❥ SINGLE MOM | G!P Chuuves/Loona

Cap OO1 "¿Como que mi hija?"

La noche se hacía presente en toda la ciudad, Sooyoung se encontraba bebiendo una botella de whisky, ya que había tenido una tarde entretenida con algunas chicas de su trabajo. Si solamente había tenido sexo con dos chicas que supuestamente se hacían pasar por sus managers cuando realmente no lo eran.

-Uff como adoro está vida, creo que nadie puede arruinarla.- Reía mientras hablaba sola.- Que tontería, ya estoy tan ebria que hablo sola.- Nuevamente repitió su risa

Su celular vibró y eran mensajes de sus dos amigas Kahei y Jungeun que la molestaban para salir de fiesta o algo así.

-Uff ¿tanto me necesitan?- Veía como su celular marcaba que ya tenía como 35 mensajes nuevos no leídos.

Mientras veía su celular se detuvo en una foto en particular, era una chica de linda sonrisa, cabello color caramelo y muy hermosas. Si Kim Jiwoo una chica menor que ella quien era su vecina que por alguna extraña razón siempre le pedía ayuda para abrir la puerta de su departamento.

-Ella es tan linda...- Suspiro Sooyoung.- Tal vez nunca debí decir cosas como "nadie se resiste a mi" o "soy especial en la cama" soy tan estúpida.- Bebió otro trago.- Es algo que deseo olvidar... Hablando de eso.- Miro la hora.- Oh bueno... 1...2...3.- En sus labios se formo una sonrisa para acto seguido escucharse el timbre.

La pelinegra acomodó sus shorts color negros, tenía unas pantuflas de color blanco y una camisa del mismo color que tenía que abrocharse para no ser tan vulgar con respecto a su vestimenta, camino hacia la puerta y lentamente la abrió dejando a la vista a aquella chica de la foto.

-Oh miren la señorita Kim Jiwoo.- Se apoyó en la puerta.- ¿Lo mismo de siempre?

-¿Por que siempre debes actuar como una idiota?- Pregunto.- Y si es lo mismo.

-Hey ¿que te paso? Estás más agresiva de lo normal señorita sonrisas.- Hablo la pelinegra caminando hasta la puerta de entrada del departamento de aquella chica de cabello color caramelo.

-Solo que hubo mucha gente vulgar en la clínica, ahora si no quieres que te parta la cara será mejor que no me provoques.- Hablo tratando de tranquilizarse un poco.

-Esta bien señorita.- Metió la llave en la cerradura para luego empujarla fuertemente y abrirla.- Por favor nunca pidas que te pongan otra puerta.- Hablo con una sonrisa la pelinegra

-¿Por que?- Pregunto Jiwoo.

-Por que esta es la única excusa que puedo usar para verte.- Le guiño el ojo.

-Aver querida Ha Sooyoung ¿a cuantas más le dices eso?- Pregunto con ironía.

-Por favor... ¿cuando me vas a dar otra oportunidad para demostrarte que ya no soy una idiota?- Se apoyó en la puerta.

-Cuando me demuestres que eres madura, y ¿dejaste de ser idiota? La verdad no he visto cambios deberás mejorar, por cierto gracias por ayudarme nuevamente con mi puerta, ya te puedes ir buenas noches.- Sonrió y cerró la puerta en la cara de la otra chica.

La pelinegra solo dió un suspiro mientras rascaba su nuca, procedió a caminar hasta entrar a su departamento. Sinceramente Kim Jiwoo era la única mujer que no se dejaba caer por sus encantos cada que le decía algo "lindo" "coqueto" o aveces "excitante" siempre lo ignoraba o le respondía con ironía, y lo que más le parecía raro era que no se sonrojaba cuando la mayoría de chicas con la que Sooyoung estuvo cuando está les decía algo así caían rendidas a ella pero Jiwoo sinceramente no era ese tipo de chica. Si realmente quería algo con ella debía esforzarse y muy duro... Muy.

Cuando la pelinegra llegó a su departamento procedió a tirarse en el sofá para al rato quedarse completamente dormida mientras por un costado de le caía la baba.

Al siguiente día...

Los golpes de la puerta eran fuertes y frecuentes lo que hizo que Sooyoung de despertara y procediera a levantarse.

-¿Quien diablos molesta a esa hora?- Se preguntaba en su mente mientras miraba el reloj que indicaban las 8:00am, ni sus padres le molestaban a esa hora así que sin más solo se levantó y camino hacia la puerta para luego abrirla.

Algo confundida miro a la persona que estaba ahí, era una señora que no parecía pasar de los 40 años que en sus manos tenía unos papeles y había una niña de cabello negro al parecer no menos de tres años que tenía una maleta y tenía puesta una mochila de un lobo de peluche.

-¿Señorita Ha Sooyoung?- Pregunto la señora mirando el libreto que tenía en sus manos.

-Emm si, soy yo ¿que se le ofrece?- Algo confundida miraba a la persona que tenía en frente.

-Bien, vengo de recursos humanos.- Le entrego el libreto junto a un bolígrafo.- Por favor debe firmar esto.

Sooyoung sin leer firmó aquello ya que era algo al parecer no importante.

-.Bien... Estoy aquí gracias a la difunta señorita Son Naeun, la cual antes de morir en su parto te paso la custodia de la pequeña Son Hyejoo.- Dejo ver mejor a la pequeña quien ocultaba su rostro entre sus cabello y parecía estar muy tímida.- Así que con permiso.- Le quitó el bolígrafo junto al libreto.- Disfruta la vida de madre.

Dicho eso a Sooyoung perpleja con la sangre totalmente helada tratando de procesar la situación que sucedía en ese momento.

-¿T-tu eres mi mamá...?- Hablo la pequeña muy tímida.

-No esto no puede estar sucediendome.- Hablo en sus pensamientos Sooyoung.

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