Una linda chica de cabellos azules y piel blanca como la nieve iba caminando tranquilamente en toalla por el cuarto del hotel en donde se estava hospedando.
al abrir los cajones del closet empezo a mirar que clase de ropa podria ponerse para tapar las evitentes marcas que su novio le habia dejado en la gran parte del cuerpo.
Ella tenia mucha ropa muy linda pero esta era de tela muy gruesa y con la calor que hacia no era una buena opción.
Despues de ponerse varios trajes obto por dejarse una pantaloneta negra con una camisa de rosada pastel que dejaba poco a la imaginacion pues era abierta de la espalda y hacia remarcar sus pecho, uso medias blancas con la cara de artemis(sailor moon) que llegavan por ensima de sus rodillas con uno zapatos negros.Despuespues de terminar de alistarse fue a ver como le estaba llendo a su prometido con las sabanas de la cama.
Al llegar pudo ver que solo las dejo dentro de la lavadora y ni si quiera fue capaz de poner a labarlas cosa que le molesto vastante.
Sin mas remedio puso a lavar la ropa y la sabanas sucias y bajo a la resepcion del hotel intentanto encontrar a su prometido pues por alguna razon no se encontraba en el cuarto."Donde se metio ese idiota, hay me duele las piernas"
La chica de los cabello azules ya estaba algo cansada de caminar en busca de su prometido, no es que alla recorrido tanto pero despues de tener sexo toda la noche y por la mañana al caminar dolia un poco.
Al llegar al restaurante pudo visualizar a su novio con 2 chicas muy lindas que evidentemente le estaban coqueteando.
Una de ellas tenia el cabello largo atado a una coleta y el color de este es negro y sus ojos era color verde claro y la 2 chica era de castaña de ojos grises.
"Pero que demonios hace ranma dejandose coquetear por esas dos mujeres es un ¡idiotaa!" Los celos de la chica ya iban a tal grado que desde quilometros se sentia el aura maligno que desprendia de su cuerpo.
Con una cara de querer matar a todo aquel que le hablara se fue hacercando a su prometido.(...)
Despues de poner las sabanas en su lugar fue a ponerse ropa y arreglarse, esta apestando un poco a si que se puso una colonia de hombre y se quito los restos de labial de la cara, la verdad no le importaba que bieran las marcas de su fierecilla pues si le preguntaban solo diria que tiene una reacion alergica o algo asi por el estilo.
Despues de arreglarse bajo a un restaurante que hay dentro del hotel para desañunar con su mujer, todo iba bien hasta que dos chicas se asecaron a él.
-vaya colonia de hombre me encata tu olor
-¿tu quien eres?
-mi nombre es saki y ella es mi mejor amiga ichigo ¿y como te llamas tu príncipe?
Era una joven muy linda pero no era de sus gusto ya que él solo tenia ojos para su akane y los pensamientos que invadían su mente es que probablemente si ella llegara a verlo de seguro lo mataría.
-mi nombre es ranma saotomo y te pido en favor de que no me llames a si saki
-un hombre tan guapo por aquí no debería estar solo si gustas yo puedo acompañarte
-no estoy solo estoy con mi futura esposa
La dos chicas al escuchar la palabra "esposa" solo fruncieron la frente e hicieron una cara de molestia la verdad que por él lado de la chica pelinegra no sabía que decir pero la castaña de nombre ichigo si
-pero mientras no sea tu esposa puedes divertirte un Poco ranma ¿no es así saki?
-ichigo tiene razón ¿acaso te da miedo que ella se enoje o que?
-no tengo tiempo para desperdiciar con ustedes dos niñitas iré a llevarle algo de comer a mi mujer, con permiso
Él joven de la trenza estaba por irese, al mirar a su derecha pudo ver a su prometida akane que se la llevaba el demonio de los celos que tenia.
No sabia muy bien si era por él susto o por no haber comido nada todavía pero le pareció ver a akane con dos cuernos y fuego saliendo de sus zapatos al caminar.
Al llegar la peliazul se puso al pie de su prometido y al frente de las chicas y con cierta molestia en la voz hablo.
-¿perdón interrumpo algo ranma?
-e...e..e.. No como crees amor..... Ya estaba por ir a llevarte algo de comer ... Perdón por tardarme
Él pobre hombre estaba tan asustado que las palabras no le querían salir de la boca con normalidad.
-ranma ¿quienes son ellas?
- aa pues no se las acabó de conocer deja te presento Ichigo, saki ella es mi futura esposa y madre des mis futuros hijos akane saotome
"¿Madre de sus hijos? ¿Futura esposa? ¡¿Akane saotome?¡ no puedo creer ranma es muy tierno"
Estos fueron los pensamientos de la menor de las tendo al escuchar las tiernas palabras de su amado.-yo soy ichigo
-y yo saki
-gusto en conoserlas perdón pero me llevare a mi novio conmigo para comer y charlar un rato.
La joven chica tomo la mano de su hombre y lo llevo afuera del hotel con cierto desagrado al caminar, aunque la allá presentando de esa manera frente de esas dos mujeres no quita él echo de estar celosa.
Akane dirigió a ranma a un jardín de rosas apartado de todos y hay empezó hablar.
-¿quienes son esas dos?
-tranquila akane ya te dije que no lo se
-no mientas entonces ¿por que te estaban hablando de ese modo tan familiar?
-¿estas celosa?
-¡¡¡NO ESTOY CELOSA!!!
"Toma nota, nunca le preguntas eso a una chica que si esta celosa en expecial si se trata de akane, o si no date por muerto"estos fueron los pensamientos que recorrieron la mente del artista marcial como enseñanza de vida.
-te juro que no se quienes son esas chicas solo se hacercaron y ya
-....
-no descofies de mi después de lo que paso anoche akane te amo
Él chico de la trenza tomo de la cintura a su novia y la abrazo cosa que ella reacciono hacer igual.
-esta bien ranma
-vamos a desayunar ¿te parece? Me muero del hambre
- si vamos
Los dos novios se fueron al restaurante claramente no comerían hay si no que pedirían para llevar y degustar la comida ellos solos en su abitacion.
Mientras dos chicas los miraban con desprecio.Continuara....
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Mi historia junto a ti Ranma X Akane (Primera Temporada)
Fanfictionla historia es basada después del final del anime de Ranma 1/2 . Despues de un tiempo Ranma se da cuenta que siente algo por Akane y por obras del destinó se ve hobligado a decirle sus sentimientos para que esta no corte el compromiso. Una historia...