No me sueltes [JIKOOK]

CAPÍTULO 66: En las buenas y en las malas

Jungkook lo miraba con una mezcla de sorpresa y desconfianza ¿acaso se había golpeado también la cabeza? ¿estaba bromeando?

- Supongo que eso es un no. - dijo el rubio decepcionado al no obtener respuesta.

- ¿¡Qué!? No, no... O sea ¡Si! - Jimin lo miraba desconcertado.

- ¿Si o no? - preguntó arqueando una ceja.

- ¡Si! Claro que sería tu novio. - respondió molesto. - ¿Qué pregunta es esa? ¿Te estás burlando de mi? - el mayor soltó una carcajada y negó con la cabeza.

- Te lo he preguntado en serio. - Jungkook abrió los ojos de la sorpresa.

- ¿Te has golpeado la cabeza? ¿Estoy soñando? - Jimin hizo una mueca de disgusto y lo golpeó en el pecho con la mano.

- Ya nada, ya no quiero. - respondió haciéndose el ofendido. El pelinegro se lanzó sobre él con cuidado de no lastimarlo.

- Ya no hay vuelta atrás. - le dijo agarrándolo por las mejillas para plantarle un beso en los labios.

Segundos después la puerta se abrió de golpe y se volvió a cerrar a la vez que se escuchaba un 'uy perdón'. Los chicos se echaron a reír.

- Pasa Tae. - gritó Jimin para que su amigo lo oyera. El castaño abrió la puerta lentamente y asomó la cabeza.

- ¿Queréis que me una? - preguntó sonriendo con picardía. El mayor soltó una carcajada y le lanzó un cojín. Jungkook lo miró levantando las cejas.

- ¿No tienes suficiente con Yoongi? - el castaño le sacó el dedo a modo de respuesta.

- El desayuno está listo. - respondió girándose para salir de la habitación. - Cuida a tu hombre Jungkookie, estoy que te lo robo. - dijo cerrando la puerta entre risa.

La diversion matutina que los dos chicos le proporcionaron se acabó cuando salió de la cama y sintió un intenso dolor al apoyar el pie. Jungkook lo agarró por la cintura y lo ayudó a caminar y bajar las escaleras.

Le esperaba un largo y doloroso día, no solo por su esguince y la incomodidad de necesitar ayuda para casi todo. Si no porque tendría que llamar a su profesor de baile y explicarle lo que había pasado. Estaban a menos de dos días de la actuación y se habían quedado sin el solo principal.

Taehyung tuvo que irse un rato después cuando Jin lo llamó alterado preguntando que donde diablos estaba y porque se había ido sin decir nada.

- Supongo que debería llamar ya a mi profesor. - dijo Jimin mirando el reloj. Jungkook le acercó el teléfono en silencio.

Ver a su rubio tratando de aguantar las lágrimas mientras hablaba con su profesor y le contaba lo sucedido, le partía el alma. No podía evitar sentirse culpable.

- ¿Qué te ha dicho? - le preguntó cuando acabó la llamada. Jimin suspiró.

- Que no me preocupe, que son cosas que pasan y que lo haré en otro momento. - respondió con tristeza. - También dijo que era una pena porque había oído que irían muy buenos ojeadores.

Sin saber cómo, el pelinegro comenzó a llorar, Jimin lo miró preocupado y se acurrucó con él en el sofá.

- Está bien Kook. - lo consoló. - Tendré otra oportunidad.

El menor se secó las lágrimas y acarició su mejilla con ternura.

- ¿Cómo puedes ser tan bueno? - preguntó completamente maravillado. - Debería ser yo quien te consuele, yo te he fastidiado todo. Te fastidié tu relación y ahora te fastidio el baile, y encima de todo me pides que salga contigo y me consuelas. 

- ¿Qué estás diciendo Jungkook? Tú no has fastidiado nada. - respondió molesto. - Me haces sentirme más vivo que nunca.

- Te amo Chim, no te imaginas cuánto. - lo miraba completamente fascinado, como si tuviera a un ángel frente a él, un ser de luz. Jimin sonrió feliz.

- Y yo te amo a ti.

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Estaban solos en casa, tumbados en el sofá viendo una película cuando escucharon voces fuera y a alguien golpeando la puerta con fuerza. Jungkook se levantó extrañado a ver quién era, pero la persona al otro lado tapaba la mirilla. Abrió la puerta con recelo y asomó un poco la cabeza.

- ¿Quién es? - preguntó Jimin desde el sofá. Y de repente comenzó a ver a los chicos uno a uno entrar en el salón.

- ¡Hola! - lo saludó Namjoon con una sonrisa. - Hemos venido a hacerte compañía. - Jin entró tras él y se acercó rápidamente a abrazarlo. Detrás de él, Yoongi, Hoseok y Taehyung.

- Lo siento, eran cinco contra uno. - dijo Jungkook apoyado en la puerta. Jimin sonrió.

- Está bien, me alegra teneros aquí. - respondió. - Aunque preferiría que fuera por un motivo más feliz.

- Bueno en cierto modo también tenemos algo que celebrar, ¿no? - preguntó Namjoon con una ceja levantada. Los chicos lo miraron confundidos. Jungkook agachó la cabeza avergonzado.

- ¿Ya se lo has dicho? - le preguntó Jimin. El menor asintió con la cabeza.

- ¿Decirle el qué? - Taehyung estaba muerto de curiosidad.

- Que Jungkook y yo somos pareja. - dijo el rubio con timidez. Jin y Hoseok comenzaron a aplaudir y vitorear mientras Taehyung protestaba por no haberse enterado el primero. Namjoon los miraba orgulloso.

- Ah, ¿no lo erais ya? - preguntó Yoongi provocando el silencio de todos los chicos.

- Cállate y aplaude, mi amor. - le ordenó Taehyung con una sonrisa. El mayor se encogió de hombros y comenzó a aplaudir con los demás. Los chicos se echaron a reír al verlo.

- Jamás pensé que sería tan divertido ver a Yoongi enamorado de mi hermano. - soltó Jin entre carcajadas.

Los chicos se acomodaron como pudieron en el salón de los Park. Jimin les contó a todos lo sucedido la noche anterior, evitando dar muchas explicaciones de porque corrían.

Hoseok y Taehyung hablaron con él sobre el ensayo general, le dijeron que todo había ido bien aunque el espectáculo quedaba un poco vacío sin su solo. También que el profesor les permitió salir para ir a visitarlo en cuanto terminaron de practicar su coreografía.

- Entiendo que no quieras ir mañana a vernos... - dijo Hoseok con tristeza.

- ¿Qué? No, no, por supuesto que iré. - respondió Jimin sin dudar. - Iremos todos tal y como dijimos, solo que yo estaré en el público animando.

Taehyung sonrió con tristeza y deseó con todas sus fuerzas que sucediera un milagro y su amigo pudiera bailar.