Para el señor Reborn, Álvarez era un nuevo y novato asistente, uno al que debía acostumbrarse. Para Raúl Álvarez, el señor Reborn era su nuevo jefe, uno con un difícil temperamento y una actitud cambiante. Un nuevo trabajo siempre conlleva cambios, desafíos y nuevas experiencias, aunque tal vez, este venía acompañado de mucho más que eso. Si una relación laboral va más allá de los limites permitidos, podían encontrarse experiencias muy interesantes, inexploradas, y muchas veces nuestra más grande pasión, se encuentra en los lugares menos esperados, aunque romper las reglas, podía venir con un precio muy alto.