Una niña y sus muñecas

78 7 2
                                    

Nunca me siento sola con todas mis preciosas muñecas alrededor.

Ni siquiera ahora, después de cortar las gargantas de mami y papi mientras dormían, fui capaz de sentir el más mínimo rastro de soledad, notando solamente como mis preciosas muñecas me sonreían con una expresión orgullosa reflejada en sus hermosos ojos de cristal.

Mini-Historias de TerrorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora