguntó entonces Vincent, con unos ojos abiertos y atentos a él.
—No sé. Unos malabares o algo así. Tampoco pienso mucho en ello.
Mentía. No podía parar de pensar en ello. Especialmente porque no encontraba nada dentro de él que fuese una mínima muestra de talento.
—Me gusta la idea —lo animó Vincent con una sonrisa—. Pero lo podrías hacer mientras cantas. Tienes una linda voz.
Aquello lo desarmó por completo. ¿Él? ¿Una linda voz?
—Ya sabes, el otro día... Tuvimos que cantar algo. Y se te dio increíble. Los dejaste a todos con la boca-
Un beso apasionado interrumpió su frase. Goyle lo apretaba estrechamente contra él. No quería admitir que aquello le había ayudado más de lo que había imaginado. No quería darle las gracias por un cumplido sobre su voz. Pero realmente había necesitado que alguien le dijese que hacía algo bien, aunque fuese algo tan ajeno a lo que él había imaginado.
—Vincent —susurró contra sus labios.
No sabía si quería darle las gracias o si quería decirle que lo quería. Así que simplemente susurró su nombre. Vincent lo miraba con los ojos relucientes.
—Greg —dijo por toda respuesta.
***
La hora para "entrenar el talento" se había traducido en media hora para pensar qué se les daba bien y otra media para pensar qué harían en la mayoría de casos. Sin embargo, eso no impidió a los hermanos Weasley empezar el espectáculo en el tiempo previsto.
—Señoras y señores, damas y caballeros, brujas y magos... —empezó Ginny, acostumbrada a hacer las presentaciones de los espectáculos de la Madriguera con Fred y George.
—La Madriguera de Longbottom-Greengrass tiene el honor de presentarles... el concurso de talentos de la sala —continuó Ron.
—Hemos reunido a hechiceros de dos casas distintas y de distintas procedencias de Gran Bretaña.
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¿Verdad o reto? (HP)
Fanfic¿Qué pasaría si encerráramos a cinco Slytherins y cinco Gryffindors en una misma habitación? ¿Y si, para colmo, empezasen a jugar a Verdad o Reto? ¿Qué pasa si añadimos cartas y una pared metiche? Harry, Ginny, Neville, Ron, Hermione, Draco, Pansy...