Raguel se sonroja otra vez con eso y carraspea echando a andar hacia Gabriel que frunce un poco el ceño con ese comentario de Aziraphale, sin entenderlo.
Raguel mira a Gabriel con tal intensidad que podría partirle en dos. Gabriel parpadea.
—¿Todo... bien?
—Tráeme a cuatro querubines, por favor —Le toma del brazo tirando un poco de él.
—¿Ahora? Vamos a cantar...
—Necesito que no le quiten los ojos de encima a Aziraphale.
—¿Por?
—Por favor.
—Está bien.
—Gracias —le toma del brazo un segundo y se lo aprieta un poco.
—Suerte en tu canción —le sonríe un poco maligno porque creo que Raguel ya pasó por eso de que la voz le... traicionó un año y desde entonces se burlan de él con eso—. Y recuerda mantener el tono.
—Ya sabes que hace tiempo mi voz no es la misma —se defiende como cada año, aunque esta vez... le mira de reojo—. Suerte con la tuya también.
—¿Por? —sonríe.
—A veces la vida nos trae sorpresas... graves sorpresas. Ven acá —le da un abrazo rápido y un besito antes de dejarle ir.
Gabriel parpadea y le devuelve el beso y el abrazo.
—Espero que a ti no se te escape ni una nota —le sonríe también un poquillo maligno.
—¿Porqué se me iba a escapar nada?
—Uno nunca sabe... anda, ve.
Se humedece un poco los labios mirándole y ahí va al escenario principal porque el "Ave María" es siempre el primero.
Se enciende el foco sobre su cabeza. Bajan un poquito las luces en el resto.
Mira un poco hacia arriba y luego sonríe hacia los demás. Todos le aplauden, todos muy organizadamente, sin gritos ni silbidos.
Así que ahí empieza de fondo la música del Ave María.
Ahí empiezan los músicos en vivo. Tal vez Raguel decidió tocar un instrumento después de su incidente.
Eso debía haberlo hecho, tratando de evitar la burla pública, quizás esté ahí, junto a él, tocando el violonchelo.
Aunque entonces no creo que le hubiera dicho eso antes...
Yo creo que igualmente debe cantar, pero solo su canción. Su solo. Y todo lo de coro, en vez de coro, toca instrumento.
Igualmente ahí están algunos ángeles de fondo haciendo un poquito de coro... la Virgen mira a Gabriel con ojitos de amor desde el cielo. Desde el... techo del cielo.
Belcebú ha ido por su cuerpo, dejado a Miguel KO en su oficina y espera pacientemente a que Gabriel empiece... ya vestida y disfrazada, escondida al fondo de todo.
Gabriel, que siempre estira la primera nota de un modo un poco... para fanfarronear, diría alguno, aunque él siempre niega categóricamente. En esta ocasión. Ojos cerrados, la corta estrepitosamente pronto al notar que la voz no le obedece.
Raguel se gira a mirarle... con cierta sonrisa maliciosa.
Gabriel carraspea un poco pidiendo un segundo, sin entender muy bien. Siempre les dicen que hagan ejercicios antes del canto pero con todo lo de Miguel, hoy no los ha hecho, debe tener la voz desentrenada. Bebe un poco de agua para aclarar la garganta sin ver a Raguel.
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Sin City
Humor-Lo sé, ¡¡Por el amor de Dios!! Pero no podemos hacer tonterías -protesta Aziraphale, preocupado. -Tampoco nos extralimitemos -responde Crowley levantando las manos hacia él-. No estamos como para exigirnos más de lo que somos capaces.