De 8mm (1999)
No te había quedado otra opción que ir a trabajar a la tienda pornográfica de tu tío.
No es que él fuera un pervertido. Para nada. Te había ofrecido el trabajo de ordenar lo que los degenerados desordenaban: libros, peliculas, juguetes sexuales.
Sólo eso. Nada más. Te había dicho que no había peligro, que los tipos solo iban a comprar. Y le creíste.
Durante unos días ningún empleado ni cliente se sobrepasó contigo.
Hasta que un día, mientras ordenabas unas peliculas en una pequeña sala, un tipo se te acercó, excitado por la película que pasaban en el pequeño televisor de nuestra, y te tomó por detrás.
- Oye, amigo. Ella no es prostituta ni juguete sexual. Si quieres, hay varias en la acera de enfrente, y juguetes en el pasillo 3. Déjala.
Era Max. Le habías echado el ojo varias veces desde que llegaste, pues era muy atractivo.
Y él te había sonreído, y guiñado el ojo en tono coqueto. Pero nunca habían hablado.
- ¿Que dices, hermano? - contestó el tipo, soltando tu cintura.
- Ya me oíste. Déjala y lárgate.El tipo te soltó y se fue, mirando a Max algo asustado. Tal vez pensó que llevaba un arma o algo.
- ¿Estás bien?
- Si. No llegó a hacer nada.
- Malditos pervertidos. - sacó la cajetilla de cigarros y el encendedor de su bolsillo. - ¿Me acompañas a fumar un cigarrillo?
- Claro.Salieron al patio del local. Max encendió un cigarrillo, y te ofreció uno, el cual aceptaste. Gentilmente lo encendió.
- Gracias, Max.
- No fue nada. A veces hay que ser galantes y salvar la vida de hermosas señoritas...
- Hablaba del cigarrillo. - lo interrumpiste.
- Oh.Te reíste.
- Igual, gracias por salvarme de ese tipo.
- No fue nada. - repitió, sonriendo.
- Quién sabe que me hubiera hecho si no llegabas.Fumaste una pitada.
- Oye Max. Si quieres podemos reunirnos aquí... Ya sabes, en los descansos.
- Claro. No hay problema. No es mucho tiempo.
- No. Pero me basta para conocer a mi héroe. Y de paso, compartir los cigarrillos.
- Hay muchas cosas que me gustaría compartir contigo...Sus ojos resplandecían. Su boca en un gesto muy seductor.
- Oh, Max... - dijiste, peinándote nerviosa.
Durante los siguientes días salían a fumar juntos. Y luego del trabajo, durante las tardes, iban a tomar algo a algún bar cercano.
Durante esos días, también, procuraste quedarte a su lado en el trabajo.
Max solía retar a los pervertidos que comenzaban a masturbarse en el local. Pero si alguno de ellos intentaba ponerte las manos encima, Max salía en tu defensa.
- ¿Estás bien? - preguntaba siempre en el bar.
- Si. Es algo temporal. - respondías. - Ya conseguiré un trabajo mejor.Asentias, tomando el trago, pensando que ya habías dicho lo mismo una y otra vez.
- Yo estoy en la misma situación, T/N. Trabajo en el local de tu tío sólo porque nadie viene a buscarme para grabar un disco. Pero veo que no tendré mucho éxito por ahora.
Pobre Max, pensabas. Al igual que tú, le importaba ganar unos cuatrocientos dólares por semana, a cambio de sobrevivir en esa selva llena de animales que era el sex shop.
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Joaquin Phoenix - Imaginas & One Shots
Fanfiction+18. PEDIDOS ABIERTOS a mensaje privado o en los comentarios!! Algunos son de mi autoría, otros son traducidos de Tumblr. Mucho fluff, smut, headcannons(HC's) y algunas historias de varios capítulos con distintas temáticas y géneros. Espero que los...