CAPÍTULO 55: Versatilidad

1K 90 16
                                    

- ¿Hablas en serio? - Jimin no podía creer lo que el menor le decía. Jungkook soltó una carcajada.

- ¿Por qué te sorprende tanto? Si no quieres hacerlo no pasa nada. - el rubio negó rápidamente.

- No es eso, es que Taemin... bueno... - Jungkook arqueó una ceja. - ¡Perdón! - se disculpó al ver la cara del menor.

- Me importa una mierda Taemin o los tíos con los que hayas estado. - le dijo con  molestia. - No es mi culpa que no supieran disfrutar de ti. - Jimin sonrió avergonzado. - ¿Me vas a follar o qué?

- Te va a doler, lo sabes ¿verdad? - el menor se encogió de hombros.

- Confío en ti. - respondió con tranquilidad.

Jimin se levantó de la cama y caminó hasta su armario donde guardaba un bote de lubricante y una caja de preservativos.

- ¿Quieres que lo use? - preguntó levantando la caja. El menor negó con la cabeza.

- Ya lo hemos hecho antes, está todo bien.  Déjame sentirte al cien por cien. - le pidió.

Lanzó los preservativos dentro del armario y volvió a la cama donde Jungkook lo esperaba tumbado completamente desnudo. Se subió encima de él y acarició su piel.

- Me encanta tenerte desnudo en mi cama. - le dijo acercándose a su oído. El menor se retorció bajo su cuerpo, agarró su nuca y comenzó a besarlo.

Jimin bajó una mano por su muslo, y comenzó a acariciar su trasero con delicadeza, sabía lo mucho que dolía la primera vez y quería intentar hacérselo lo más agradable posible.

Rozaba su entrada con los dedos sin dejar de besarlo, sentía los escalofríos de Jungkook en su piel. Abrió el bote de lubricante con la otra mano y se mojó los dedos.

- Si te duele demasiado, dilo. Si no te gusta, dilo. Si te sientes incómodo, dilo. - le ordenó antes de empezar. El pelinegro asintió con seguridad.

- Hazlo ya Jimin, me muero de ganas. - le dijo mordiéndose el labio.

Jimin acarició su entrada e introdujo con suavidad el primer dedo. Se quedó quieto dejando a Jungkook acostumbrarse, cuando este le sonrió, comenzó a moverlo. Primero en círculos para dilatarlo un poco y después hacia dentro y hacia fuera, simulando sutiles embestidas.

Unos minutos después, introdujo el segundo. El pelinegro hizo una mueca de dolor, pero se acostumbró con rapidez. Jimin lo dilataba haciendo tijeras con los dos dedos en su interior. Incluso el mismo se sorprendía por el autocontrol que estaba teniendo. La entrada de Jungkook apretaba sus dedos de una manera sublime y su erección palpitaba desesperada, hacía mucho que no era él quien hacia de activo y eso lo excitaba mucho.

- ¿Vas bien? - le preguntó sin dejar de mover los dedos en su interior. Jungkook asintió con los ojos cerrados.

- Me gusta. - le dijo entre gemidos. - Quiero más.

Jimin sonrió al ver como el pene del menor volvía a despertarse. Introdujo el tercer dedo dentro de él y comenzó a penetrarlo mientras con la otra mano acariciaba su miembro erecto.

Jungkook gemía cada vez más desesperado, el menor tocaba su punto dulce y lo volvía loco. Poco a poco se olvidaba del dolor.

- Hazlo ya, por favor. - le suplicó. Jimin aún tenía miedo de lastimarlo.

- ¿Estás completamente seguro? - volvió a preguntarle. Jungkook lo miró molesto.

- Ya. - le repitió con seriedad.

Sacó los dedos de su interior, se lubricó a sí mismo y se alineó en la entrada del pelinegro, que lo observaba sin parpadear.

- ¿Quieres ver? - le preguntó con una sonrisa pícara. El menor asintió en silencio. Lo agarró por la nuca y lo acercó a él, dejándolo sentado en la cama. - Abre bien las piernas, así es mejor. - le pidió y el menor obedeció al instante.

Jimin sentía que podía correrse solo de verlo en esa postura, pero quería aguantar lo máximo posible para darle una buena experiencia.

Introdujo su miembro con lentitud, mientas acariciaba la cara del menor, tratando de aliviar un poco el dolor que estaba sintiendo. Jungkook observaba la escena entre fascinado y dolorido. El rubio se quedó quieto cuando introdujo toda su extensión al completo, esperando a que se acostumbrara a su tamaño.

Le costaba no moverse, pues las paredes de Jungkook lo rodeaban de una forma sublime, al no haber mantenido nunca ese tipo de relaciones, estaba muy apretado.

- Muévete. - le pidió Jungkook en voz baja cuando estuvo listo.

Jimin le hizo caso y comenzó a moverse con suavidad, agarrando con una mano su nuca para ayudarlo a observar la escena.

- ¿Te gusta lo que ves? - le preguntó con desvergüenza. Jungkook tragó saliva y asintió, nunca había sentido un placer así en su vida.

- Quiero más duro. - pidió sin dejar de observar como el pene de Jimin entraba y salía de él. El rubio se acercó y lo besó. Se dejó caer hacia atrás y Jimin se subió encima de él, levantando sus piernas para penetrarlo con más ritmo.

Jungkook trataba de acallar sus gemidos con la almohada pero cada vez se volvía más complicado. El rubio clavaba estocadas justo en su punto, volviéndolo loco de placer.

- Dios Jungkookie, estás tan apretado. - dijo el mayor entre jadeos. - No creo que pueda aguantar mucho más.

El pelinegro lo agarró por la nuca y lo atrajo más hacia él para besarlo. Sus lenguas jugueteaban mientras sentía las penetraciones cada vez más fuertes y profundas de Jimin. Bajó su otra mano y comenzó a masturbarse a sí mismo, eso descontroló por completo al rubio que mordía su cuello y sus clavículas desesperado.

- ¿Quieres que salga? - le preguntó al oído sintiendo como estaba a punto de explotar. Jungkook bajó las piernas y lo rodeó por la cintura apretándolo con fuerza contra él.

- Te mato si lo haces. - le respondió entre gemidos.

Jimin completamente excitado por la actitud del menor, sintió una corriente eléctrica por todo su bajo vientre. Clavó fuertes estocadas dentro de menor, haciéndolo gemir contra la almohada, mientras sentía como su líquido caliente inundaba todo su interior.

Jungkook disfrutaba fascinado de la sensación sin dejar de masturbarse. El rubio lo observaba aún sin salir de su interior, quitó su mano con brusquedad y agachó la cabeza para introducirse su pene en la boca, el menor lo ayudó levantando las caderas.

Agarró su cabeza con fuerza mientras sentía como llenaba la boca de Jimin con su semen por segunda vez.

- Bendita flexibilidad. - pensó observando como el mayor se lamía las comisuras de los labios.

No me sueltes [JIKOOK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora