Desperté y lo primero que vi fue un par de ojos mirándome fijamente.
Yo les reconocí de inmediato: Eran los hermosos ojos de mi madre, la persona a quien yo más quise en este mundo.
Pero esos ojos ya no estaban en su rostro.
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Mini-Historias de Terror
HorrorPorque no hacen falta muchas palabras para producir el más hondo de los escalofríos... He aquí una colección de breves, brevísimos relatos de terror y misterio...