Una semana después, la noticia que mi hermano murió en un accidente de auto de camino a Lyon, se extendió por toda la ciudad. Lo mencionaron como un testigo de un caso importante que iba a rendir su declaración a las oficinas principales de INTERPOL, cuando ocurrió un choque que sacó al auto de la carretera. Como consecuencia, Scott Wallace murió. Para el mundo.
Cuando lo vi en las noticias, Maddie estaba a mi lado. Me desgarró el alma no poder aliviar el dolor que ella sintió con la noticia. Ethan estuvo con nosotras en todo momento, estaba convencido que mi falta de lágrimas era porque seguía en shock con la noticia. Él no sabía que ya me había dolido demasiado, y que seguía doliéndome, pero sentía alivio al saber que el plan funcionó y que Scott estaría a salvo, siendo alguien más.
Ese fin de semana enterramos un ataúd vacío en el cementerio. Tenía pesos en el interior, para asimilar que mi hermano estaba dentro. Pero solo había una fotografía de mi familia que yo había puesto antes de sellarlo. Nadie lo sabía, y fue mejor así.
Llegó un momento donde creo que Ethan empezó a tener razón y yo sí estaba en shock, o solo realmente triste al ver a mi familia diciendo adiós a Scott. Madre lloró por su hijo, y Chleo e Irina por su hermano. Padre se mantuvo inflexible, pero se notaba su pérdida, ojos rojos y bolsas oscuras debajo de ellos. Al menos el hombre tenía un gramo de corazón...
—¿No te parece extraño? —me preguntó mi amiga.
Apenas la ceremonia terminó, regresé a casa con Madison. Ella me perseguía de camino a mi habitación.
—Extraño ¿qué?
Entré a mi recamara directo a mi armario para buscar una maleta. El viaje a Italia no podía esperar. Sé que Madison no entendía que ya viví mi propio luto después de despedirme de Scott hace dos semanas. Las lágrimas que derramé en el funeral, fueron por ella y su dolor, y por el de Chleo. Porque ninguna debía saber la verdad.
—Bueno, sales con un hombre que no quiso acompañarte al entierro de tu hermano, Nina.
Dejé la maleta vacía sobre la cama y me giré hacia la puerta, donde Madison se apoyaba bajo el marco. Brazos cruzados y rostro impertérrito. Ella todavía no conocía a Greg. Hablaba muy en serio cuando dije que me tomaría mi tiempo para traerlo a casa.
—Yo le pedí a Greg que no fuera, Maddie.
Ella abrió sus ojos con espanto, antes de lanzarme esa mirada ofendida.
—Si es por lo que yo podría hacerle, en primera: era el funeral de tu hermano, Nina. Me habría comportado.
Sonreí en un aliento antes de sacudir mi cabeza.
—No, cariño. No fue por ti. Fue más por mi familia, por mis padres. Este día era de Scott, no quería que ellos se alterasen por a ver a Greg conmigo. Los conozco, Maddie... a ellos no les habría importado desviar su atención del funeral hacia Greg.
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NO JUEGUES CON EL PERVERSO ABOGADO
ChickLit[T E R M I N A D A] #2 Nina desea una sola cosa: tener control de su destino. Sus padres han gobernado cada instante de su vida, desde cómo vestir hasta con quién acostarse. En cuanto ve su oportunidad de ser libre, ella no lo piensa dos veces para...