No me sueltes [JIKOOK]

CAPÍTULO 1: Despedida

Jimin y Jungkook habían sido amigos desde que tenían uso de razón. A pesar de su corta edad, habían compartido muchas aventuras y experiencias juntos.

Se conocieron en el colegio, cuando Jungkook llegó a Busán debido al trabajo de su padre. Tan solo era un crío de 6 años, asustado y perdido.

Su primer día de clase amenazaba con ser tortura. Se sentía solo y pequeño ante ese edificio tan grande, repleto de gente que no conocía, hasta que su mirada se cruzó con la de un chico que lo observaba sonriente.

Un pequeño Jimin de 7 años se acercó a él 'no tengas miedo' le dijo. Le cogió la mano y lo acompañó a su clase.

Y desde ese momento nunca más se la soltó.

Pero la vida es cruel a veces y nos obliga a hacer cosas que no queremos, y a ellos, 5 años después, los obligó a soltarse.

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Noviembre de 2007, Busan.

- Toma Chim, - dijo Jungkook a su amigo extendiéndole la mano - quiero que lo guardes hasta que nos volvamos a ver.

Jimin abrió su mano recogiendo lo que su amigo le entregaba.- Oh no Kookie, este es tu anillo favorito, ¡no puedes dármelo! - exclamó Jimin sorprendido.

- No te lo doy, te lo presto para que veas que voy a volver, ¿Lo guardarás hasta que venga a por él? - le pidió Jungkook con sus grandes y característicos 'ojitos de bambi'

- Claro que sí Kookie, lo cuidaré con mi alma. - se acercó a su amigo y le dio un besito en la mejilla.

- Cuídate mucho Chim, por favor, volveré pronto. - le pidió el pelinegro abrazándolo - Oye, ¿qué hora es? - preguntó sobresaltado, soltándose del abrazo.

- Son casi las 5 Kookie, ¿A qué hora te vas?

- ¡Jopé!- exclamó su amigo- debo irme corriendo Chim, papá me espera.

El mayor sonrió cuando esa palabra salió de la boca de Jungkook, siempre lo hacía, porque cada vez que la escuchaba no podía evitar recordar aquel día en que su padre lo oyó diciendo 'joder' y directamente le metió la escobilla del váter en la cara. Así que el pelinegro se vio obligado a sustituir su palabra favorita por otra más... sutil.