Back To The Academy ☂️ (Cinco y tú)

CAPÍTULO XLXVII

POV ___________

- No están fácil sin tus poderes - me afirmó La Encargada chistosa.

- ¿Por qué quiere La Comisión matar a mi familia? - le pregunté directamente.

- Eso ya lo sabes, cielo - me acarició la cara acercándose a mí.

- No me toques - movi la cabeza quitando su mano.

- Sois tan parecidos, tan iguales - me aseguró refiriéndose a Cinco y a mí - estáis enojados, ¿no es así? -

- ¿Tú lo sabes? Porque yo no tengo ni idea - le mentí.

- Yo creo que sí, te enojaste con él por estar conmigo a solas - me respondió ella orgullosa, yo me reí de ella.

- ¿En serio? ¿Crees que soy como tú? No me enojaria con él por ti porque sé que ni siquiera te soporta, no tendría nada contigo. Me enoje por no platicarme del trato que tenemos - le explique.

- En otro tiempo no dirías eso. ¿Tú de verdad crees que coquetería a un hombre si sé que nunca pasará o pasó nada? -

- No sé, dímelo tú ya que adoras hablar sobre ti -

- No - respondió ella su propia pregunta - entre Cinco y yo han pasado cosas antes de que se enamorará de ti, Número Ocho -

- Superarlo ya. Las personas cambian y se desenamoran - le aconseje.

- ¿Cómo es que tienes el rumor? - cambio de tema.

- ¿El rumor? - repetí haciendome la extrañada.

- Del que hablaste en el sueño, ¿cómo es que lo tienes? Según el libro de tu padre no lo tienes - me repitió ella.

- ¿Libro? - le pregunté volviendo a hacerme la que no sabía.

- Reginald tiene un libro con todos vuestros poderes, tú, ____________... -

- Mis poderes, las personas que habían a parte de los poderes nunca le importamos a Reginald - la interrumpi.

- Tus poderes ocupan 2 páginas en ese diario. Los he leído todos con detalles y no aparece el rumor de tu hermana, ¿cómo es que lo tienes? -

- Eso es porque yo no tengo el rumor - le contesté despreocupada.

- Intenta decir eso sin que se note de que mientes, cariño - me ordenó La Encargada.

- ¿Por qué tendría que decírtelo? - le cuestione daleando la cabeza.

- Por tu bien - me aconsejó, yo me reí.

- Platicame sobre ese trato tan importante que tienes con Cinco y conmigo y yo te platico como tengo el rumor - le pedí.

- Vosotros 2 matais a la junta directiva y yo os doy todo lo que necesitáis para resolver el apocalipsis - me explicó ella.

- Necesito más información - le pedí.

- Eres inteligente, con eso tienes suficiente -

- Por favor - susurre.

- ¿Cómo has dicho? - dijo divertida.

- Por favor - le repetí más fuerte - necesito más información, por favor, Encargada - ella se rio felizmente.

- Por fin, Número Ocho Hargreeves, aprendió a ser dócil con quien debe - me dijo riendo - muy bien cariño, lo estás haciendo muy bien - borró su risa y me miró seria - tienen una reunión en este año, no te diré más ya que es peligroso. Si lo hacéis los suecos dejarán en paz a tu familia -

- ¿Todos mis sueños de esta noche son obra tuya? - le volví a preguntar.

- Sí, además de tener todos tus recuerdos a mi disposición. Es una nueva actualización de La Comisión. Con este monitor vamos a verlos juntas -

- Disfrutas esto, ¿verdad? -

- Veamos la vez que Cinco se dio cuenta de que estuviste en La Comisión - optó La Encargada.

- Eres tan... -

- O cuando te quedaste atrapada en el apocalipsis sin encontrar a Número Cinco y sin poder volver - me interrumpió, yo la mire enfadada - también me gusta mucho la vez que casi mueres en el callejón, es tan estúpido lo que hiciste, es irónico que seas tan inteligente -

- Lo hice por ellos -

- ¿Y ellos qué han hecho por ti, corazón? - me cuestionó al igual que Chris hizo.

- Las relaciones sanas no necesitan recibir nada a cambio, es una pena que no conozcas esa sensación - le respondí después de unos segundos.

- Podemos ver cuando dejaste a Chris en coma o algunas de las torturas de Reginald - me ofreció.

- ¿Has esperado para torturarme y que los vea contigo? - le pregunté riendo.

- No he visto ni un solo recuerdo -

- Llevas aquí, ¿cuántas horas? ¿Sin hacer, absolutamente, nada? -

- Te he hecho tener pesadillas y las 7 horas que llevo aquí merecen la pena para hacer esto - me aseguró ella sonriendo.

- Enhorabuena porque tú estúpida mente no sabia nada de esto -

- Cariño, no estás en posición como para insultarme - me avisó.

- Yo creo que sí - utilice la súper-fuerza de Luther y me solté de la silla, con un movimiento de mano los cables cayeron al suelo - tú mente es retorcida, pero también tonta. Cuando replicaste el suero de Reginald no sabías algo que siempre lo ponía en desventaja, solo dura 6 o 7 horas, ni siquiera el podía mejorar su propio suero gracias a mi poder. No dejaba de torturarme porque tenía miedo a que me matara sino porque mi energía podía matarlo antes de que pueda tocarme un solo cabello de la cabeza - me levanté de la silla - no te mataré, pero sí yo fuera tú besaria los pies de Cinco allá por donde vaya porque gracias a él y al trato que tenemos sigues viva -

- Yo sí fuera tú tendría cuidado con los efectos secundarios que tiene nuestra versión, cariño - me advirtió La Encargada.

Me teletransporte a la casa de Elliot sin hacer caso a las últimas palabras de La Encargada.