Capítulo 69: Un destello de la realidad

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Me quedé un instante observando el lugar. Era una pequeña habitación con varios estantes de libros de magia al nivel de los más grandes magos solo por los títulos de algunas de sus portadas y, en el centro de la habitación, lo que llamó más mi atención fue un gran libro gris de bordes metálicos con una fuerte barrera a su alrededor. De hecho, todos los libros tenían extrañas barreras, algo que pude notar desde el primer instante en que llegué.

Traté de alcanzarlo para poder leerlo, pero sin previo aviso alguien apareció junto a mi desde una especie de portal circular situado en el piso junto al muro.

Era un humano que aparentaba unos 50 o 60 años, una barba de chivo y un peinado hacia atrás, gris casi puro. Vestía una larga túnica negruzca con un cinturón rojo granate y una capa alrededor de su cuello con la que cubría parcialmente sus brazos. Su rostro me era familiar y comencé a indagar en mi mente de manera inconsciente, pero sin prestar mucha atención. Estaba inevitablemente concentrado en el libro frente a mi.

- Esto es increíble, no estaba esperando visitas pronto pero que sorpresa que alguien tan joven haya llegado hasta acá... - Divagaba el anciano, mientras lo miraba con extrañeza - Cierto, creo que debo presentarme primero... Mi nombre es Dahlen Setzer y si, como lo piensas, soy el fundador de esta maravillosa institución.
*Fiiiu* - Silvé de impresión al reconocerlo finalmente, confirmando su apariencia de un libro que había leído hacía tiempo - De verdad las sorpresas siguen y siguen... - Continué sin pensar.
- ¿Cómo dices?
- Ah, l-lo siento... Es-es un honor conocerlo. Soy Zeit Krosser, un simple aprendiz.
- Hacía tanto tiempo que no llegaba un estudiante... No recuerdo alguien tan joven graduarse de la academia y menos un dryakan...
- ¿Graduarse? - Pregunté algo intrigado, pero mi atención seguía puesta en el libro.

No había tenido tiempo ni de pensar cuando vi el libro y me acerque. Debido al gran traspaso de energía en mi cuerpo, estaba sintiendo la energía más claramente, pero al mismo tiempo la sensación de todas las barreras a mi alrededor se agolpaban. La energía del anciano y de los libros a mi alrededor tenía gran parte de mi concentración ocupada. Quería leer lo más que pudiera, pero tampoco podía simplemente revelar todos mis trucos, así que estaba ideando alguna forma de lograrlo sin levantar muchas sospechas.

- Por supuesto. La academia es una institución abierta para continuar ayudando a los magos a desarrollar su magia... Por ello establecimos reglas básicas para asegurarnos de que mejoren con constancia y dedicación.
- Yo pensaba que las clases eran lo importante y que no habían realmente "graduados".
- Las clases son importantes, es cierto, y nos ayudan a medir el nivel de los estudiantes, pero la verdadera prueba es este lugar. Como sabes, cada piso requiere más y más- Se detuvo de pronto y miraba en dirección a la plataforma. Miré cuando lo noté.
- ¡Kaer! ¡Llegaste! Mira mira, el es Dahlen, el fundador de la academia... - Kaer guardaba la gran caja en uno de sus anillos.
- ¿¡En serio!? Pero el... Ah, ¡Lo siento! Es un honor conocerlo, Gran Fundador. Mi nombre es Kaer Belliel, lo saludo con humildad - Mientras se inclinaba mostrando respeto. El anciano finalmente se veía más conforme, a diferencia de cuando me presenté.
- Bienvenida, jovencita... Veo que otro dryakan... Que pareja más peculiar. Si ya pensaba que ver a uno era impresionante, no esperaba a 2 jóvenes tan talentosos.
- Agradezco sus palabras. Es increíble saber que el fundador está vivo incluso ahora.
- Es cierto, ha sido un largo camino, pero es el camino de cualquier mago en realidad... Se que tienen muchas preguntas, pero creo que es mejor que continuemos.
- Ah, pero aún- Iba a hablar Kaer, probablemente para decirle que aún quedaban los demás, pero la detuve.
- Déjalo... - Y una pequeña sonrisa picara salió naturalmente de mi. Kaer me miró extrañada, pero me siguió el juego algo preocupada.
- Bien, como le decía al joven Zeit, el hecho de que ambos hayan llegado hasta aquí, significa que están a un nivel en el- Otra vez, se detuvo de pronto mirando hacia la plataforma.
- ¡Lo logré lo logré! ¡Ah, Zeit, Kaer! ¿¡Eeeh!? ¿Quien es ese viejo? - No podía ser otra más que Fear.
- ¡F-Fear! - Se exaltó Kaer - E-el es el fundador de la academia, el Gran Mago Dahlen... - Presurosa a informarselo.
- ¿¡QUIÉN!? ¿Pero ese tipo no estaba muerto? - Preguntó sin cuidado ignorando al anciano frente a ella.
- Ejem... - Aclarando levemente su garganta para llamar la atención - Como puedes ver, estoy aquí... - Mientras su expresión ya mostraba signos de quedarse sin paciencia.
- ¡Eh! L-lo siento... señor don fundador... Emm ah si... ¡Soy Fear, Fear Rein! ¡La más fuerte! - Se presentó finalmente.
- Haaa~ - Suspiró visiblemente cansado el anciano Dahlen - Por favor, ven para escuchar junto a tus amigos.
- ¿Escuchar qué?
- ¡EJEM! Preguntas para después - Aclaró para evitar más interrupciones - Como estaba diciendo... - Tomó una pausa para mirar hacia la plataforma y continuó - La prueba de la biblioteca está hecha para saber cuánto es lo que han avanzado en el uso de la magia. Su nive-- ¡No! N-no... no otra vez... - [Si, si otra vez.]
- Hmpff- Fear y yo apenas estábamos resistiendo la risa de la expresión que puso cuando vió a Zekir. Le informé de mis planes mientras el anciano estaba ocupado tratando de calmarse.
- Adivina quien es... - Le dije a Zekir que guardaba su batería.
- ¡Ah! ¡Es el Gran Mago Dahlen Setzer! Es... es un placer conocerlo. No sabía que estaba vivo... Ah ¡Lo siento si fui descortés! - Zekir era especialmente serio, pero eso hizo que Dahlen se pusiera de buen animo nuevamente. - Mi nombre es Zekir Belliel, lo saludo con humildad.
- Está bien, joven. Por favor acércate... Estaba diciéndole a tus amigos algo importante, sería bueno que todos lo escucharan... Espera, ¿ustedes son todos los dryakan que veré hoy cierto? jaja - Preguntó en forma de broma, pero estoy seguro que era para verificar por la fija mirada afilada que me dio después.
- Si, solo nosotros 4... No más dryakans... - Zekir iba a abrir la boca, pero hablé antes mientras levantaba las manos para parecer inocente. Era "técnicamente" correcto, el mejor tipo de correcto.
- Haa~ Bien. Ya que finalmente podemos hacer esto, quiero felicitarlos a todos por llegar a este punto. - Su expresión se veía más tranquila, y aunque no sabía si los gemelos lo lograrían, estaba esperando más que nunca que hubiesen mejorado lo suficiente. - El talento que han mostr-
- ¡SIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII! ¡LO HICEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE! - Un furioso y liberador grito retumbó en la pequeña habitación. Nadie lo esperaba.

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